FromSoftware se ha ganado la fama y el reconocimiento mundial gracias a obras como Demon’s Souls, Dark Souls, Bloodborne o Elden Ring, aunque el estudio siempre ha sido mucho más que sus soulslike, como bien demostraron, por ejemplo, con el magnífico Sekiro: Shadows Die Twice. De hecho, una de sus sagas más veteranas, Armored Core, tiene poco o nada que ver con todo esto, pues lleva deleitándonos con profundos y complejos combates de mecas desde la época de la primera PlayStation.
Los sobresalientes combates de mecas de FromSoftware
Sin embargo, la FromSoftware de ahora no es la misma de hace una década, justo el tiempo que ha pasado desde la que hasta este año había sido la última entrega de la serie. Ahora es un equipo con muchísima más experiencia, con más recursos, con una plantilla de trabajadores más amplia, con una dirección bastante más clara y con un alcance mucho mayor, por lo que la expectación y la atención mediática de la que ha disfrutado Armored Core VI: Fires of Rubicon ha sido notablemente más alta. Sí, sigue siendo una saga de nicho con una propuesta destinada a satisfacer a un grupo de jugadores muy concreto, pero es de FromSoftware, motivo más que suficiente para que muchos usuarios a los que nunca les había llamado la atención esto de los combates sobre robots gigantes se hayan atrevido a darle una oportunidad.
Por suerte, el resultado final ha sido, nuevamente, sobresaliente, deleitándonos con una aventura de acción fiel a sus raíces en la que debemos superar todo tipo de intensas y desafiantes misiones donde no nos van a dejar respirar ni un solo segundo mientras cumplimos objetivos de todo tipo y nos vemos las caras contra innumerables enemigos y poderosísimos jefes que saben cómo ponernos contra las cuerdas.
Nuevamente, la clave de la victoria no solo reside en jugar bien, que también, sino en saber configurar a nuestro meca para que pueda hacer frente a las peculiaridades de cada misión. No siempre nos va a venir igual de bien uno pesado que otro ligero, hay armas que son especialmente efectivas contra determinados jefes y encontrar un buen equilibrio entre todas las piezas para no acabar sobrecargados o con un déficit de energía.
Eso, sumado a una jugabilidad vertiginosa, pulida, satisfactoria y muy divertida, y a un diseño de misiones variadísimo donde siempre nos están sorprendiendo con nuevas situaciones, objetivos y rivales únicos, han dado como resultado uno de los mejores y más adictivos juegos de acción de 2023. Uno de esos pocos juegos tan bien diseñados que siempre nos está animando a intentarlo una y otra vez, por más veces que nos derroten, probando y experimentando configuraciones hasta dar con la tecla y salir airosos de ese escollo que al principio nos pareció insalvable.
La cosa no termina aquí, ya que resulta tremendamente rejugable y tras terminarlo por primera vez hay muchos motivos para seguir jugando y darle, como mínimo, un par de vueltas más, algo a lo que hay que añadir el siempre atractivo reto de intentar conseguir el rango máximo en todas las misiones y desbloquear todas las posibles piezas y armas con las que ampliar nuestro abanico de opciones para equipar a nuestro robot.
Aquí tampoco podemos olvidarnos de la magnífica y evocadora dirección de arte del juego. No solo los mecas tienen un diseño increíble, sino que la sensación de escala que transmiten sus escenarios y la puesta en escena que tienen determinadas batallas consiguen sobrecogernos de verdad y hacernos muy conscientes del tamaño de los ingenios mecánicos que controlamos y a los que hacemos frente. Y para rematar, una banda sonora fantástica que se adapta a la perfección a todo lo que vemos en pantalla.
Quizá los modos online nos han parecido un tanto decepcionantes por lo básicos que son y las pocas opciones que ofrecen, pero si os apasionan los mecas, os gustan los retos y os apetece un juego de acción, aquí tenéis una cita prácticamente ineludible que confirma que, efectivamente, 2023 ha sido un año que está destinado a ser recordado durante mucho tiempo por cualquier aficionado a los videojuegos.