Epic Games dio comienzo el pasado fin de semana a su torneo Summer Skirmish para Fortnite Battle Royale, una competición que tiene un premio de 8 millones de dólares y que busca al mejor jugador del videojuego. Si bien arrancó con gran expectación, la organización y los problemas de conexión han empañado un torneo eSport que ha sido calificado por muchos como 'desastroso'.
Problemas de conexión, servidores y organización
A través de un extenso comunicado oficial, que está disponible en la web del videojuego, Epic analiza los fallos, errores y problemas que experimentaron durante el inicio de la competición. "Se trata de la primera vez que hemos conseguido reunir una gran concentración de algunos de los mejores jugadores de Fortnite y creadores de la comunidad en una sola partida", explican.
"Hemos notado muchos puntos débiles en cuanto a rendimiento del servidor y tenemos la sensación de que no hemos estado a la altura del inicio de una competición online de Fortnite" añaden. De hecho, las caídas de jugadores, de las que fueron testigos miles de jugadores y personas gracias a los streaming de las figuras más reputadas del título, fueron la tónica durante las retransmisiones. Las quejas de los espectadores fueron lo de menos, pues algunos profesionales del battle royale también se quejaron de la mala organización del torneo online y de las nulas explicaciones oficiales de Epic al respecto, como se hace eco Kotaku.
"Aunque solemos llevar a cabo pruebas a menudo para saber cómo funcionarán los servidores, el hecho de tener premios importantes en juego cambiaba significativamente el comportamiento al jugar. Además, como decidimos poner énfasis en las retransmisiones de los jugadores durante el evento, la mayoría de ellos se quedaron a observar tras ser eliminados", argumentan.
Y es que Fortnite empleó un servidor público en lugar de uno privado, y Epic Games no pudo prever tales niveles estrés. Además, la inclusión de las cámaras de retransmisión especial para los jugadores eliminados, algo que debería favorecer a los streamings, fueron desastrosas.
"La combinación de estos factores empeoró la experiencia de juego mucho más de lo que esperábamos", admiten en el comunicado. "Para la segunda semana vamos a explorar un formato de servidor público en el que seguiremos de cerca el rendimiento de los competidores durante 10 partidas. Nuestra intención es seguir haciendo esto en las partidas privadas de la tercera semana del Summer Skirmish mientras trabajamos en los problemas de rendimiento del servidor que experimentamos el pasado fin de semana", concluían.
Fortnite Battle Royale, todo un fenómeno comercial capaz de generar 1000 millones de dólares, está disponible en One, PS4, PC y Switch, así como en iOS y pronto en Android.
