Activision Blizzard no prevé retrasos en el Call of Duty de este año, que sigue previsto para finales de 2020 -coincidiendo, probablemente, con el lanzamiento de las nuevas consolas. En los últimos meses se había especulado con los retrasos en las producciones de otoño por culpa del coronavirus y las nuevas condiciones de trabajo de muchos estudios, pero no parece que afecte al plan de desarrollo de este título.
"Mirando al futuro, el próximo Call of Duty premium -es decir, de pago, a diferencia de Warzone- se ve fenomenal y se mantiene en el plan para llegar este año", ha dicho Daniel Alegre a los inversores. El pasado febrero la compañía anunció una ventana de lanzamiento entre octubre y diciembre.
"La saga nunca ha estado mejor posicionada para crecer y hay mucho por ver, incluyendo nuevas experiencias en el universo Modern Warfare y por supuesto, en el cuarto trimestre, un nuevo Call of Duty premium que ya está creando mucha emoción en nuestras pruebas de juego".
¿Ambientado en Vietnam?
Los rumores actuales apuntan a que Treyarch se haría cargo del juego tras tensiones internas en Sledgehammer Games -Advanced Warfare y Call of Duty: WWII- por el cambio de generación y conflictos en el modelo de negocio. No se llamará Call of Duty: Black Ops 5, pero se ambienta en Vietnam y presentará una campaña dura, al estilo del último Modern Warfare -del que también utilizaría su motor gráfico-. El multijugador recuperará modos de grandes batallas entre equipos de 32 jugadores, mapas de grandes dimensiones, otros tantos retomando los escenarios más icónicos del Black Ops original además de la cura manual de Call of Duty: Black Ops IIII. No habrá nuevo battle royale ya que Call of Duty: Warzone seguirá actualizándose durante años.
