Tras su toma de posesión a principios de enero, el presidente Donald Trump ha tomado una serie de decisiones estratégicas que tienen en vilo a la economía mundial. La más importante es la serie de aranceles que el nuevo presidente de Estados Unidos pretende imponer a varios países como China, México o Canadá.
Desde la ESA (Entertainment Software Association), principal asociación de compañías de videojuegos formada por empresas como Xbox, PlayStation, Nintendo o Ubisoft, entre muchas otras, advierten de lo mal que le puede sentar a la industria del videojuego este tipo de impuestos debido a la naturaleza globalizada del sector.
"Los videojuegos son una de las formas de entretenimiento más populares y queridas por los estadounidenses"
"Los videojuegos son una de las formas de entretenimiento más populares y queridas por los estadounidenses de todas las edades", comienza diciendo la ESA en un comunicado enviado a IGN. "Los aranceles sobre los dispositivos de videojuegos y productos relacionados afectarían negativamente a cientos de millones de estadounidenses y dañarían las importantes contribuciones de la industria a la economía de Estados Unidos", advierten.
El futuro de estos aranceles todavía es indeterminado, y en países como México han quedado suspendidos durante un mes mientras se suceden las negociaciones con su gobierno. Desde la ESA se muestran confiados en poder llegar a un acuerdo con el equipo de Donald Trump que evite las repercusiones de las que advierten en su comunicado: "Esperamos trabajar con la Administración y el Congreso para encontrar formas de sostener el crecimiento económico respaldado por nuestro sector".