El fin del principio será la primera misión de la historia de Dragon Age: The Veilguard. A lo largo de esta guía te iremos dando todas las claves para superar con éxito cada parte, así como las habituales indicaciones sobre coleccionables, misiones secundarias y en este caso, las decisiones que hemos tomado al avanzar en la trama.
Nada más comenzar, tendrás que tomar una decisión sobre cómo "conseguirás" la información.
- Exigir se queda corto.
- Vamos a hablar - Hemos escogido esta opción.
Después podrás dar otra respuesta a tu compañero.
- Contaba contigo.
- Vale, pero ha funcionado - Hemos escogido esta opción.
- Mientras funcione...
Por razones bastante obvias, no tienes libertad de movimiento así que sigue a tu certero amigo por las calles de Minrathous.
Espera a que quiten unas cajas y cruza la calle para ver una secuencia. El juego acaba de empezar y, como dicen los americanos, "the shit has hit the fan". Por ahora, corre hasta el objetivo. Podrás responder lo que prefieras durante la conversación, en la que conseguirás tus armas (pueden variar en función de la clase escogida al crear a tu personaje).
- Temblando.
- Mejor que nunca - Hemos escogido esta opción.
- Hay que correr.
Lógicamente, tendrá lugar el tutorial de combate básico.
Asegúrate de ir rompiendo vasijas y mirar en las habitaciones para recoger oro e incluso alguna poción curativa. Ve con cuidado con los enemigos que usan ataques a distancia (te marcarán la línea de disparo, así que esquiva) hasta llegar a una barrera con más enemigos donde te enseñarán a usar tus habilidades. Cuando acabes con los enemigos interactúa con la barrera. Durante la secuencia hay otras tres opciones
- Te has rescatado tú sola.
- Buen trabajo con los venatori - Hemos escogido esta opción.
- Necesitamos información.
Sigue avanzando por los tejados en dirección al marcador. Ahora sois cuatro en el equipo, lo que se ponga en vuestro camino se llevará una buena (aunque breve) lección. Por el camino por los restos de la zona y el escondite te irán dando más indicaciones sobre los ataques de tu clase. Cuando llegues a una puerta cerrada, busca un camino que sube hasta la palanca sobre la puerta.
Cuando llegues al final del camino atraviesa el espejo porque claro, qué puede salir mal. Por ahora seguimos en el prólogo, así que hay algunos tutoriales de combate más hasta que aparezca un Demonio del orgullo. Ten cuidado con las zonas de daño cuando lance rayos y aprovecha las habilidades de tu clase para romper su escudo. En cuanto lo elimines, debería bastar con acosarle hasta que caiga.
Durante la secuencia tendrás que tomar una Decisión. ¿Ves la mayúscula? Eso es porque es una decisión importante, como indica el icono de cambio de rumbo antes de escoger.
- Esto es un error - Hemos escogido esta opción.
- Puedes hacerlo.
Tomes la decisión que tomes, te toca luchar contra algunos demonios menores.
De nuevo, toca tomar una Decisión:
- Neve, conmigo.
- Harding, conmigo - Hemos escogido esta opción.
No hay mucho que decir: avanza hasta el andamio para derribarlo. Una cosa llevará a la otra y ¡dentro créditos! Ahora tenemos una secuencia con varias opciones de diálogo.
- Me gustaría despertarme - Hemos escogido esta opción.
- ¡Es un truco!
- Vale. Habla.
Y después de eso:
- ¿Por qué debería creerte?
- Claro. Tú eres el héroe - Hemos escogido esta opción.
- Los has dejado salir.
Aún hay más:
- Vale, me estás preocupando.
- ¡Es por tu culpa!
- ¿Sarcasmo? ¿En serio? - Hemos escogido esta opción.
- Pues claro que sí.
Otra secuencia, volvemos al mundo real, y más opciones de diálogo.
- Lo siento, Varric - Hemos escogido esta opción.
- Pero te necesito.
- Es peor de lo que crees.
- ¿Qué ocurrió exactamente? - Esta opción te da más contexto pero no avanza la conversación.
Después de esta última charla, pasarás a Sombras del viejo Arlathan.