Jonathan Morin, director creativo de Watch Dogs, considera que el juego no era perfecto "de ninguna manera" y que aún hay "margen para mejorar" en una secuela que aún no está anunciada oficialmente.
"No creo que Watch Dogs sea perfecto en ningún sentido y hay espacio para mejorar. Pero no siempre ves esto cuando lanzas el juego. Lo sacamos cuando creemos que está listo en ese momento".
"Cuando dejas enfriar el juego después de cinco años y medio -de desarrollo-, tomas vacaciones y la gente lo juega, se ve más claro. Eso te permite ver la siguiente fase con la opinión de los fans incluida, que creo que es cuando se pone interesante".
"Cuando empiezas un nuevo proyecto tienes una página en blanco y todo lo que haces es lo que quieres hacer. Con una secuela, hay más presión para crear una marca y tenemos que atraer a los fans de alguna manera".
Watch Dogs se lanzó en mayo en la actual y pasada generación, excepto Wii U, donde se puso a la venta en noviembre.