Men of War: Assault Squad pertenece a una de las sagas más reconocidas y queridas por los amantes de la estrategia en tiempo real, Soldiers: Hereos of World War II. El título, lanzado en 2004, promovió una serie de novedades y cambios que hasta la fecha, se han convertido en verdaderos puntuales de cientos de títulos y juegos de la misma temática. Si buscáis un título de estrategia donde los soldados y los recursos fueran algo más, era aquél. Sus señas de identidad se han convertido, con el paso del tiempo, en verdaderos estándares de calidad repetidos por propios, y extraños. Men of War, una de sus ampliaciones y entregas más famosas, nos llega ahora a nuestros compatibles, convertida en una pieza completamente independiente y con ganas de demostrarnos por sí misma, sus cualidades como soldado en la truculenta y competitiva guerra de los simuladores de estrategia en tiempo real. No es tarea fácil, pero lo visto, deja el suficiente buen sabor de boca como para saber por donde irán los tiros (y nunca mejor dicho). Así pues, soldado, recoja su petate: ¡La guerra nos espera!
La potencia sin control no sirve de nada: Assault Squad y los detalles
Hoy en día es muy extraño encontrarse con juegos que intenten demostrar quienes son gracias a sus mecánicas, y no por sus envoltorios. En un género dominado por el artificio (muchas veces, tenemos que gestionar o pasar por decenas de páginas y menús de planificación antes de jugar), es extraño encontrarse con un planteamiento algo clásico, y en cierta manera (y para algunos) pasado de moda. Y es que, Men of War: Assault Squad, no guarda relación entre un escenario y otro.
No tenemos un mapa gigante sobre el que ir colocando marcadores o transportando nuestras tropas para conquistar territorios. Todos los mapas son zonas individuales e independientes entre sí, ya que no guardan relación directa entre ellas. Es decir, si superemos un nivel con un determinado número de tropas, o si no lo hacemos, no nos veremos obligados a reiniciar la campaña para llegar "más frescos". Quizás esto decepcione a muchos puristas, pero es lo que hace al juego tan libre y diferente una vez se entra en batalla.
Assault Squad ofrece un concepto de juego y un planteamiento básico ligeramente diferente a sus competidores. Está basado en escenarios individuales históricos ambientados en la Segunda Guerra Mundial (plenamente reconocidos por todos), que recrean a su vez los frentes y batallas más importantes del conflicto. Así pues, viajaremos a los sitios más alejados (zonas del Pacífico o Rusia) y combatiremos en conocidas batallas en África o Europa. La variedad escenográfica es algo bastante interesante, ya que no se limita a presentar escenarios monográficos, con colores y texturas repetidas hasta la saciedad en un intento de aparentar duración o coherencia histórica. Assault Squad elige bien el emplazamiento de sus guerras, y a los hechos nos remitimos: Operación Overlord (la conocida batalla en Normandía), Carentan, Las Ardenas, Caen, Operación Battle Axe o Iwo Jima, son algunas de las que veremos en el juego completo. Todo un despliegue que dotarán de variedad al jugador a la hora de ponerse a los mandos de sus ejércitos.
Y es que, en el control, es donde realmente Assault Squad ofrece toda su artillería. En la última entrega, y al igual que en las anteriores, Assault Squad brinda a los jugadores el control más absoluto sobre sus tropas. DigitalMindsoft ha hecho suya la máxima de la serie, y ha vuelto a proporcionarnos el control directo sobre cualquier soldado o elemento de nuestro ejército.
Ya sea con un tanque, o con un simple soldado de infantería, podemos saltar al campo de batalla controlando hasta el más mínimo detalle. Podremos moverlos, desplazarnos por el escenario, disparar o bombardear. Lo que sea. Y en cualquier momento. Es decir, en un momento determinado podemos ver como están aniquilando a nuestras tropas desde una posición, tomar el control directo, sorprenderlos, y evitar la masacre.
Assault Squad basa su esquema, como hemos dicho, en mapas y campañas individuales a lo largo de todo el mundo. Cada mapa contará con varias banderas que marcarán las zonas a conquistar por el jugador (o por nuestro enemigo, lo que hace que en ciertos mapas, alcanzar la victoria sea algo digno de la mayor épica bélica jamás contada), por lo que tendremos que ir dando órdenes a nuestras tropas para tal motivo. Eso sí, solo los soldados de infantería tendrán dicha cualidad de conquistar, ya que los vehículos no podrán hacerlo. Cuantas más zonas y objetivos cumplamos y conquistemos, el número de tropas (y su especialización) será mejor. La variedad de tropas es abrumadora, y cada ejército o facción cuenta con sus propias unidades, armas o vehículos. Cada jugador (así como la I.A) contará con una serie de puntos en los que invertir a la hora de comprar unidades. Al principio tendremos unos pocos, los justos para formar una fuerza de acción rápida, pero que luego aumentarán conforme alcancemos objetivos, con la posibilidad incluso de pedir acciones únicas y especiales en la pedida de refuerzos (encargando vehículos especiales, ataques aéreos, unidades de élite o veteranas, etc). Además, el grado de fidelidad mostrado en las recreaciones de las unidades militares en Assault Squad es tal, que por ejemplo, sabremos que un tanque ruso poco o nada tendrá que hacer contra un alemán. Las cosas claras, y el chocolate, espeso.
