Todavía quedan unos cuantos meses para que podamos disfrutar de todo lo que tiene que ofrecer, pero por fin empezamos a conocer más detalles sobre Fire Emblem: Three Houses, la próxima entrega de la veterana y aclamada saga de rol y estrategia por turnos de Intelligent Systems que llegará en exclusiva para Nintendo Switch el 26 de julio.
En el último Nintendo Direct la compañía decidió centrarse en explicarnos un poco mejor su premisa argumental, permitiéndonos descubrir de paso algunas de las interesantes y llamativas novedades jugables que traerá consigo un título con el que se pretende aportar frescura y nuevos aires a la serie.
Esta vez la historia nos llevará al continente de Fódlan, una tierra que se encuentra dividida en tres grandes naciones: el Imperio de Adrestia, el Sacro Reino de Faerghus y la Alianza de Leicester, cada una con sus propias culturas, regímenes políticos y costumbres. Como no podía ser de otro modo en esta saga, las tres potencias se enzarzaron en cruentas guerras entre ellas hasta que finalmente consiguieron alcanzar un punto de equilibrio que les permitió encontrar la paz.
En el centro de Fódlan, colindando con las fronteras de todas las naciones, se encuentra el Monasterio de Garreg Mach, un lugar neutral famoso por su Academia de Oficiales y por ser la sede principal de la Iglesia de Seiros, la religión que impera en el continente y cuyos caballeros se encargan de mantener el orden para que no estalle un nuevo conflicto bélico.
Como viene siendo habitual en las últimas entregas de Fire Emblem, encarnaremos a un héroe o heroína (nos darán a escoger el sexo de nuestro personaje principal) que se convertirá en uno de los instructores de la Academia de Oficiales, una escuela a la que los nobles de las tres grandes potencias mandan a sus hijos para que los adiestren y preparen para gobernar y combatir en un futuro.
Por supuesto, tal y como era de esperar por el nombre del juego, la academia se divide en tres casas distintas que representan a cada una de las naciones de Fódlan: Águilas Negras (Adrestia), Leones Azules (Faerghus) y Ciervos Dorados (Leicester).
Una de nuestras primeras elecciones al llegar allí será decidir a qué casa queremos instruir, por lo que pasaremos a hacernos cargo de unos estudiantes u otros dependiendo de lo que decidamos, todos ellos con sus propias personalidades, habilidades y características únicas.
Como sus profesores, tendremos que entrenar a nuestros alumnos, dar clases, asignarles deberes y marcar sus objetivos para que aprendan a blandir unas armas u otras y ayudarles a que definan sus clases y habilidades. Esto promete abrirnos muchísimas opciones y posibilidades a la hora de personalizar a nuestras unidades y controlar su evolución y desarrollo. ¿Queremos que un estudiante monte a caballo? Dale clases de equitación. ¿Otro tiene un gran potencial mágico? Ponle a estudiar hechizos. ¿Nos gustaría que uno de ellos sea un gran espadachín? Haz que entrene cada día con una espada para que domine su manejo.
Otro detalle muy interesante es que la academia la podremos explorar moviéndonos libremente en 3D por ella, pudiendo aprovechar nuestro tiempo libre para hablar con nuestros alumnos, conocerlos mejor y estrechar nuestros vínculos con ellos. De hecho, también nos tendremos que preocupar de desarrollar sus amistades y fomentar el compañerismo entre ellos, algo que nos dará acceso tanto a conversaciones especiales como a habilidades de apoyo en el campo de batalla, así que nos interesará que se lleven bien para que se potencien e inspiren mutuamente en los combates.
Hablando de combates, al tratarse de una academia militar, nuestros estudiantes serán enviados a misiones reales en las que tendrán que enfrentarse a enemigos de verdad, ya sean simples bandidos o peligrosas y monstruosas criaturas. De esta parte del juego todavía no se ha dicho demasiado, más allá de que volverán a tratarse de batallas por turnos al estilo tradicional de la serie, aunque en los tráilers se puede apreciar que nuestras unidades van ahora acompañadas de batallones de soldados, quienes pueden adquirir diferentes tipos de formaciones a la hora de atacar, una novedad que nos tiene muy intrigados desde la primera vez que se mostró. Por desgracia, todavía no se ha explicado cómo funcionará ni la importancia que tendrá dentro de sus mecánicas jugables.
De igual modo, no tenemos nada claro cómo se va a gestionar la muerte permanente, todo un clásico de Fire Emblem. En el último Nintendo Direct quisieron recalcar numerosas veces que el peligro al que se enfrentarán los estudiantes es "muy real" y que de nosotros dependerá que sobrevivan o no, por lo que todo apunta a que regresará para obligarnos a valorar con mucho cuidado nuestras acciones. La pregunta es si habrá un modo para novatos como en las entregas de Nintendo 3DS que nos permita desactivarla, algo que no nos extrañaría nada.
En lo que respecta a su apartado gráfico, estamos ante la primera entrega de la saga principal para una consola de sobremesa desde hace la friolera de doce años, ya que el último título de la serie que pudimos disfrutar en nuestro televisor fue Fire Emblem: Radiant Dawn de Wii, un juego de 2007.
Como podréis suponer, gráficamente hay una gran evolución respecto a sus predecesores, con personajes bien modelados, detallados y proporcionados que hacen gala de un cel shading muy resultón y que funciona realmente bien, aunque las animaciones y los escenarios tienen todavía un amplio margen de mejora.
Probablemente, el aspecto más controvertido lo tengamos en su diseño de personajes, obra de Chinatsu Kurahana, quien es especialmente conocida por ser la diseñadora de la saga Uta no Prince-sama, unas novelas visuales para chicas muy populares en tierras niponas. A nosotros no nos termina de convencer su estilo para Fire Emblem y la mayoría de héroes que hemos vistos nos han resultado un tanto genéricos y faltos de personalidad (siempre hablando en términos de diseño), aunque todavía es pronto para valorar esto como se merece y hay ciertos personajes, como Sothis, que sí que nos han llamado mucho la atención.
Fire Emblem: Three Houses promete ser un gran juego de rol y estrategia por turnos repleto de posibilidades, pero todavía tiene mucho que demostrar, ya que apenas hemos visto nada a día de hoy. Nos resulta muy curioso que Nintendo haya decidido centrarse primero en hablar sobre su premisa argumental y no sobre sus mecánicas jugables más básicas, algo a lo que la compañía suele dar prioridad, lo que nos hace suponer que todavía se están guardando muchas cosas. Sea de un modo u otro, y viendo el impecable historial de Intelligent Systems con el género, no podemos esperar a que llegue el 26 de julio para echarle el guante, escoger una casa a la que adiestrar y descubrir hasta dónde es capaz de llegar.
