Análisis de Football Manager 2014 (PC)

El grueso de los aficionados al fútbol, somos animales de costumbres y de liturgias. Descontando las habituales manías y supersticiones que muchos atesoran como hábitos incuestionables de cara a ver ganar a su equipo, nos encontramos con ineludibles citas anuales en el ámbito del videojuego deportivo, que en los últimos tiempos, es una extensión más del entramado deportivo que nos envuelve en nuestro país. Viendo un poco más allá de la habitual dicotomía de FIFA y PES -Konami y EA siempre se encargan de disputarse el trono del simulador deportivo en las consolas de medio mundo, estando la balanza más a favor de los canadienses que de los japoneses-, existe un terreno, centrado en la gestión y la táctica, donde Football Manager es la casi absoluta referencia.

Football Manager, para todo aquel neófito o despistado, es un simulador de gestión deportiva, donde encarnaremos la totémica figura del manager deportivo de un club de fútbol. A nuestro alrededor, orbitarán jugadores, técnicos, miembros de la directiva y periodistas. Deberemos dirigir con férrea convicción a nuestro equipo de fútbol preferido, intentando lograr tantos éxitos como estén en nuestra mano, y asegurándonos el porvenir en el futuro como entrenadores. No será fácil, pero os aseguramos que es lo suficientemente divertido como para tenernos enganchados durante meses. Prácticamente, como todos los años.

Football Manager 14 tiene la dificultosa misión de parecer -y ser- una entrega más atractiva que su ya de por sí redonda edición anterior, una de las mejores de los últimos tiempos. Desde Sports Interactive Games, año tras año, han ido perfilando y buscando la fórmula perfecta para trasladar la compleja y entramada sensación de dirigir y gestionar un club de fútbol, y pese a algún que otro error -que se pierde en la inmensidad de aciertos conseguidos-, la verdad es que siempre han por la senda correcta. Este año, tampoco será una excepción.

La cuadratura del círculo: buscando la perfección dentro de la gestión deportiva

No es fácil mejorar lo inmejorable. Football Manager 13 no era un juego perfecto, ni mucho menos, pero sí ofrecía ciertos aspectos perfeccionados y buscaba avanzar varios enteros en la experiencia global de juego. Sports Interactive introdujo ciertos cambios reclamados por la amplia comunidad de jugadores que arrastra el título, y enarboló como atractivos principales determinadas mejoras esperadas durante años. Football Manager 2014 es una entrega, en líneas generales, conservadora. Ha mantenido intactas ciertas características, y ha decidido simplificar o remodelar otras. El interés de Sports Interactive en hacer a su franquicia un conglomerado táctico más accesible ha llevado a la desarrolladora a incluir ciertos elementos contextuales y menús simplificados, pero que mantienen una línea conservadora con respecto a la edición del año pasado.

Los primeros pasos en esta edición de 2014, son idénticos a los vistos en anteriores entregas. Es decir, como si de un ritual se tratase, volveremos a introducir nuestros datos personales, nuestras preferencias deportivas -donde marcaremos y seleccionaremos al club que llevamos dentro- y donde especificaremos determinados parámetros en lo referente a nuestro perfil. Los menús han cambiado para mejor, siendo más claros e intuitivos, y relegando a un segundo plano mucha de la información menos importante.

Lo más chocante quizás sea el cambio de gama y color de la interfaz, que abandona el negro y el gris por un más que bien avenido blanco. Esto nos trae a Football Manager 14 un estilo -paradójicamente- más sobrio y limpio, ahondando por la comodidad visual reclamada por algunos usuarios, y siguiendo la estela de los últimos avances en interfaces y sistemas operativos -es inevitable pensar en ciertos aspectos de iOS 7 cuando estamos jugando-. El cambio de distribución gráfica beneficia lo suficiente al juego como para dotarle de una renovada personalidad y fluidez -así como de jerga o argot, más cercana al mundo del fútbol-, algo que comenzaremos a vislumbrar y comprender conforme pasen los minutos delante de la pantalla y nos hagamos a la nueva distribución de algunos menús, opciones y elementos.

