Que la vertiente más clásica del rol occidental vuelva a estar de moda tras años relegada al olvido es probablemente una de las mejores noticias que hemos recibido los fans de juegazos tan inolvidables como Baldur's Gate o Planescape Torment. Buenos ejemplos de ello los tenemos en las ediciones mejoradas de la mencionada saga de BioWare o en los exitosos Pillars of Eternity o Divinity: Original Sin (cuya segunda parte ya está en marcha).
Curiosamente, la mayoría de ellos han tenido que financiarse mediante crowdfunding, pero el respaldo que han recibido tanto por parte de crítica como de público han demostrado que hay muchas ganas de volver a disfrutar de una forma de entender el rol que se había perdido y que sigue siendo tan efectiva a día de hoy como hace dos décadas.
Nacido bajo esta misma premisa, Torment: Tides of Numenera acaba de desembarcar en el programa de Acceso Anticipado de Steam con el objetivo de convertirse en uno de los nuevos referentes del género. De hecho, sus desarrolladores, inXile Entertainment, ya han demostrado su buen hacer con Wasteland 2 y lo útil que puede llegar a resultar una beta para un juego de estas características, por lo que no estamos precisamente ante unos novatos en estas lides.
Lo primero que hay que dejar claro es que, tal y como su propio nombre indica, el título se basa por completo en Numenera, un reciente y exitoso juego de rol de mesa, papel, lápiz y dados. Y no nos referimos solo a su ambientación, sino a todas las reglas del mismo, por lo que el objetivo que se han marcado con esta aventura es la de hacernos sentir en todo momento que estamos viviendo una partida de Numenera, del mismo modo que Baldur's Gate y Neverwinter Nights hacían lo propio con Dungeons & Dragons.
Al tratarse de una beta, solo hemos tenido acceso a una pequeña porción del juego (el comienzo y poco más, aunque completar todo esto da para unas cuantas horas) y se nota en todo momento que se trata de un producto inacabado, por lo que hemos sufrido una enorme cantidad de bugs y errores de programación realmente molestos que nos han impedido disfrutarlo tanto como nos hubiese gustado, aunque precisamente por eso se ha lanzado en el Acceso Anticipado de Steam: para solucionarlos y pulir el producto de cara a su lanzamiento final.
Lo primero que nos ha llamado poderosamente la atención es el inicio del juego. En vez de crearnos un personaje con un editor clásico, aquí lo tendremos que perfilar por medio de un curioso y original prólogo en el que nos propondrán tomar muchas decisiones dentro de unos pequeños relatos. Por medio de ellas, escogeremos nuestra clase, definiremos nuestra personalidad y concretaremos otros detalles igualmente importantes para la ficha de nuestro avatar protagonista.
Esto que en un principio puede resultar confuso (que lo es), nos ayudará a la hora de crearnos el personaje que queramos jugar, aunque al final de esta aventura introductoria se nos dará la posibilidad de modificar la ficha de forma manual para asegurarnos de que la tenemos tal y como queremos, pudiendo volver a seleccionar clase, repartir los atributos, seleccionar las habilidades, etcétera. Lo que sí que no se nos permite, al menos en esta versión preliminar, es editar el aspecto físico de nuestro personaje más allá de su sexo.
En lo que se refiere a sus mecánicas de juego, al igual que en su contrapartida de papel y lápiz tenemos tres medidores distintos: vigor, velocidad e intelecto. Dependiendo de nuestro nivel de habilidad con cada uno de estos atributos las tiradas que los utilicen tendrán una dificultad mayor o menor, aunque podremos invertir puntos extras para reducirla. Eso sí, mucho cuidado con esto, ya que dichos medidores también serán nuestra barra de vida y cuando todos lleguen a cero moriremos (evidentemente, el daño que recibamos los reducirá).
Todos ellos lo usaremos con frecuencia no solo en combate, sino para realizar multitud de acciones mientras exploramos e interactuamos con el mundo. Se trata de un sistema muy fácil y sencillo de entender, que aporta un buen toque de estrategia y que permite que las partidas fluyan sin problemas.
Numenera es un juego de rol muy narrativo donde lo realmente importante es explorar y descubrir un mundo de ciencia ficción por el que han pasado multitud de civilizaciones antes que la nuestra, por lo que los diálogos y las conversaciones tienen un gran peso. De hecho, nos vamos a pasar muchísimas horas leyendo y siempre tendremos un buen número de opciones para actuar en cada situación, y aquí la experiencia no la recibiremos por matar monstruos, sino por completar misiones y realizar descubrimientos.
Esto hace que al menos en sus primeros compases tenga un ritmo algo lento y muy denso, especialmente si no estamos familiarizados con su ambientación, ya que el juego no hace demasiados esfuerzos en explicarnos su funcionamiento y será algo que tendremos que descubrir por nosotros mismos poco a poco.
Todo este enfoque es algo que también queda muy patente durante los combates, ya que no se tratan de batallas puestas de forma aleatoria para dificultar nuestro avance, sino que todas ellas están justificadas argumentalmente y van mucho más allá del simple intercambio de golpes.
Dichos enfrentamientos se desarrollan por turnos y cada vez que le toque a uno de nuestros personajes podrá moverse y realizar una acción. Esta puede ser una habilidad, un ataque o incluso algo relacionado con el entorno, como interactuar con una máquina para desbloquearla y así usarla como arma y otros muchos ejemplos que no vamos a detallaros para no arruinaros sorpresas.
Además, en dichos combates no siempre tendremos que acabar con los enemigos y podremos resolverlos de diversas maneras según la situación. De hecho, si los enemigos son inteligentes nos dejarán incluso entablar conversación con ellos para intentar convencerlos de que no merece la pena seguir luchando o para sonsacarles información. Gracias a esto cada lucha se siente única y bien integrada dentro de la narrativa, sin olvidarse de ofrecer un reto estratégico y divertido, aunque por culpa de los bugs que hemos sufrido no hemos podido degustarlos en condiciones.
A nivel gráfico no es un juego que impresione demasiado, con unos modelados de personaje muy mejorables, unas animaciones realmente toscas, un rendimiento un tanto deficiente y unos efectos que todavía necesitan mucho trabajo, aunque los escenarios sí que cuentan con multitud de detalles y su dirección artística nos ha parecido que plasma muy bien el universo de Numenera. De todos modos, se trata de un juego todavía en desarrollo y seguro que de aquí a su lanzamiento final se producirá una mejora notable en este apartado.
Respecto al sonido, tenemos una banda sonora que nos ha dejado muy indiferentes, con unos temas que nos han resultado muy repetitivos y no demasiado inspirados. Los efectos son meramente funcionales y el doblaje (en inglés), apenas cuenta con voces para las conversaciones, aunque los actores cumplen bien su papel. Actualmente solo se puede jugar en la lengua de Shakespeare, pero cuando se estrene el juego como un producto finalizado estará traducido al español, toda una alegría considerando la ingente cantidad de textos que tiene la aventura, y no en un inglés precisamente fácil.
Torment: Tides of Numenera tiene una pinta realmente prometedora y lo que hemos podido jugar nos ha transmitido muy buenas vibraciones. Si inXile corrige todos sus problemas, pule la fórmula y hace caso de la comunidad, podríamos estar hablando de un juego de rol con una personalidad única, diferente al resto y con decenas de horas de disfrute por delante. Ahora solo nos queda esperar que no salga una pifia en los dados y que su desarrollo siga por el buen camino que ha demostrado con esta beta.
Hemos escrito estas impresiones gracias a un código de descarga que nos ha proporcionado Dead Good Media.