Apple siempre ha lucido con orgullo la bandera de la seguridad, con el mantra de que sus dispositivos son prácticamente impenetrables y que ofrecen una gran garantía de seguridad y privacidad.
Esto, evidentemente, no es así y los dispositivos de Apple podrán ser más o menos seguros pero son susceptibles de fallos y ataques como el resto de sus mortales e incluso a los de Cupertino también se le cuelan aplicaciones maliciosas en la App Store, su repositorio de software desde el que los propietarios de dispositivos iOS bajan sus aplicaciones favoritas.
De hecho, la propia Apple ha sido la que ha salido a la palestra esta misma semana para mostrar que durante el último año han eliminado más de 150.000 aplicaciones maliciosas de la App Store que violaban las normas de privacidad, una cantidad inferior a las que solemos ver en dispositivos Android, pero que nos demuestra que "las amenazas están ahí fuera" sin importar qué teléfono u ordenador tengas.
Más de un millón de apps tenían contenido ofensivo
Esto no es todo ya que la propia Apple también ha asegurado que ha eliminado un millón de aplicaciones de su tienda que contenían contenido ofensivo, ilegal, dañino o inseguro además de borrar unos 60 millones de reseñas o valoraciones que se consideraban spam.
Este minucioso trabajo se ha realizado gracias a un equipo de 500 personas que se encargan de revisar las aplicaciones y que ojean, semanalmente, más de 100.000 apps presentes en la App Store de Apple.