La polémica de Joss Whedon no ha terminado. El director, famoso por sus series de televisión, blockbusters y comportamientos reprochables en los rodajes, ha vuelto a ser acusado en público por Ray Fisher, que lo catalogó hace semanas de 'abusador' y poco responsable durante el rodaje de Liga de la justicia. El pasado sábado, durante la JusticeCon -que nos ha ofrecido más de la nueva versión del film-, volvió a reafirmarse en sus palabras. "El rodaje estuvo tildado de abusos, y fue muy poco profesional", remarcaba el actor que dio vida a Cyborg.
Una historia que parece complicarse por momentos
Todo comenzó cuando a Fisher, durante un panel en la JusticeCon, se le pidió que comparase el trabajo del director Zack Snyder con el de Whedon. Snyder, que dejó el film tras una tragedia familiar, acabó cediendo el testigo del film a un cineasta que según Fisher lo complicó todo más. El proyecto fue un auténtico monstruo de Frankenstein, con decenas de cambios visuales, argumentales y secuencias desechadas.
Cuando se estrenó en 2017, fue un fracaso a nivel de críticas y un éxito moderado, algo que damnificó el universo de DC y el plan de Warner Bros. "No quiero compararlos de ninguna manera, forma o forma", explicaba Fisher. "Pero lo que diré sobre la situación de Joss Whedon es que, obviamente, pese a que fui muy duro en mis declaraciones, y usé palabras muy fuertes, todo lo que expresé o dije fue verdad", explicaba el actor.
"Necesité de al menos dos años y medio para obtener toda la información que necesitaba para poder construir algo que fuese lo suficientemente fuerte como para que la gente no pudiese descartarlo a la ligera", comentaba mientras afirmaba que durante este tiempo reunió a múltiples actores y profesionales que estarían dispuestos a hablar contra el director sobre sus experiencias en la película. "Siempre respetando el anonimato y de manera confidencial", afirma. "Sí, hay gente que piensa hablar contra él. Estamos en el proceso de asegurarnos de que las personas puedan contar sus historias de manera confidencial para que no reciban ningún tipo de retribución en su contra", añadía.
"Mi misión es llegar al corazón de todo. Y si algo de lo que dije sobre este hombre es falso, pues lo invito de todo corazón a demandarme por difamación y que me lleve a los juzgados por calumnias", remarcaba en un tono desafiante. "Joss tiene miedo. Y debería tenerlo, porque vamos a sacarlo todo", argumentaba al mismo tiempo que cree que metió en el saco a Geoff Johns para escudarse. "Es una declaración instintiva de un individuo que está asustado", concluía. Os recordamos que Warner Bros., así como otras productoras, han sabido de los comportamientos y actitudes de Whedon desde hace años. Hace un tiempo, tuvo que abandonar el proyecto de Batgirl por presiones de actrices, productores y el propio estudio.