Análisis de Phoenix Wright: Ace Attorney - Dual Destinies eShop (Nintendo 3DS, iPhone)

Si hace unos años nos hubieran dicho que encarnar a un abogado en un videojuego sería una de las experiencias más divertidas que nuestro hobby favorito nos podría llegar a ofrecer, probablemente hubiéramos arqueado la ceja y pensado que nuestro interlocutor se encontraba delirando sin saber de lo que hablaba. Pero tras haber disfrutado de la magnífica trilogía protagonizada por el carismático Phoenix Wright, nuestras ganas de nuevos juegos con los que volver a poner a prueba nuestro ingenio en surrealistas juicios mientras desgranamos enrevesadas tramas argumentales y resolvemos asesinatos imposibles no pueden ser más altas.

Tras aquella trilogía han hecho falta cinco años para que Wright volviera por la puerta grande para deleitarnos, tiempo en el cual hemos recibido entremeses como el descafeinado Ace Attorney: Apollo Justice (la cuarta entrega de la saga) y dos spin-offs protagonizados por Miles Edgeworth, probablemente el fiscal más carismático que nos ha dejado la serie, aunque de sus dos juegos solo consiguió llegarnos el primero.

Phoenix Wright: Ace Attorney - Dual Destinies también supone el estreno de la saga en Nintendo 3DS, un cambio de plataforma que le ha sentado de maravilla, tal y como iremos viendo en este análisis, aunque por desgracia las condiciones en las que nos ha llegado no hacen justicia a lo que los fans europeos de este abogado se merecen.

Una historia a la altura de la saga

Al igual que sus predecesores, esta quinta entrega basa su propuesta jugable prácticamente en su argumento, ya que en realidad nos encontramos ante una especie de novela interactiva en la que vamos avanzando leyendo ingentes cantidades de texto mientras procuramos no perdernos ningún detalle de todo lo que se dice. Por este motivo, prescindiremos de contaros nada más sobre él para no arruinaros posibles sorpresas.

Decir que Capcom se ha volcado mucho en él, ya que la vuelta a la abogacía de Wright tras su retiro temporal era algo que tenía que hacerse bien y a lo grande. Esto se traduce en una serie de casos que conseguirán engancharnos sin remedio de principio a fin mientras de fondo se va desarrollando una trama que los va hilando hasta llegar a su genial juicio final, donde como siempre, todo comenzará a encajar para dejarnos con la boca abierta.

Ninguno de estos capítulos hemos llegado a sentirlos como si fueran "de relleno", como el interminable caso del Samurái de Acero de la primera entrega y otros similares que parecían incluidos solo para aumentar la duración de sus predecesores. Además, los personajes secundarios siguen siendo tan pintorescos y estrafalarios como siempre y los nuevos protagonistas nos han gustado mucho, en especial Athena Cykes, la nueva y entusiasta ayudante de Phoenix, y Simon Blackquill, el misterioso fiscal que se encargará de ponernos las cosas difíciles en esta ocasión, uno de los que más nos han gustado de toda la saga. Y para los más fans, decir que podéis estar tranquilos, ya que también regresan muchos viejos conocidos.

Si no habéis jugado nunca antes a un juego de esta serie, avisaros que estamos ante un título que podríamos clasificar como "muy japonés". Que tengamos que resolver asesinatos y participar en juicios no significa que sea un juego serio y aburrido, todo lo contrario. Cada dos por tres el título se las apañará para sacarnos una sonrisa con sus surrealistas situaciones y sus divertidos diálogos, lo que se acaba traduciendo en juicios que casi parecen más un circo que algo en lo que se decide la vida de una persona. Solo hay que ver cosas como el confeti que le tiran a los acusados cuando conseguimos que sean declarados inocentes o al halcón de Blackquill atacando a todo el que le moleste en mitad de un juicio para que os hagáis una idea de lo que os llegaréis a encontrar.