La bandeja de entrada ha sido simplificada -tenemos un nuevos sistema de etiquetas de color que nos permite ser más eficientes a la hora de catalogar y contestar los distintos correos-, y el sistema de noticias también ha sufrido una revisión. Otro interesante añadido -relacionado íntimamente con el vuelco absoluto de Sports Interactive hacia la plataforma digital de Steam- es la posibilidad de jugar en pantalla de televisión. Si tenemos nuestro PC o Mac conectado a un televisor en alta definición, podemos disfrutar de una interfaz adaptada -con 75% y 95% de zoom-, algo ideal para hacer más grande -y cómoda- la experiencia de dirigir un club.

La base y la oferta jugable de Football Manager 2014, sigue intacta. El juego de Sports Interactive sigue ofreciendo la mayor base de datos de equipos, ligas nacionales -más de un centenar- y jugadores del panorama, con más de 146.000 fichas completamente actualizadas y diferentes con respecto a ediciones anteriores. En cada versión, se intenta trasladar la convulsa actualidad deportiva trastocando y configurando al milímetro ciertas características y estadísticas, y esta edición no es ninguna excepción. Como siempre, es el jugador el que lleva la batuta de la experiencia, escogiendo ligas y competiciones a jugar -las ligas española, inglesa o italiana suelen ser muy exigentes-, personalizando la experiencia de juego a placer. Este año por primera vez, tenemos una versión de Football Manager 14 funcionando bajo el entorno Linux de forma nativa, toda una acertada decisión que acerca las bondades jugables del título de Sports Interactive a una comunidad de jugadores cada vez más grande y deseosa de probar nuevos juegos en su sistema operativo.

Otro acertado cambio, íntimamente relacionado con la enorme labor de recogida de datos oficiales y equivalentes a sus homólogos reales, es la decisión de permitir que la comunidad perfeccione y actualice la citada pantagruélica base de datos. Sports Interactive, con atino, ha decidido hacer su juego plenamente compatible con el sistema Steam Workshop, lo que permite que la comunidad pueda corregir elementos, añadir fotografías o retocar características del juego a fin de crear un entramado viviente y dinámico alrededor del ecosistema del título. De esta manera, Football Manager 14 puede convertirse en un juego redondo y completo ad eternum.

Tres experiencias de juego: miles de maneras de dirigir un banquillo

Al igual que en las últimas ediciones, Football Manager 2014 nos brinda dos experiencias de juego similares, aunque adaptadas a las exigencias de cada jugador. Football Manager, seguirá recogiendo el máximo compendio jugable posible, con las opciones más completas y complejas, mientras que la opción Football Manager Classic simplificará las cosas -reduciendo la base de datos a tres ligas o naciones-, y ahorrando ciertos malos tragos al jugador, que tendrá una partida más sencilla en opciones, aunque igualmente plagada de retos. Como curiosidad, cabe recalcar que dicho modo de juego permitirá el juego cruzado con la versión de PS Vita, ofreciéndonos la posibilidad de sincronizar partidas o intercambiar datos, siendo el juego en la versión portátil una inteligente extensión del título para ordenadores. Si no habéis jugado nunca a ninguna versión de Football Manager, os recomendamos encarecidamente que probéis a empezar por dicha partida simplificada: es ideal para hacerse con la mecánica de juego.

También vuelve el modo desafíos, uno de los añadidos del año pasado. Ideal para aquellos jugadores que busquen experiencias fuertes y partidas imposibles, esta colección de retos nos enfrentaremos a determinados condicionantes externos y a concretas condiciones de victoria a la hora de realizar nuestra partida. Por ejemplo, se nos invitará a ganar la liga con un equipo humilde, a conseguir la permanencia en una temporada difícil o a hacer frente a las presiones económicas de la junta directiva con una plantilla plagada de lesiones, entre otros muchos escenarios. Este modo garantiza unas cuantas horas extras a la ya de por sí sólida y longeva propuesta jugable de Sports Interactive, a lo que se suma la promesa de la desarrolladora por lanzar un editor a través de Steam Workshop que permitirá a los jugadores y usuarios crear sus propios desafíos y retos personalizados.

Como os relatábamos al comienzo del análisis, desde el estudio responsable de este Football Manager 2014 se ha buscado ajustar todos esos cabos sueltos de la edición anterior, intentando lograr una experiencia jugable más fluida, cohesionada y realista. El año pasado, se apostó firmemente por realzar la interacción con la plantilla, que comenzaba a tener perfiles psicológicos marcados y diferenciados según las situaciones por las que atravesaba el club y el equipo. Football Manager 2014 va un paso más allá, ya que eleva dicha interacción hacia otros estamentos del club y la junta directiva, que tiene más peso que nunca.

