Análisis de Blue Dragon: Awakened Shadow (NDS)
Blue Dragon es una serie bastante reciente ya que ha comenzado esta generación, pero eso no ha impedido que ya tenga tres entregas para dos consolas diferentes. La primera de ellas apareció en Xbox 360 y ha sido sin duda el título más importante de los tres. Creado por Mistwalker, empresa fundada por el creador de Final Fantasy, supuso un movimiento muy interesante por parte de Microsoft, ya que el título salió en exclusiva para su máquina. El juego levantó mucha expectación, ya que además de tener detrás al padre de una saga tan importante como Final Fantasy, contaba con los diseños de Akira Toriyama. Lamentablemente el juego no tuvo una acogida tan buena como cabía esperar en un principio y muchos le achacaron un aspecto demasiado infantil (entre otras cosas). Quizás por estas críticas se decidió sacar una nueva entrega en Nintendo DS, un mercado donde a priori la serie encajaría mejor. Así se lanzó un juego de estrategia por turnos que no debió funcionar del todo mal, pues ahora nos encontramos con una nueva entrega para la consola de Nintendo, aunque vuelve a cambiar la mecánica de juego otra vez.
Despiértate en un mundo conocido, pero nuevo
El argumento del juego nos sitúa tras el final del primer título, con un mundo dividido en distintos cubos donde se han fundado las ciudades. Tras ver como despiertan dos personajes de la raza de Nené (el enemigo del primer juego) pasamos a controlar a un personaje que nos habremos creado previamente con un editor. Despertamos en lo que parece un complejo futurista y recorriéndolo nos encontramos con un ascensor que nos lleva hasta Nuevo Yibral, donde conoceremos a Shu, Kluke y Yiro, entre otros. Aquí también descubriremos que una extraña luz apareció del cielo y "absorbió" las sombras de la gente, haciendo que pierdan así sus poderes. Pero extrañamente nosotros conservamos nuestra sombra y, lo que es más importante, podemos compartir nuestra energía con nuestros compañeros para que ellos vuelvan a tener una. Así, la historia nos llevará a buscar la razón de este fenómeno y ver que está ocurriendo.
La historia comienza bien, pero lamentablemente pronto queda en un segundo plano ya que el juego avanza a base de misiones, la mayoría de las cuales no tienen relación con la historia. Así, mientras estamos preocupados por tratar de averiguar qué ha pasado y tenemos curiosidad por ver como avanza el argumento, debemos ayudar a Kluke a limpiar de monstruos su consulta o ayudar a Shu y a Yiro a recoger hierbas. Entendemos que las misiones secundarias son importantes para añadir contenido al juego, pero es que en este juego prácticamente todas las misiones que vemos parecen ser de relleno (incluso las que son obligatorias para avanzar en la trama parecen no aportar mucho a la misma) lo que hace que no tengamos sensación de estar avanzando en la historia del juego, restando así parte del incentivo de jugar.
Afortunadamente, aunque la historia no nos enganchará tanto como nos hubiese gustado, debemos decir que el sistema de combate si es lo suficientemente divertido como para incentivarnos a jugar. Para ello podremos controlar el personaje tanto con el lápiz táctil como con los botones de la consola y atacaremos a los enemigos con nuestras armas pinchando sobre ellos o con el botón A. como una de las gracias del mundo de Blue Dragon es el uso de las sombras, aquí también podremos contar con la ayuda de sus poderes.
En cada momento tendremos a nuestra disposición tres hechizos (según vayamos subiendo de nivel tendremos más entre los que elegir, pero sólo podremos llevar tres equipados) que podrán ser tanto defensivos como ofensivos o curativos, entre otros. Mientras tengamos puntos de magia (los cuales se irán regenerando automáticamente, por lo que no supondrán un excesivo problema) podremos cargar el ataque pulsando A o con el lápiz sobre el icono correspondiente. Una vez lanzado deberemos esperar unos segundos para volver a lanzarlo, por lo que será importante elegir bien cual usar, sobre todo en las batallas contra los jefes, ya que pasaremos unos valiosos segundos sin poder volver a usar otro.