Juicios e investigaciones

En cuanto a su jugabilidad, el título divide su desarrollo en dos partes bien diferenciadas: investigación y juicios. La primera de ellas son algo lentas y nuestro objetivo será hablar con la gente, examinar las escenas de los crímenes en busca de pistas, y en definitiva, recopilar todos los datos y pruebas que podamos para saber cómo encaminar el juicio. A pesar de ello, son momentos muy importantes que nos ayudarán a sumergirnos en los casos para que nos sintamos mucho más implicados cuando vayamos a defender a nuestro cliente.

Como novedad, ahora cuando examinemos un sitio podremos hacerlo desde distintos ángulos para encontrar pistas que de otra forma no serían visibles. Además, difícilmente nos quedaremos atascados, ya que contaremos con un cuaderno donde encontraremos anotados todos nuestros objetivos, especificándonos incluso los objetos que tenemos que presentar para que la trama avance. Aquí también podremos repasar todo lo que sabemos sobre el caso, algo que nos vendrá muy bien para refrescar la memoria cuando pasemos un tiempo sin jugar.

Pero sin lugar a dudas, la auténtica salsa del juego se encuentra en los juicios, donde nuestra perspicacia e ingenio se pondrán a prueba. Nuestro principal objetivo aquí será encontrar contradicciones en las declaraciones de los testigos, algo que no siempre será fácil de detectar y nos obligará a examinar palabra por palabra todo lo que dicen mientras repasamos las pruebas que hemos recogido. En ocasiones esta contradicción puede estar oculta y necesitaremos presionarlos para que añadan algo nuevo a la declaración, lo que nos permitirá sacar sus mentiras a la luz.

Ya os aseguramos que la sensación de satisfacción de gritar un "¡Protesto!" a la consola, mostrar una prueba contradictoria con la declaración y desmontar una coartada que llevaba horas dándonos problemas pocas veces la sentiréis en otros juegos. Para añadir todavía más emoción a estos juicios estarán los fiscales, quienes nos darán más de un dolor de cabeza y se encargarán de cortarnos las alas cuando parezca que vamos por el buen camino, provocando todo tipo de giros inesperados en el guion y aumentando más si cabe nuestro interés por saber qué es lo que va a pasar a continuación.

Eso sí, mucho ojo con presentar una prueba equivocada o con dar respuestas equivocadas cuando nos hagan preguntas, ya que esto dañará nuestra credibilidad, la cual se representa en forma de barra de vida. Si llega a cero, nuestro cliente será declarado culpable y perderemos el juicio. Esto se puede evitar fácilmente guardando antes de presentar nada, ya que se nos permitirá salvar la partida siempre que queramos, lo que nos ahorrará volver a tener que tragarnos una gran cantidad de textos en caso de que nos equivoquemos demasiado.

En algunos momentos concretos también tendremos que superar algunos minijuegos, los cuales representarán los "poderes" de los protagonistas, ya que en esta entrega no solo manejaremos a Phoenix. Por ejemplo, Apollo gracias a su brazalete podrá detectar cuándo alguien miente, lo que nos obligará a detectarles un tic nervioso mientras declaran para saber cuándo no dicen la verdad. Este minijuego ya estaba en Ace Attorney: Apollo Justice, aunque eso no quiere decir que no haya novedades.

Esta vez también habrá uno nuevo gracias a la inclusión de Athena. Su agudizado oído le permite escuchar los sentimientos de las personas y mostrarlos gráficamente a través de su collar (llamado Widget y con la capacidad de decir abiertamente los sentimientos de la chica sin que ella pueda hacer nada para evitarlo, algo que da juego a situaciones muy divertidas), lo cual nos será muy útil para calmar a los testigos y ayudarles a recordar con claridad. Estos minijuegos son muy simples. Básicamente tendremos cuatro iconos, cada uno de ellos representando una emoción: enfado, tristeza, sorpresa y alegría. A medida que declaren, tendremos que fijarnos en si hay alguna emoción que no concuerde con lo que dicen o si los cambios de intensidad de las mismas son muy pronunciados. Una vez encontrada la anomalía, bastará con señalarla.

