En las ciudades, campamentos y diferentes asentamientos podemos encontrar un peligroso minijuego como el Juego del cuchillo, que pone a prueba tu valor y coordinación.
Los jugadores deben poner la mano sobre la mesa y con la palma abierta y hacia abajo ir clavando un cuchillo entre los dedos, moviéndolo deprisa y evitando herirse.
Se te mostrará una secuencia de botones (una "vuelta") que deberás pulsar lo más deprisa posible. Si pulsas el botón incorrecto o vacilas demasiado, te clavarás el cuchillo en la mano. Cada vez que completes una vuelta, podrás pulsar L1/LB para hacer una floritura. Cuando lo hagas especialmente bien, podrás hacer florituras mientras clavas el cuchillo en la mesa al final de tu turno.
Al inicio de cada partida deberás apostar, y si ganas te llevarás el bote de la mesa. Los nuevos oponentes subirán la apuesta y la dificultad.
Ten en cuenta que antes de empezar a jugar tienes tres intentos de práctica antes de enfrentarte a tu adversario. Pulsa cuadrado/X cuando se te indique para practicar. Los mejores intentos se guardarán, así que intenta mejorar tus mejores puntuaciones previas.
Existen tres variaciones del juego del Cuchillo: Clásico, Agallas y Extremo. Termina primero en dos rondas para ganar la partida.
- Clásico: completa un número concreto de vueltas más deprisa que tu oponente. Tienes cinco intentos. Si fallas uno el reloj se pondrá a cero y volverá a empezar desde el principio.
- Agallas: completa el mayor número de vueltas posible en un tiempo límite de 20 segundos.
- Extremo: completa el mayor número de vueltas posible en 30 segundos, sin cometer errores en un solo intento.
Puedes aprender la secuencia de botones observando cómo juega tu oponente. Mantén pulsado R2/RT durante su turno.
