El auge de los juegos de terror –sobre todo el psicológico en la escena indie- no es el responsable directo de rescatar a uno de los mitos del género slasher: Jason Voorhees, o lo que es lo mismo, Viernes 13. Aunque promete sustos y pánico, Friday the 13th: The Game apuesta por otra de las tendencias de la industria, el multijugador asimétrico.
No es muy habitual que una licencia de cine cree expectación salvando contadas ocasiones. Por suerte, las desarrolladoras se han vuelto más selectivas con este tema y en los últimos años hemos visto lanzamientos como Alien: Isolation, muy respetuoso con el material y espíritu original. El mérito de Friday the 13th es que detrás no se encuentra una desarrolladora con gran presupuesto o renombre; de hecho, la financiación de este proyecto parte de Kickstarter.
Nos encontramos en Higgins Haven, en el año 1984. Jason irrumpe en el campamento de Crystal Lake y, cinco minutos más tarde, comienza la partida con una única premisa: sobrevivir.
Para ello, los jóvenes tendrán que encontrar diversos objetos o armas que les permitirán tener una oportunidad para huir. De esta forma, habrá que investigar las casas y los alrededores para conseguir los recursos necesarios para la huida.
IllFonic y Gun Media han apostado por este tipo de multijugador basado en enfrentar a dos equipos desiguales. Un usuario interpreta a Jason, el asesino en serie, y siete jugadores a las potenciales víctimas con la misión de no morir durante el tiempo de la partida, o de escapar del campamento por alguna de las vías disponibles. Un escondite virtual donde cada partida será completamente distinta según la experiencia y estrategia del jugador que controla a Jason.
Por cuestión de probabilidad, la mayoría de ocasiones nos tocará interpretar a uno de los inocentes jóvenes, débiles pero no indefensos. Podrán hacerse con algunas armas blancas e improvisadas, y aunque nada de esto mata a Jason, sí ralentizará su progreso. Sólo bajo ciertas condiciones y colaboración en grupo puede ser derrotado, pero se dice que será difícil y necesitará mucha coordinación entre los amigos. Por tanto, la mayor parte del tiempo las partidas consisten básicamente en moverse con sigilo, utilizar distracciones y trampas. Jason no puede saltar por una ventana, así que construir barricadas en las puertas es una buena idea para frenar su avance.
El grupo de amigos tiene varios objetivos para alcanzar la victoria, tales como encontrando piezas de motor para hacer funcionar uno de los vehículos del mapa o arreglar la línea telefónica para llamar a la policía, que llega después de pasado un tiempo. Estas pruebas manipulando aparatos estropeados incluyen algún evento de pulsación de botones, y fallar alerta de nuestra posición a Jason. De todas formas, no están desarmados; cuchillos para salvar la vida en el último instante o bengalas para localizar al asesino en el mapa serán de gran ayuda. Incluso en determinadas situaciones aparecerá Tommy Jarvis equipado con una escopeta –de escasísima munición-.
Para igualar el enfrentamiento, Jason representa la fuerza bruta, lenta e imparable. Dispone de algunas habilidades sobrenaturales para perseguir –viaje rápido-, cazar y matar a sus presas con mejoras en el sonido y la visión detrás de objetos sólidos -dentro de edificios sólo hay una idea aproximada de la presencia, no su lugar preciso-. Localiza a una víctima, muévete por las sombras con una invisibilidad temporal, causa miedo con tu presencia –hay personajes que entran en pánico-, rompe ventanas para dañar a quien pase por ellas y ataca en el momento de más vulnerabilidad. Gana su partida si el resto de usuarios han muerto.
Las habilidades y parámetros de velocidad, fuerza, resistencia o inmunidad al miedo varían según el joven elegido. Esto último dicta un poco nuestra forma de afrontar las situaciones, ya que estar a la intemperie durante demasiado tiempo asusta a los personajes más miedosos y alerta a Jason. También hay otras mejoras temporales y cambios de ropa que nos da una mayor sensación de personalización.
Una de las mecánicas más importantes para los supervivientes es la barra de resistencia. Sólo podemos correr durante una determinada cantidad de tiempo y después llega el cansancio. No se le presta demasiada atención hasta que Jason empieza una persecución por el bosque y el refugio más cercano queda lejos; quedar sin aliento es lo peor que te puede pasar en un enfrentamiento directo.
En el caso del enmascarado, estas variantes provienen de las versiones vistas en secuelas –con cambios en fortalezas, debilidades y de aspecto- a las que se suma un diseño totalmente original de Tom Savini, el actor y artista de efectos especiales. Por ejemplo, sólo las versiones humanas de Jason pueden correr, lo que cambia drásticamente la manera de afrontar la caza.
Este tipo de multijugador debe ser divertido para ambas partes independientemente del rol que nos toque interpretar. Para ello, el equipo está trabajando en recrear el ambiente de Crystal Lake y sus alrededores inspirados en la saga para ofrecen multitud de oportunidades de sigilo, seas presa o cazador, en entornos naturales e interiores, con múltiples secuencias de muerte contextuales al arma o el lugar. Es un pequeño mundo abierto que merece la pena explorar, porque todo apunta a que conocer bien el terreno será una de las claves para salir victorioso en cualquiera de los dos papeles.
Una de las sombras que planea sobre Friday the 13th: The Game –u otros multijugadores asimétricos- es esa necesidad de cooperación entre jugadores. La beta cerrada ha demostrado que este juego no es muy diferente a otros: muy entretenido cuando al menos una parte del equipo entiende su misión, pero un caos cuando cada integrante decide ir por su cuenta. Que esto suceda con un par de personajes no causa demasiados problemas, pero si eres el único que se toma en serio el plan de fuga, puede resultar un poco frustrante.
Para evitar que el juego muera antes de tiempo por una comunidad poco entregada, los desarrolladores han previsto un modo solitario que llegará en verano con bots y misiones que recrean escenas de las películas. Aunque está lejos de ser una campaña o modo historia, parece un buen tutorial para aprender las bases del juego.
Primero el multijugador, a principios de año
En teoría Friday the 13th: The Game tiene muchas opciones para atraer a un buen número de usuarios, aficionados a las películas o simplemente a este tipo de juegos. Sin embargo, ya hemos visto algunos batacazos comerciales de juegos orientados al online –Evolve, Battleborn- con fuertes campañas de publicidad y es difícil saber cómo progresará una vez se ponga a la venta, primero con los modos multijugador, a principios de este año.
Si el equipo logra pulir un poco los aspectos técnicos, que es lo único que muestra la limitación de su presupuesto, podríamos estar ante una de las sorpresas más gratas de 2017.