Perfiles psicológicos, tácticos y físicos: una nueva dimensión jugable

De esta forma, se nos invitará a participar en continuas reuniones y talleres con la junta directiva y el resto del cuerpo técnico, donde discutiremos desde cuestiones presupuestarias -las más constantes, y las que marcarán el futuro de nuestra plantilla-, acuerdos económicos con patrocinadores, mejora de instalaciones o temas relacionados con la deriva deportiva del club. Nuestra manera de plantear dichas situaciones rubricará de forma evidente nuestro destino como managers del club, ya que se nos interrogará y cuestionará en repetidas ocasiones casi cualquier aspecto de nuestro trabajo. Por ejemplo, si llegamos a proponer un juego espectacular y no se acaba dando sobre el terreno de juego, deberemos dar explicaciones, al igual que si solemos renegar con asiduidad de las ruedas de prensa -que este año es más inquisidora y específica, al igual que nuestras posibles respuestas-. En resumidas cuentas, Sports Interactive ha querido dejar patente la sensación de que cada paso, cada opción tomada y escogida, tendrá repercusión directa en nuestro futuro.

Este nuevo humus de opciones en los despachos, es el caldo de cultivo jugable perfecto para redondear otras opciones vistas en anteriores títulos o ediciones en lo referente a los banquillos. Nuestro cuerpo técnico ahora tiene más voz y voto, y nuestros jugadores son mucho más moldeables -y maleables- a determinadas situaciones. Ahora pueden permanecer descontentos si no jugado lo suficiente, tendremos a jugadores reacios a firmar contratos de renovación o incluso a jugadores acomodaticios una vez firmen sus contratos. Las señales -si decidimos captarlas- pueden ser muchas: desde un partido nefasto donde el jugador no se entrega lo suficiente, a unas declaraciones, pasando por un aviso de su representante. En Football Manager 2014 todo es más completo y profundo en este aspecto, ya que por primera vez, se desprende esa sensación de ecosistema interno único inherente a cada club o plantilla. No solo hablamos de la opción de delegar tareas secundarias a nuestro segundo -una de las opciones incluidas el año pasado, y que nos rebajaba en varios enteros la carga de trabajo-, ni de motivar a nuestros jugadores cuando estén en bajo estado psicológico, os estamos hablando de que se ha perfeccionado la relación entre plantilla y personal, así como la compra, renovación y cesión de jugadores.

En Football Manager 2014 se ha incluido por primera vez la posibilidad de fichar a un jugador, y acto seguido, instalarle a permanecer cedido en su club originario. Esto aborda la temática de los fichajes desde una nueva perspectiva de cara al manager, que podrá decidir si traerlo directamente a jugar en nuestro equipo, o recomendarle que siga ganando experiencia en su antiguo club. La aparición de otros managers, representantes y club rivales en las negociaciones y traspasos complican aún más nuestras operaciones, ya que aparecen novedades en las cláusulas y las regalías. Estos condicionantes, por ejemplo, podrán ser de índole deportiva -un determinado jugador puede poner como condición para su contrato por nuestro club que necesita jugar un número de horas en concreto- o de índole económica -se nos pedirán ingentes cantidades de dinero en algunos contratos-. Podemos llegar a negar algunas de ellas, pero si queremos ser atractivos de cara a nuestro posible fichaje, debemos saber aceptar y negociar, claudicando en el momento oportuno.

Dejando a un lado las negociaciones, la junta directa o las nuevas condiciones en los fichajes y cesiones, en Football Manager 2014 también encontraremos profundos cambios en cuanto a táctica. Desde Sports Interactive se han propuesto revisar por completo el motor y el proceso de creación de tácticas. Ahora son más concretas y específicas, así como más accesibles, ya que permiten cambiar por completo la tarea táctica o estratégica de un jugador o la actitud de nuestro equipo sobre el terreno de juego. La IA de nuestros rivales es más propensa a ponernos las cosas difíciles, planteándonos partidos duros, y demostrándonos que por mucho que estemos duchos en determinadas lindes y situaciones, hasta el equipo más humilde nos puede dar jaque mate. Hay ocasiones en las que los encuentros se nos pueden poner cuesta arriba, y donde por muchas figuras o cracks de talla mundial que atesoremos en nuestro equipo -los Messi, Neymar, Bale o Cristiano Ronaldo pueden salvarnos las papeletas, sí, pero no son infalibles-, caeremos sin remisión, algo que nos da perspectiva en conjunto de lo importante que somos como jugador en el papel de manager y entrenador.

