Bill Gates es uno de los hombres más influyentes del planeta. El cofundador de Microsoft, ahora reconvertido en filántropo, ha sido muy pesimista en el pasado en sus predicciones, escéptico con los cambios relacionados con con las criptomonedas y las tecnologías NFT, así como volcado en eso de hacer de la Tierra un lugar mejor. El magnate ha dedicado largo artículo en su blog dedicado a la Inteligencia Artificial y de qué manera supondrán estas herramientas, como GPT3 y su chat, una revolución tecnológica sin procedentes en la historia de la humanidad.
Bill Gates no tiene dudas: el desarrollo de las IA es el mayor avance tecnológico en décadas
Para Bill Gates, el estado actual de la inteligencia artificial ya es prometedor, y sus avances, que no dejan de sorprendernos, son imposibles de analizar con detenimiento debido a la rápida evolución a la que están sometidas estas herramientas en estos días. Para él, su irrupción en nuestras vidas es igual de importante que la creación de los microprocesadores, los ordenadores personales, la llegada de internet o el smartphone. "Cambiará la forma en que las personas trabajan, aprenden, viajan, obtienen atención médica y se comunican entre sí", remarca Gates.
Responsable de la Fundación Bill & Melinda Gates, el millonario ha explicado que desafió a los responsables de OpenAI el año pasado a desarrollar un modelo de IA que fuese capaz de aprobar el examen de biología de Avanzada sin saber cuáles eran las preguntas de antemano o hacia dónde iban a ir los tiros. OpenAI, que ha recibido una inversión millonaria de Microsoft, aceptó el trato. "Pensé que el desafío los mantendría ocupados durante dos o tres años. Lo terminaron en solo unos meses", recuerda.
"Una versión del GPT de OpenAI obtuvo 59 de 60 en la sección de opción múltiple del examen de biología AP y superó las preguntas abiertas, según la evaluación de un experto externo independiente", remarca en su texto. Bill Gates explica que la inteligencia artificial fue capaz de ofrecer soluciones a dilemas morales en el campo de la medicina, dando respuestas muy humanas a situaciones delicadas, como la de qué decirle a un padre con un hijo enfermo. "Fue una respuesta reflexiva que probablemente fue mejor que la que hubiéramos dado la mayoría de nosotros en la sala", incide, en algo que a muchos no les parece correcto.
"Toda la experiencia fue impresionante. Sabía que acababa de ver el avance tecnológico más importante desde la interfaz gráfica de usuario. Pronto, el período anterior a la IA parecerá tan distante como los días en que usar una computadora significaba escribir en un indicador C:> en lugar de tocar una pantalla", puntualiza, mientras remarca que comprende que haya muchísimas personas que tengan miedo a estos avances y se generen situaciones no deseadas. Por eso, concluye, hay que ser vigilantes.
