Los jugadores de Death Stranding y su secuela, lanzada en junio para PlayStation 5, conocerán algunas de las herramientas que puede utilizar Sam para agilizar el transporte de carga. Kojima Productions ha anunciado un acuerdo con el fabricante de exoesqueletos Dnsys para hacer realidad esta colaboración.
El estudio de Hideo Kojima tiene diversas colaboraciones con la licencia, desde marcas de ropa a gafas, pero este caso es bastante más llamativa: un exoesqueleto en edición limitada que realmente funciona. Aunque el modelo ya existía, se ha modificado para encajar con el diseño del artista Yoji Shinkawa para Death Stranding 2: On the Beach; por ejemplo, incluye luces para mostrar la batería del equipo.
En los juegos, este exoesqueleto nos ayuda a cargar más peso, dar estabilidad y aumentar la velocidad de Sam. La versión real quizás no es tan efectiva, pero prometen unos pasos un 50 % más largos, reducir el peso en las rodillas y ampliar nuestras rutas de senderismo hasta en 25 kilómetros gracias a un sistema inteligente que se adapta al terreno. Su autonomía es de más de 4 horas, con opción para cambiar la batería de manera sencilla.
"Inspirado en el juego, diseñado para la realidad"
"Diseñamos este exoesqueleto con la misma pasión y precisión que si estuviera hecho para el mundo de Death Stranding", dice Shinkawa según la página del producto. "Cada detalle se perfeccionó para plasmar la visión futurista del juego en la realidad, creando algo que el propio Sam podría usar".
Este exoesqueleto es más que un producto para coleccionistas, tiene aplicaciones reales. Se pondrá a la venta el 2 de diciembre y aunque no se ha dado precio a este modelo, el Dnsys Z1 en el que se basa ronda los 1500 dólares, por lo que esta versión podría costar un poco más.
Death Stranding 2 está a la venta en PlayStation 5. Aquí podéis conocer nuestra opinión del juego y todos los secretos para completar este viaje por México y Australia.
