La Antigua Grecia abarca uno de los periodos más interesantes y llamativos de la historia de la humanidad, motivo por el que siempre ha tenido una presencia muy importante en el cine, la literatura y, por supuesto, los videojuegos. No en vano, el año pasado pudimos disfrutar de Assassin's Creed Odyssey, probablemente la mejor recreación que se ha hecho nunca de esta época, renovando así el interés por todo lo que rodeó a la cultura griega, su historia, sus protagonistas y, sobre todo, sus mitos.
Ahora, Creative Assembly también quiere ofrecernos su propia visión de este fascinante periodo con A Total War Saga: Troy, la próxima entrega de su saga estrella. Durante la pasada gamescom, tuvimos la suerte de asistir a una breve presentación, donde nos contaron las principales claves de un título muy prometedor y ambicioso que nos ha dejado con muchas ganas de ver más sobre él.
La verdad tras el mito
Siendo un poco más concretos, el título nos lleva a la Edad del Bronce, permitiéndonos jugar con hasta ocho facciones distintas a las que tendremos que ayudar a cumplir sus objetivos e imponerse frente a las demás.
Si hay algo que caracterizó a esta época fue su mitología, con multitud de historias sobre dioses, héroes y criaturas imposibles que dieron forma a toda una civilización, inspirando su arte y su cultura. Por ello, la idea de incluir estos elementos fantásticos y mezclar la realidad con la ficción es algo muy atractivo y tentador, aunque el estudio ha decidido cambiar el enfoque.
A fin de cuentas, y a excepción de los Total War: Warhammer, estamos hablando de una saga que siempre se ha mantenido fiel a la realidad y que ha intentado recrear batallas históricas (con mayor o menor rigor, pero la intención está ahí), por lo que no tendría demasiado sentido abrazar ahora la fantasía. De hecho, probablemente sería una decisión que provocaría el rechazo de muchos de sus fans.
Sabiendo esto, Creative Assembly ha apostado por algo muy interesante: explorar la verdad tras el mito mostrándonos a esos seres con un enfoque marcadamente realista que explique los motivos racionales por los que se crearon esas historias y creencias sobre ellos.
Para ilustrarnos estos nos pusieron dos ejemplos. El primero de ellos era el minotauro, el famoso monstruo de Creta que era mitad toro y mitad hombre, una criatura que en este juego será simplemente un guerrero extremadamente poderoso y musculado que utilizaba un yelmo con la forma de dicho animal para intimidar a sus enemigos. Por supuesto, sus hazañas en el campo de batalla serán las que hagan que sus adversarios crean que es un ser sobrenatural, difundiendo los rumores por toda Grecia hasta dar forma al mito.
El otro ejemplo que nos pusieron fueron los centauros, el nombre que reciben las unidades montadas a caballo del título. Si os preguntáis el motivo, se debe al hecho de que en esta época la caballería era algo extremadamente raro de ver, ya que la mayoría de soldados luchaban a pie o en carros, por lo que el estudio ha decidido hacer que las historias sobre estos seres nacieran por los jinetes que se dejaban la vida combatiendo.
Evidentemente, todo esto son interpretaciones que se han inventado en Creative Assembly para dar cabida y sentido a la mitología de la época, por lo que no esperéis mucho rigor histórico. Eso sí, nos ha parecido un enfoque muy atractivo y con el que le han sabido dar una interesante vuelta de tuerca a la manera de plantear estas cuestiones en un videojuego.
Por otra parte, los dioses también tendrán un gran impacto en la partida, ya que dependiendo de a quién rindamos culto recibiremos unas bonificaciones u otras. Esto es más similar a un sistema de moral que otra cosa, así que no esperéis que baje Zeus a concederos su gracia divina para derrotar a vuestros enemigos, sino que lo que ocurrirá será que nuestras unidades realmente creerán que tienen a su deidad velando por ellas, lo que hará que luchen mejor o desempeñen con mayor eficiencia ciertas tareas.
Tal y como era de esperar, tampoco faltarán los héroes más célebres de este periodo y cada facción contará con uno de ellos, como Aquiles o Héctor, unos guerreros extremadamente poderosos y útiles que podrán marcar la diferencia entre una victoria y una derrota si sabemos usarlos con cabeza.
Obviamente, esto es un Total War, por lo que no todo será combatir, ya que la parte de gestión estratégica por turnos sigue siendo importantísima. De hecho, la novedad más interesante que tenemos aquí es un nuevo sistema de comercio basado en múltiples recursos diferentes con los que podremos negociar y realizar trueques, dándonos así una mayor libertad a la hora de gestionar nuestro bando y resolver ciertas situaciones.
En lo visual no hemos podido ver mucho sobre él, pero sí que nos ha llamado enormemente la atención el trabajo artístico que se está realizando con él, representando el cielo y las zonas cubiertas por la "niebla de guerra" como si fuesen pinturas de cerámica de dioses y monstruos. Sin duda, una bonita metáfora del miedo a lo desconocido que ayuda a reforzar esa extraña mezcla de realidad y ficción con la que tanto juguetea el juego. Por supuesto, las zonas descubiertas se mostrarán con gráficos muy realistas y detallados, tal y como la saga ya nos tiene acostumbrados.
Un Total War muy prometedor
Como veis, A Total War Saga: Troy tiene una pinta muy prometedora. Sigue siendo puro Total War y se mantiene muy fiel a la fórmula que ha llevado a la saga a disfrutar del éxito y reconocimiento que tiene actualmente, pero aporta ideas muy llamativas y bien planteadas que ayudan a recrear con muchísimo acierto y algo de misticismo uno de los periodos más fascinantes de nuestra historia.
Todavía tendremos que esperar un poco para poder disfrutarlo, ya que su lanzamiento está previsto para el año que viene en exclusiva para PC, pero si os gusta la estrategia, haríais muy bien en no perderle la pista y seguir de cerca su desarrollo.
Hemos realizado estas impresiones tras asistir a una presentación en gamescom 2019.