En total tenemos un juego que nos durará fácilmente más de 20 horas y que hasta que no os lo paséis siempre os dejará con ganas de más, por lo que hay diversión para rato. Eso sí, por desgracia el título nos ha llegado totalmente en inglés, algo que echará muy para atrás a muchos y a otros directamente les impedirá jugarlo. No es que haga uso de un inglés muy complicado, pero sí que hay que dominar bien la lengua de Shakespeare para no perderse ningún detalle, especialmente a la hora de los interrogatorios, donde una palabra o la forma en la que está escrita la frase puede darnos la pista que necesitamos.

Además, estamos hablando de más de 20 horas en las que no haremos más que leer textos y comernos la cabeza intentando resolver casos, por lo que el idioma es algo que deberíais de tener muy en cuenta antes de haceros con él, ya que se entender lo que nos dicen es algo básico de su jugabilidad. Una pena, porque se trata de un gran juego que todo el mundo debería poder disfrutar por igual, más todavía cuando sus cuatro primeras entregas llegaron incluso dobladas al español.

De los sprites a los polígonos en 3D

En cuanto a su apartado gráfico, el salto a Nintendo 3DS le ha sentado de maravilla, cambiando los clásicos sprites por personajes y escenarios poligonales (lo que permite nuevos efectos como giros de cámara y zooms), los cuales lucen geniales, especialmente los primeros, con unas animaciones suavísimas, unos modelados muy detallados y con una expresividad digna de elogio (las muecas y caras que ponen recrean con una fidelidad pasmosa lo visto en los juegos anteriores). Además, como novedad ahora nos encontraremos con vídeos animes durante todo el juego que gozan de un acabado muy bueno y que ayudarán a contarnos algunos de los momentos más importantes. En total hay casi 20 minutos de ellos, aunque eso sí, no cuentan con subtítulos de ningún tipo.

Mencionar que el efecto 3D nos ha gustado bastante. La imagen no se desdobla en ningún momento, la sensación de profundidad está realmente conseguida e incluso está muy bien implementado en los vídeos de anime, algo muy raro de ver en la consola, donde para este tipo de secuencias se suele prescindir de dicho efecto.

El sonido goza con los efectos habituales de la saga y de una banda sonora bastante buena y pegadiza, en la cual encontraremos varias remezclas muy bien resueltas de temas clásicos de la serie. Lo que no nos ha gustado tanto ha sido el doblaje inglés, con unas interpretaciones un tanto forzadas y poco creíbles, aunque solo las escucharemos en los vídeos y con los gritos de los personajes para protestar (o para mandar callar, como le gusta hacer con frecuencia a cierto fiscal).

Conclusiones

Phoenix Wright: Ace Attorney - Dual Destinies es un juego que cualquier fan de la saga debería tener muy presente en su lista de compras, siempre y cuando el inglés no les suponga un problema y no les importe demasiado el formato digital, ya que esta vez nos hemos quedado sin lanzamiento físico (al menos sale a precio reducido). Es un título de los que te atrapan y no te sueltan hasta que has llegado a su final, que sabe recompensarnos con una enorme sensación de satisfacción al poner a prueba nuestro ingenio en intensos juicios y que nos ofrece un elenco de personajes tan carismáticos y una historia tan interesante que harán que difícilmente olvidemos el regreso de este genial abogado.

Puede que no innove prácticamente en nada respecto a sus predecesores, pero aun así se siente como un juego fresco y endiabladamente divertido. Quizás no todo el mundo tenga paciencia para leer tantísimo y prefieran algo más directo y rápido, pero a poco que queráis volver a vivir una buena historia y hayáis disfrutado alguno de los memorables juicios que nos ha dejado la saga, descubriréis aquí una aventura que difícilmente podréis dejar escapar.