Análisis de IRO HERO (PC, PS4, Xbox One, Switch)
Algunos géneros vienen y van, pero los matamarcianos son para siempre. Los shoot ‘em up son algunos de los juegos más antiguos de la historia de los videojuegos y, como todo género, tienen algunos exponentes que marcan un antes y un después. Uno de ellos es Ikaruga, que sigue dando guerra 17 años después de su lanzamiento, e inspirando a desarrolladores como los españoles Artax Games y su Iro Hero.
La lucha del color
Iro Hero es un shoot ‘em up o matamarcianos de toda la vida, en el que se introduce el relativamente conocido elemento de la polaridad, pudiendo cambiar entre rojo y azul para atacar y absorber los disparos enemigos del color opuesto.
Para quienes no estén familiarizados con este sistema, la idea es que si los disparos de enemigos azules no nos harán daño si tenemos activado el color azul, y nuestros disparos azules tampoco dañarán a los enemigos azules.
Lo mismo se aplica a los rojos. Así, nos veremos obligados a cambiar constantemente de color para poder eliminar a los enemigos y absorber sus disparos.
Hay mucho más, por supuesto. Iro Hero se guarda gran cantidad de obstáculos y mecánicas que nos obligarán a convertirnos en unos maestros de la polaridad. Desde plataformas en las que rebotarán nuestros disparos a barreras que cambiarán el color de los mismos, pasando por zonas que sólo podremos atravesar si nuestro color coincide con el suyo.
Hay un componente notable de puzle, estrategia o habilidad con los colores (o como queráis llamarlo), que generalmente es hasta más importante que disparar. Pocas veces vamos a morir de disparos, y muchas más veces por colisiones con el escenario o contra las otras naves. Muchas de ellas tienen patrones de ataques físicos, lanzándose contra nosotros para destruirnos al chocar.
Y hablando de las naves, tenemos que hablar también del interesante sistema de puntuación. Las naves aparecen en diferentes grupos, y eliminar al grupo completo dejan una esfera que tendremos que recoger para aumentar nuestra puntuación. Curiosamente, completar un nivel es relativamente fácil si no intentamos conseguir muchos puntos, por lo que el desafío está dirigido en realidad a quienes busquen constantemente superar sus puntuaciones..
Iro Hero tiene una dificultad un tanto extraña. Al principio, cualquier nivel se hace muy cuesta arriba, pero a poco que nos lo vayamos aprendiendo, podemos terminarlo. Incluso los jefes finales son bastante accesibles. Ahora, cuando empezamos a competir contra nosotros mismos o contra las clasificaciones en línea para superar las puntuaciones, se vuelve un título muy, muy exigente.
Esto hace que, en realidad, en este matamarcianos tengamos que hacer mucho más que matar marcianos. Es un juego que va a poner a prueba nuestros reflejos, sí, pero que también nos va a obligar a aprendernos los escenarios. Esto, quizás, no va a ser algo que agrade a todos, ya que independientemente de nuestra habilidad controlando la nave y disparando, aprenderte el recorrido es clave para progresar. Por esto, precisamente, nos ha chocado un poco también que el control no sea todo lo bueno que nos gustaría. El movimiento de la nave se hace poco preciso en los momentos más exigentes y puede jugarnos malas pasadas.
Un envoltorio con altibajos
Iro Hero se presenta con una acertadísima estética retro, con gráficos pixelados que le sientan genial al género. Poco podemos criticar de su puesta en escena durante la jugabilidad, aunque sí que creemos que las secuencias de "vídeo" (imágenes estáticas en las que se mueve la cámara) podrían haberse trabajado un poco más. La historia, en la que los extraterrestres enseñan a los humanos a generar energía con su cuerpo para poder explotarlos, es interesante, y estas secuencias la deslucen bastante.
Tampoco nos ha terminado de convencer que nos la cuenten mientras jugamos. Sí, a veces la acción se frena para que podamos leer, pero estás tan metido en la partida que lo último que quieres hacer es quitar los ojos de la batalla. También nos habría gustado ver un modo vertical para Switch, una adición que siempre se agradece en géneros como éste en la máquina de Nintendo.
En lo sonoro, la verdad es que nos ha convencido. La banda sonora, también inspirada por los clásicos MIDI, tiene algunos temas de mucha calidad que nos han gustado mucho. Voces no hay, pero sí que tenemos textos en castellano.
Sabor clásico con su toque personal
Iro Hero es un juego con claras influencias dentro de los shoot ‘em up, pero también con personalidad propia. Es un juego que va a resultar muy divisor por su particular dificultad (o diseño, en función de cómo se mire), pero que nosotros hemos disfrutado bastante. Es cierto que tiene aspectos importantes a mejorar, como la precisión del control, pero en general es un título recomendable para los que quieran un nuevo matamarcianos.
Hemos realizado este análisis en Nintendo Switch.