Malas noticias para los conductores que disfrutan de ir solos en el coche. Francia se ha convertido en el primer país europeo en dar un paso firme hacia la reducción de emisiones contaminantes con una medida que, sin duda, dará que hablar.
A partir del próximo mes de mayo, ciertas vías de la capital francesa contarán con un carril exclusivo para vehículos con al menos dos ocupantes. Una estrategia que busca fomentar el uso compartido del coche y que, además, ya está siendo analizada con interés en España.
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El director general de Tráfico, Pere Navarro, abordó esta cuestión en la reciente convención Global Mobility Call celebrada en Madrid, destacando la importancia de replantear la movilidad urbana. Según sus propias palabras, la clave está en optimizar el uso de los vehículos: "Meter a dos personas en cada coche para que los desplazamientos sean más eficientes y sostenibles". Una filosofía que encaja con las estrategias de reducción de contaminación impulsadas en buena parte de Europa.

En otras palabras: quieren que los españoles no viajen solos en coche por temas de movilidad y ecología. Navarro también subrayó cómo la percepción social sobre el transporte individual está cambiando. "Cada vez está peor visto viajar solo. No podemos permitirnos mover 1.500 kilos de metal solo para transportar a una persona", afirmó, en referencia al impacto medioambiental de los desplazamientos individuales.
Las restricciones al tráfico en París comenzarán a aplicarse en mayo de 2025 y afectarán a una de las arterias clave de la ciudad: la autopista de circunvalación. Durante dos franjas horarias—de 7:00 a 10:30 de la mañana y de 16:00 a 20:00 de la tarde—el nuevo carril quedará reservado exclusivamente para vehículos con más de un ocupante. Aquellos que sean detectados circulando solos en este tramo se enfrentarán a una multa económica, un mecanismo que busca garantizar el cumplimiento de la norma.
El modelo francés no es un caso aislado. En España, las Zonas de Bajas Emisiones, los peajes urbanos y otras iniciativas similares han ido ganando terreno en los últimos años. Sin embargo, la Dirección General de Tráfico considera que es necesario dar un paso más para consolidar un cambio real en la movilidad urbana. "El futuro será compartido, o no será", sentenció Navarro, dejando claro que la tendencia hacia el coche compartido no es una opción, sino una necesidad en la lucha contra la contaminación y la congestión en las grandes ciudades. ¿Seguirá España el ejemplo de Francia?