No estarás solo
Pero además de por nuestras sombras estaremos acompañados por otros amigos, formando un grupo de hasta tres integrantes máximos. Estos personajes podremos elegirnos desde un punto de guardado azul de entre todos los que se hayan unido a nosotros (algo que conseguiremos finalizando misiones). En general actúan bien, aunque su inteligencia artificial es algo limitada y en más de una ocasión nos dejarán vendidos ante los enemigos, viendo como aparece la pantalla de Game Over frente a nosotros. Se echa en falta poder darles órdenes o indicaciones, aunque al menos podremos decidir que sombra queremos que tengan y con esto conseguir un comportamiento u otro.
Y es que cada sombra se centra en un estilo, ya sea ofensivo, poner estados positivos a los amigos, negativos a los monstruos o incluso recibiendo el daño y defendiendo a los otros. Tendremos seis sombras para elegir, aunque inicialmente sólo podremos escoger entre tres, y además de para nuestros compañeros, también deberemos escoger una para nuestro personaje, pudiendo cambiarla en cualquier momento. De cualquier modo, aunque puede molestarnos en algún momento, la IA es suficientemente buena como para hacer que se pueda jugar sin problemas, aunque mucho más interesante es la posibilidad de jugar contra otros amigos humanos, ya sea en Wifi local o a través de internet. Para ello uno de los jugadores hará de anfitrión y los otros podrán viajar a su mundo, consiguiendo así una experiencia de juego mucho más satisfactoria.
Además de nuestras sombras y sus ataques, será muy importante el equipamiento que llevaremos, y es que a lo largo de las mazmorras encontraremos distintos objetos, ya sea equipo u objetos que podremos combinar. Así, al poco de comenzar el juego tendremos acceso a un lugar donde combinar distintos objetos para así mejorar nuestras armas y armaduras o para crear objetos totalmente nuevos que nos pongan las cosas más fáciles. Hacer uso de esta posibilidad será muy recomendable, ya que nos pondrán las cosas mucho más fáciles frente a los enemigos, permitiéndonos explorar sus debilidades elementales y de paso protegernos ante sus ataques más fuertes. La forma de hacer las combinaciones es sencilla y en todo momento sabremos cual será el resultado. Además, tendremos una lista en la que se nos sugerirán ciertas mezclas, por lo que será bastante fácil de utilizar.
Gráficamente el juego presenta un motor bastante sólido y con un acabado bastante bueno. El diseño artístico es muy bueno, manteniendo la base del de Xbox 360 e incluso añadiendo mayor variedad en algún aspecto, como los personajes no jugadores (que aquí tienen una variedad mucho mayor). Los viejos conocidos son perfectamente reconocibles ya que los modelados de los personajes cuentan con muy bien nivel de detalle y los escenarios son bastante amplios y detallados. El punto negativo lo tiene la tasa de imágenes por segundo, y es que no es demasiado alta, haciendo que el juego no vaya tan suave como nos hubiese gustado, aunque no se hace injugable en ningún caso. Debemos destacar que de vez en cuando nos encontraremos con secuencias de vídeo realizadas con el motor de la versión de Xbox 360 que le dan una gran espectacularidad al juego.
En el apartado sonoro nos encontramos con buenas composiciones y efectos de sonido muy adecuados. Como nota curiosa debemos decir que aunque los personajes hablan con "ruiditos" (cada uno con su propia voz, eso sí) de vez en cuando en alguna escena y de forma casi aleatoria, los personajes protagonistas soltarán alguna frase hablada (en inglés) para, posteriormente, seguir hablando en ruiditos. Da una sensación extraña, la verdad, porque los momentos en los que hablan no siempre son importantes y queda raro. Debemos comentar también que el juego viene totalmente traducido a nuestro idioma, por lo que no habrá ningún impedimento para disfrutarlo.
Correcto pero se echa algo en falta
En general este Blue Dragon: Awakened Shadow es un buen título que es correcto en todos sus apartados, aunque no sorprende en ninguno de ellos. Lo cierto es que aunque todo por separado funciona, al jugarlo sentimos que le falta algo que hace que nos termine de enganchar como lo hacen otros juegos. Quizás sea por la historia a la que le cuesta engancharnos o por el sistema de misiones que no termina de funcionar o por un diseño de niveles no del todo inspirado, pero lo cierto es que el falta algo. Aún así, es un título al que si le damos una oportunidad nos divertirá, especialmente si podemos jugar con otros amigos, y desde el luego creemos que gustará a los aficionados al género ya que cuenta con un buen nivel en todos sus apartados.