Todos recordamos aquella época en la que Telltale Games se convirtió en el estudio de moda. Con The Walking Dead redefinieron las aventuras gráficas y las llevaron a un nuevo público, marcando el camino para otros muchos estudios que lo siguieron a posteriori. Ahora, parece ser que una gestión muy, muy mejorable del estudio ha acabado dejando a la mayoría de sus empleados en la calle, sin finiquito y cancelando la mayoría de los proyectos que tenían en marcha.
Tenemos tres juegos anunciados que están en peligro: la segunda temporada de The Wolf Among Us, la última de The Walking Dead y un título basado en Stranger Things. Hace unos días, Telltale reveló que otras compañías se habían ofrecido para ayudarles a terminar The Walking Dead, así que no vamos a ser nosotros quienes lo matemos. Los otros dos no tienen mucha pinta de sobrevivir, así que los incluiremos aquí junto a otro que tampoco parece que vaya a salir del estudio.
Incluir ese título desconocido nos permite, además, poner las cosas en perspectiva y entender un poco más cómo fue la caída del estudio. Como hicimos con la columna del Final Fantasy XV de Eidos Montreal y parece que os gustó mucho, vamos a revisar cómo han sido estos últimos años de la compañía a través de sus proyectos.
2016: el principio del fin
En 2016, Telltale Games está en la cima. Se han convertido en un estudio de primer nivel, y cada vez tienen más licencias jugosas en su haber. Juego de tronos, Guardianes de la galaxia o el exitosísimo Minecraft pero sabían que no podían seguir estirando la fórmula mucho más. Este fue un momento crítico para un estudio que llevaba tiempo intentando hacer algo nuevo. Sí, algo nuevo.
Principios de 2017: historias procedimentales y una realidad repetitiva
Telltale llevaba tiempo experimentando con un juego que no conocemos. Como decimos, la fórmula QTE, decisión y vuelve a repetir estaba dando claros signos de agotamiento, e intentaron hacer un juego que de verdad permitiese crear historias con cada partida con una narrativa procedimental, similar, aunque más compleja, a la vista en juegos como This War of Mine.
A principios de 2017 estudio contactó con Alexis Kennedy, un escritor que ha trabajado en juegos como el futuro Dragon Age 4, para pedirle ayuda con este proyecto. Kennedy revela que estaban trabajando en un juego de zombis de una conocida saga de videojuegos que no tenía nada que ver con The Walking Dead, con la que querían contar una historia más libre sin recurrir a su fórmula.
La idea era crear un juego móvil (al menos en principio, sin cerrarse a otras plataformas), que mantuviese el estilo Telltale, donde tuviésemos que jugar más y gestionar todos nuestros recursos, incluyendo a la gente. Cada persona tendría sus características propias, y a través de estas características se dibujaría la historia.
Durante mucho tiempo, mucha gente entró y salió del proyecto, pero con ciclos de desarrollos brutales en los que casi no tenían tiempo para conseguir sacar adelante sus juegos anunciados, apenas había tiempo para experimentos. Telltale quería hacer cosas nuevas, pero por algo dice el refranero que el que mucho abarca poco aprieta.
Mediados de 2017: yendo a lo seguro
A mediados de 2017, el estudio anuncia que va a continuar con varias de sus sagas. Parece ser un intento por ir a lo seguro y retomar las series que mejor venden y las licencias más rentables. Un estudio que no da abasto y que ha congelado la segunda temporada de Juego de tronos suma a la lista la nueva temporada de The Walking Dead, Batman y The Wolf Among Us.
The Wolf Among Us era quizás una de las sagas más queridas del estudio, y el retorno del título de culto de 2014 se estaba haciendo de rogar. En julio del año pasado anunciaron que este año Adam Harrington y Erin Yvette volverían a representar a Bigby Wolf y Blancanieves en un nuevo arco argumental de este universo de fábula inspirado por los cómics de Bill Willingham.
Algunas imágenes del juego aparecieron en la red, aunque Telltale aseguró que eran falsas. No tenemos muchos detalles del proyecto, pero algunos de los desarrolladores que trabajaron en él afirmaban que iba a ser "magnífico".
Finales de 2017: despidos y reajustes
La situación de la empresa empieza a ser insostenible. Es muy probable que el proyecto experimental de narrativa procedimental se cancele, y, a raíz de esto, Telltale despide al 25% de su plantilla, lo que supone la nada despreciable cifra de 90 trabajadores. La idea es centrarse en menos juegos y hacerlos con equipos más pequeños, pero utilizar herramientas externas (como motores) para agilizar el proceso y conseguir mejores resultados, tanto en gráficos, como en rendimiento, como en calidad general.
Mediados de 2018: resultados que no aparecen
De las promesas de 2017, la única que cumplieron fue la de lanzar menos juegos. Sus juegos no veían una mejora notable de calidad, y lejos de centrarse en menos proyectos, la lista no hacía más que aumentar. La segunda temporada de Batman acababa de terminar, y tenían por delante la siguiente de The Walking Dead, la segunda de The Wolf Among Us y la de Juego de tronos.
Y si otra licencia jugosa se ponía a tiro, pues se hacía un juego. En mayo Telltale anunció el retraso de las aventuras de Bigby Wolf a 2019, seguramente porque acababan de firmar un contrato con Netflix para hacer la adaptación de Stranger Things. El proyecto nunca se mostró de manera oficial, pero algún que otro fragmento se ha escapado.
No sabemos si habría servido de algo, pero sí que parece que íbamos a ver un pequeño salto de calidad en el proyecto. En lo visual, al menos los personajes y la iluminación parecían más elaborados, e íbamos a encontrar nuevas mecánicas jugables como poder desplazarnos en primera persona para huir y escondernos del demogorgon. Recordad que a los vídeos que traemos le falta el cell shading.
Septiembre de 2018: despedida y (casi) cierre
No somos nadie para juzgar a los responsables de Telltale, pero cuando un estudio de 250 empleados, con cinco proyectos en marcha, sólo consigue sacar cuatro episodios en un año, y sin ver un salto sensible en su calidad, algo falla. Como ya sabéis, hace tan sólo unos días se confirmó su cierre, y apenas 25 trabajadores seguirán activos para terminar la serie de Minecraft.