Cuando se habla de cifras astronómicas en economía y gestión empresarial, los números comienzan a perder sentido. Lo de los miles de millones ya nos cuesta procesarlo, pero cuando Elon Musk, magnate conocido por sus arriesgadas predicciones, empieza a hablar de billones, lo único que podemos hacer es quedarnos boquiabiertos. El magnate sudafricano, tan dado a las declaraciones altisonantes como a los anuncios visionarios, ha vuelto a hacerlo: ha dejado caer que Tesla podría llegar a valer entre 25 y 30 billones de dólares en el futuro. Ni más, ni menos.
Elon Musk asegura tener una estrategia para revertir los malos resultados de Tesla: "Si ejecutamos bien, saldremos adelante"
Todo comenzó con un comentario en X —la antigua Twitter, hoy propiedad del propio Musk—. Keith Fitz-Gerald, inversor veterano, se atrevió a comparar al fundador de Tesla con Steve Jobs, y no se quedó ahí: predijo que la compañía automovilística se dirige hacia una valoración de 20 billones de dólares. Musk, por supuesto, respondió al instante, con la autoconfianza que lo caracteriza: “Es necesaria una ejecución extrema, pero es posible”. Días más tarde, redobló la apuesta: “Tesla podría alcanzar entre 25 y 30 billones si lo hacemos bien”. Ahí queda eso.
¿Bravatas de genio o proyecciones fundamentadas? Lo cierto es que Musk tiene motivos para mostrarse optimista. Hace poco firmó un acuerdo colosal con Samsung, valorado en 16.500 millones de dólares, para la fabricación de chips de inteligencia artificial destinados a sus futuros modelos. Y eso sin contar con su obsesión por el coche autónomo: alcanzar el nivel 5 —donde el vehículo no necesita intervención humana en ningún momento— sería el gran golpe en la mesa para dominar el mercado global.
Pero la ambición de Musk no termina ahí. En el horizonte se dibuja Optimus, su robot humanoide, con el que pretende entrar de lleno en la robótica doméstica e industrial. Para el empresario, la combinación de autonomía total en vehículos y la robotización personal es una bomba de relojería financiera. “Esos dos elementos podrían llevar las acciones de Tesla a niveles locos”, declaraba en una reciente charla online con fans de la marca.
Ahora bien, pongamos los pies en la tierra: Tesla cotiza actualmente en torno al billón de dólares. Multiplicar por 25 o 30 su valor actual suena a ciencia ficción, sobre todo con los últimos resultados trimestrales, realmente malos, pero con Musk, lo imposible siempre parece estar en fase beta.