Uno de los factores clave en la gestión de una partida de Assault Squad, son los puntos de mando y los puntos de refuerzo. Si los puntos de mando nos permiten comprar unidades "normales" (y nos limitan la cantidad de ellas que podemos controlar y dar órdenes), los puntos de refuerzo son los que nos brindan la posibilidad de poder elegir ataques y unidades especiales que nos arreglen el estropicio en un momento determinado y los puntos de élite, elegir las mejores tropas disponibles. Cada tropa tiene un coste, que debemos asumir antes de encargarla y utilizarla. Conforme mejor seamos sobre el campo de batalla, y mejores nos hayamos portado en nuestras decisiones estratégicas (es decir, mayor número de banderas tengamos entre las manos), mejores unidades y mayor número de ellas tendremos encima del tapete virtual. Eso sí, es conveniente saber que los puntos de las unidades de élite se pierden y no se recuperan una vez gastados, por lo que si queréis conquistar la loma con un grupo de veteranos, mejor que os lo penséis dos veces.
Tiene cuatro modos de juegos bien diferenciados (aunque con sus lugares comunes), de los cuales, la gran mayoría, están orientados al multijugador y la experiencia online. El primero de ellos (como os hemos explicado un poco más atrás), el denominado Batalla, nos ofrece la mecánica clásica de la saga, conquistando puntos y posiciones determinadas. Cuantas más conquistemos, y mejor lo hagamos, más rápido crecerán nuestras tropas y mejores equipamientos y experiencias ganarán. Realmente, es el modo principal (o "campaña") de Assault Squad, y donde, como comentábamos al principio de las impresiones, invirtamos más parte del tiempo.
De hecho, sus creadores lo conciben como una puesta a punto y un gran entrenamiento para todos aquellos jugadores nóveles que no hayan tenido contacto antes con la saga, y que prefieran pasar sus horas en él antes de aventurarse a competir y divertirse online. El modo multijugador nos ofrece más experiencias: En Combate Libre, lucharemos en una típica guerra de desgaste, aniquilando unidades enemigas por doquier, y obteniendo puntuaciones por ello. Gana el jugador que consiga una puntuación más alta. En Asalto, el controlar y administrar las posiciones, nos brindará la victoria frente a nuestros opositores y por último, en Línea de Frente, los jugadores se turnarán posiciones de defensa y ataque, ganando el que mejor administre ambas facetas de la guerra.
Gráficamente, ha experimentado una evidente mejora. La variedad de terrenos y elementos escenográficos es abrumadora, sobre todo dado el amplio nivel de recreaciones y batallas de las que hace gala el juego. Tan rápido estaremos sobre las verdes praderas de la Europa central, los pantanos y las espesas zonas tropicales del Pacífico, que sobre los territorios nevados de Rusia. El motor gráfico muestra unos escenarios grandes, diferentes...Y moldeables a las crueldades de la guerra. Y es que la orografía de Assault Squad es una parte esencial en la mecánica jugable. Ahora podemos destrozar casi cualquier elemento visible (desde casas y construcciones hasta el mismo suelo), deformando el aspecto del campo de batalla y usándolo para nuestro beneficio. Las unidades de guerra también están increíblemente cuidadas, con unos modelados fieles a sus homólogos reales, y con detalles que dejarán boquiabiertos a los más fanáticos del periodo de la Segunda Guerra Mundial. Desde las ropas, a las armas, todo está cuidado y perfeccionado hasta el último suspiro. ¡Menudos primeros planos se marcan los chicos de DigitalMindsoft!
Una hoja de servicios impecable a la espera de órdenes: Conclusiones preliminares
Los aficionados a las estrategia sabrán, que Assault Squad, es un título que necesita de cierto grado de aclimatación. Su dominio completo exige bastante tiempo, y es normal, sobre todo al principio, que el jugador se sienta algo confuso o desorientado cuando tome los mandos. Assault Squad, no obstante, es un título que nos ofrece una interfaz bastante simple y adaptada a cualquier tipo de jugador, pero de la cuál, es muy complicado sacar partida si no se invierte tiempo y dedicación. La gestión de nuestras tropas (y sus recursos), saquear munición de nuestros enemigos, así como la oportunidad de poder suministrarle los equipamientos justos en el momento adecuado, serán rutinas que si bien durante las primeras horas permanecerán ocultas para todos, se acabarán convirtiendo en hábitos típicos de la faz experimentada en la guerra cuando pasen varios días a los mandos del videojuego.
No hay que agobiarse. Simplemente es una cuestión de aprendizaje que se verá recompensada al poco tiempo de entrar en el planteamiento del juego. Una vez nos aclimatemos, y sepamos sacar el máximo rendimiento a la gestión y a la utilización de las tropas (que tienen sus exclusivos códigos y gestiones diferentes las unas de las otras, así como equipamientos y comportamientos propios), nos daremos cuenta de la complejidad que esconde Assault Squad. Sin lugar a dudas, un juego a tener en cuenta en los próximos meses, más y cuando, seamos verdaderos fanáticos de la estrategia y no simples recolectores de recursos.