Análisis de Her Story (PC, iPhone)

Al igual que nos quejamos de la falta de originalidad en la industria, también celebramos cuando un juego consigue romper muchos de los esquemas habituales del momento, y más, si encima lo hace así de bien. Her Story nos llega de la mano de Sam Barlow, responsable de las dos entregas originalmente portátiles de Silent Hill, Silent Hill Origins y Silent Hill: Shattered Memories. Ahora rompe con lo visto en la saga de Konami para ofrecernos una experiencia de lo más original.

¿Un simulador de detective?

Sobre el papel, Her Story puede parecer el tedio hecho videojuego.

¿Por qué? Porque tenemos que sentarnos frente a un ordenador y revisar decenas, si no cientos de vídeos para intentar resolver un asesinato. Nuestra pantalla del ordenador es la pantalla de lo que parece ser la computadora de un departamento de policía o algún tipo de entidad federal, con acceso a los diferentes testimonios de una mujer acusada de acabar con su marido.

A excepción de algunos pequeños programas y documentos adicionales que encontramos en el escritorio virtual, en Her Story sólo podemos buscar palabras, que nos darán los cinco primeros vídeos (ordenados en el orden en el que se grabaron) en los que la sospechosa dice esa palabra. Si, por ejemplo, buscamos "MURDER", veremos los cinco primeros clips en los que la protagonista menciona "murder", a pesar de que puede que, en total, haya 15 vídeos en los que lo diga.

¿Por qué nos limita los vídeos? La idea del juego es dosificar la historia a la vez que obliga al jugador a pensar. Quizás, al buscar tal palabra, la protagonista dirá algo que se convierta en una nueva pista para seguir buscando. Si prestamos atención, veremos cómo se irán mencionando lugares, personas, objetos y otros elementos que nos permitirán "progresar". Si pudiésemos ver todos los vídeos en los que se dice una palabra completa podríamos ver los últimos testimonios demasiado pronto, y no sólo rompería la fórmula, sino que no entenderíamos muchas cosas.

Sobre el papel puede parecer complicado, pero creednos cuando os decimos que está todo medido no sólo para que funcione su jugabilidad, sino para que la historia cobre sentido. Y es que Her Story rompe los pilares tradicionales tanto de lo narrativo como de lo jugable. La interacción es increíblemente sencilla, y la manera de contar la historia es impredecible, con decenas de fragmentos repartidos para que le demos forma en nuestra cabeza.

En nuestro caso, prácticamente sin darnos cuenta, estábamos tomando notas, pintando con lápiz en la mesa del ordenador, estableciendo relaciones y apuntando palabras claves para que no se nos olvidasen mientras veíamos otros vídeos, o tachando las que ya habíamos usado para no repetirnos. Este título te hace sentirte un detective "de verdad", pensar, analizar cómo actúa la interrogada e intentar unir piezas con lo que creemos que es verdad y lo que no.

Aquí no vamos a contar nada sobre su historia, pero os podemos adelantar que nos ha encantado. Probablemente, está lejos de lo que esperáis, pero incluso con su desarrollo tan imprevisible para el propio desarrollador, está todo medido para que haya sorpresas, giros inesperados y momentos de auténtica incredulidad. Lo mejor (seguramente también lo peor para otros) es que no tiene un final como tal.

Lo bueno empieza cuando acaba

Her Story no tiene un final como tal. El juego nos da la opción de "terminar" en un determinado momento, una vez que hayamos progresado lo suficiente como para atar al menos algunos de los cabos. Tras esto nos da algunas ayudas para continuar explorando las declaraciones y seguir dándole forma a la historia, pero en ningún momento nos dice si pasó tal o pasó cual.

Cuando el juego termina es cuando empezamos a entender parte de lo que sucede, y en función de lo que hayamos visto, podremos decir si damos por cerrada la historia o si seguimos explorando. El objetivo final sería ver todos los vídeos, donde la protagonista narra la historia de manera cronológica, algo que nos será de mucha ayuda para conseguir obtener una perspectiva general del relato.

Eso sí, incluso cuando hemos visto todo, quedarán diferentes elementos abiertos a interpretación, por lo que no todo el mundo entenderá la historia de la misma manera al cien por cien. Nosotros estamos bastante convencidos de nuestra interpretación, pero hemos hablado con otros compañeros que también han completado el juego, y no están de acuerdo con nosotros. Precisamente, esto nos ha recordado a los juegos de la saga Silent Hill; terminar y comenzar a especular sobre la historia, intentar dar forma a un argumento oscuro y retorcido donde no todo tiene una única interpretación.

Una experiencia única

Her Story es un juego breve (puede completarse de una sentada; ver todo nos llevará algo más), pero intenso, original y único. Su jugabilidad tremendamente accesible, su respeto por el jugador y su narrativa despedazada que nos obliga a montar decenas de elementos en nuestra cabeza lo convierten en un título prácticamente sin igual, que a pesar de hacernos sentir un poco confusos y reticentes al principio, nos ha atrapado hasta más allá de su final.

Su mayor problema puede ser que esté sólo en inglés –y además, por su naturaleza jugable sería muy difícil de traducir–, pero más allá de esta hipotética barrera, creemos que Her Story es un juego que hay que probar. Es un juego que te hace tomar notas, te hace pensar y confía en tu inteligencia, y que además lo hace con una historia oscura y bien llevada que se queda en tu mente incluso después de haber llegado a su final. O a lo más parecido a un final que tiene.