Valve ha tenido en su cartera algunos grandes bombazos en PC que siguen atrayendo a cantidades masivas de jugadores hoy en día, como Counter-Strike, Dota 2 o Team Fortress 2, pero parece que no han logrado dar con la tecla en el caso de Artifact. El volumen de jugadores sigue bajando.
El título ha alcanzado su versión final hace tan solo unos meses, pero en el último mes de enero ha rondado unos picos de actividad de 3000 usuarios al día.
En las semanas de febrero el volumen de jugadores ha descendido más, y se sitúa en torno a los 1000 usuarios diarios.
La semana pasada el pico se registró en 1300 usuarios el pasado sábado, pero el resto de los días ha fluctuado entre los 900 y 600 jugadores, según los datos que ofrece Steam Charts.
Por su estilo de juego es probable que Valve no esperara replicar los número de algunos de sus grandes éxitos, pero es poco probable que la compañía esté satisfecha con el resultado comercial del juego. Las alarmas empezaron pronto, en diciembre, tras haber sido lanzado en noviembre, y en enero era todavía más evidente.
Valve no ha hecho anuncios sobre el futuro del juego ni se ha indicado si está alineado con las previsiones internas que tenía la compañía.