Durante los partidos recibiremos un streaming constante de consejos, que nos permitirán reaccionar ipso facto ante cualquier error en nuestro planteamiento. Una vez más, en Football Manager 2014 se recomienda elaborar y plantear todo este trabajo técnico y táctico antes de cada partido, ya que con el calendario único -esa anábasis deportiva que nos obliga a competir en una multitud de torneos, ligas y campeonatos en caso de ser responsables de un club grande-, un error -o varios de ellos- en el césped se puede llegar a traducir en una temporada en negativo sin acceso a títulos, y eso sí que no nos lo podemos permitir. Si no queremos complicarnos… Siempre podemos simular el resultado del partido y olvidarnos de quebraderos de cabeza.

En el apartado gráfico, y relacionado con el sistema de partidos también se han hecho numerosos cambios y ajustes. Sports Interactive ha incluido sendas mejoras en el sistema de partidos en 3D, con nuevas animaciones de jugadores -ahora podemos leer la actitud de nuestro conjunto en función de su forma de moverse o jugar en el campo-, reformados efectos de luz -más realistas- y modelados más consistentes. En Football Manager 2014 se ha procurado aludir a esa sensación de retransmisión deportiva televisiva, incluyendo nuevas pinceladas gráficos y técnicas en ese aspecto. Desgraciadamente, pese a los cambios introducidos, seguimos encontrándonos con un paupérrimo motor gráfico tridimensional, desfasado y varios enteros por debajo de lo que un simulador de gestión deportiva debería tener bajo su capó. Sí, Football Manager ofrece dicho modo de visualización en 3D como extra, pero dada la importancia de la actitud física y psicológica en esta edición, ¿por qué no dar un salto hacia adelante adoptando un nuevo sistema de gráficos y modelados? Es, sin duda, uno de los aspectos pendientes de la saga, algo que deseamos fervientemente en futuras ediciones.

Como ya viene siendo tónica, Football Manager 2014 ofrece conexiones con todo tipo de redes sociales, como Facebook o Twitter, así como la nueva y mejorada capacidad para exportar vídeos de nuestras jugadas, partidos o cambios tácticos a través de Youtube. Así mismo, si jugamos en Mac, observaremos como se han añadido sustanciales mejoras, siendo compatible todo el juego con la pantalla retina de los nuevos ordenadores MacBook Pro y con el modo a pantalla completa introducido en las más recientes versiones de OS X. Otra de las novedades incluidas, es la posibilidad de guardar nuestras partidas en la nube, algo que nos permitirá continuar con nuestra partida en cualquier ordenador y sistema operativo, ya sea Mac, Linux o PC, sin problema de incompatibilidad entre plataforma -siempre y cuando iniciemos sesión en Steam-.

Conclusiones finales

Football Manager 2014 es, hasta la fecha, la mejor versión del simulador de gestión deportiva de Sports Interactive. No hay duda alguna, aunque también recalcamos que es lo lógico y esperable al tratarse de una saga anual. Los cambios, mejoras y actualizaciones llevadas a cabo en este Football Manager 2014 han encajado como un guante dentro del conglomerado deportivo de las ediciones anteriores, algo que no siempre es fácil. Su propuesta jugable sigue siendo enorme, rica y adaptable o escalable a casi cualquier tipo de jugador -desde el ávido veterano con experiencia y galones, al jugador que se acerca por primera vez a la franquicia-, algo que lo hace ganar muchos enteros a la hora de abarcar a su público potencial. No hay que olvidar que estamos ante un juego largo, casi infinito, que ahora recibirá actualizaciones constantes por parte de la comunidad a través de Steam.

La única duda, es si su compra merece la pena si adquirimos la edición del año anterior. Desde una perspectiva lógica, y en función a las novedades incluidas en esta versión, os diremos que sí. Dicha recomendación se convierte en un auto de obligación si hace tiempo que no os paseáis por sus bondades. Football Manager 2014 es más que una simple actualización o una vana declaración de intenciones. Es una fehaciente prueba jugable y técnica que constata que en dicho género, sobre todo si os gusta y amáis las interioridades del deporte rey, no hay otra opción a considerar. Sports Interactive tiene sus manos la mejor y más completa experiencia de juego posible en su respectivo campo.