Jonathan Majors, que fue arrestado y acusado de abusos y agresión doméstica a comienzos de año, ha ido recibiendo nuevas acusaciones por parte de sus parejas y antiguos compañeros de trabajo. En las últimas semanas, se filtró que incluso una de sus exnovias había pedido una orden de alejamiento, aumentando la presión sobre el actor, que ha perdido grandes trabajos en cine y series, con los representantes a los que estaba unido abandonándolo a las puertas del juicio. Ahora, con su futuro profesional en riesgo, surgen más testimonios de sus abusos en rodajes y en relaciones personales.
Más de 40 fuentes anónimas respaldan los comportamientos y los abusos de Jonathan Majors en su vida privada y profesional
Como explican en ComicBook, nuevas fuentes citadas en el proceso judicial al que s enfrentan Majors, revelan que el actor ha protagonizado numerosos incidentes y abusos en los últimos diez años. El reportaje, publicado en Rolling Stone, habló con más de 40 fuentes anónimas que han conocido a Majors en la escuela de posgrado de la Universidad de Yale, en sus relaciones románticas y en los platós de sus películas.
"Nadie está sorprendido de que esto salga a la luz. Siempre sentí que era cuestión de tiempo porque su comportamiento nunca cambió. Es un tipo un poco malo, y ahora lo está alcanzando", remarca uno de los testigos.
Al parecer, según las fuentes, se está demostrando que Majors abusó física y/o emocionalmente de dos parejas recientes, con una de ellas sufriendo un acoso y abuso extremo de forma sistemática a lo largo de los años, tanto física como mentalmente. El reportaje explica que hay denuncias de abuso emocional hacia una segunda mujer con la que Majors salió en el pasado, con afirmaciones de que el intérprete tenía la obsesión de controlarlo todo, desde sus interacciones sociales a sus horarios, así como la comida, plano en el que Majors también tenía comportamientos obsesivos con respecto a su parejas. "Fue una tortura emocional. Tenía miedo cuando necesitaba golpear algo o golpear una pared", añade la mujer citada en el informe, que vivió aterrada. "Hacía pensar que él era como el oxígeno en la habitación y que ella no podía vivir sin él", dice una fuente sobre esa relación.
El informe también hace hincapié en el comportamiento profesional de Majors, caótico y atribulado. En el rodaje de Devotion, Majors hizo llorar a los miembros del departamento de vestuario en el set, y no son pocos los que dicen que fue desagradable, poco profesional y abusador, atacando a las personas que veía débiles o con poca capacidad de defenderse. De hecho, se afirma que incluso llegó a empujar a varios miembros del equipo, en un clima insostenible lleno de gritos y quejas. La producción ha negado estos incidentes, indicando que todo se solucionó al poco tiempo.