Análisis de Alien Versus Predator: Extinction (Xbox)

Pese a no haber aún una película que los enfrente directamente, Aliens y Predators, dos de los monstruos cinematográficos más populares (los primeros bastante más que los segundos) llevan años pugnando por la supremacía del universo en varios videojuegos. Los Aliens con su ferocidad y su gran capacidad para reproducirse, y los Predators con su avanzada tecnología y más por la diversión de "la caza" que por otra cosa. Entre estas dos civilizaciones completamente opuestas están los marines coloniales, mezclando un poco de salvajismo, algo de tecnología y el buen rollo característico.

Después de unos primeros juegos del género del FPS, entre los que destaca aquel Alien versus Predator de la Atari Jaguar que utilizaba los numerosos botones de esta consola (uno de los fracasos más sonados de la historia pero con este gran título de lanzamiento), Fox Interactive (propietaria de la licencia), Zono (desarrolladora) y Electronic Arts se han decidido a escenificar el penúltimo asalto de este choque de civilizaciones, de una forma un tanto inusitada: en un juego de estrategia en tiempo real diseñado para consolas.

Las comparaciones siempre son odiosas pero es imposible no ver las tremendas similitudes con el Starcraft de Blizzard. Aunque los personajes ya estaban creados, básicamente los Aliens son los Zergs (incluyendo los nidos y las "zonas infectadas"), los Marines son los Marines y los Predators son los Protoss. Después de que Blizzard se hubiese inspirado en Aliens y Predators, ahora es Fox la que se inspira en Starcraft para darle un toque estratégico a las matanzas entre especies galácticas.

Pero como decíamos, el juego está diseñado única y exclusivamente para consola y eso se nota mucho. Toda la construcción de estructuras y vehículos se omite completamente para dejar paso a un interfaz simplificado donde tenemos "algo" que crea unidades y mejoras para éstas (la estructura Shrine en el caso de los predators, el CommTech en el de los humanos y sobre los Aliens y su reina hablaremos más adelante). De esta forma, el juego está completamente orientado al combate con un poco de exploración, facetas que alternaremos en las siete misiones del modo campaña de cada especie.

La forma de jugar con los humanos (hablamos de ellos primero por especismo y porque además existen de verdad) gira en torno a la figura del Comm Tech, una especie de jefe de misión que es el encargado de pedir tropas, que llegarán a través de naves de descarga que podrán aterrizar en las zonas del escenario habilitadas para ello (numerosas en los escenarios, y dispuestas según avancemos por el escenario de una misión). El CommTech puede pedir tropas y comprar mejoras para ellas a través de una sencilla pantalla; el dinero para adquirirlas lo obtendrá aniquilando enemigos y mediante los "generadores de atmósfera". Tras repararlos, estos generarán dinero durante un periodo de tiempo hasta que exploten (un poco difícil de entender), un dinero vital para renovar nuestras tropas: infantería, lanzallamas, francotiradores, "Smartgunners" y auxiliares como médicos, sintéticos (humanos modificados que son expertos en mecánica y detectan enemigos) y otros CommTech (descaradamente de repuesto por si se nos muere el titular).

Los Predators funcionan de una manera ligeramente diferente a los humanos. Como estos, piden tropas, pero no pagando dinero, sino gastando "honor". Los Predators no están en el terreno para aniquilar a los aliens ni para investigar quiénes son los humanos ni que tecnología tienen, sino simplemente para cazar. La caza es su pasatiempo y cuanto más cacen más predators querrán unirse a la cacería. De esta forma, los Predators conseguirán honor matando a sus enemigos, arrancándoles la cabeza y exhibiendo su craneo con un rugido tribal. Hay varios tipos de Predators aunque hay que decir que la forma de jugar con ellos no es "en masa"; los Predators son los más poderosos del juego, tienen capacidad para curarse y para camuflarse, por lo que pueden ser muy efectivos incluso en solitario. Están los de cuerpo a cuerpo, los cazadores (como el que se atrevió a pelearse con Arnold y recibió una buena paliza) y más tipos a cada cual más especializado en un tipo de pelea y más caro (francotiradores, maestros de la lanza, etc...).



Por último están los Aliens. Al tratarse de una civilización inspirada en los insectos y que básicamente solo vive para matar de forma cruel a todos los amigos de Sigourney Weaver, los Aliens no tienen naves espaciales ni nada por el estilo. Está la Reina Alien, un ser gigantesco con una considerable cantidad de vida y una increible capacidad de regeneración. Ésta pondrá huevos que se transformarán en minibichos cuya misión es infectar cuerpos enemigos, crecer dentro aprovechándose de ellos y convertirse en Aliens crecidos. De esta forma, los Aliens se comportan perfectamente como una plaga; cuantos más enemigos mates con tus Aliens, más Aliens podrás crear. De hecho, podremos mandar a nuestros aliens a cargar con cadáveres y llevarlos al nido. Hay dos tipos de larvas Alien, una más costosa de eclosionar que se usa para crear las unidades Alien más importantes (como la Reina), y otra cuyo resultado depende de qué hayamos infectado. Si es un Predator, podremos conseguir un híbrido entre Predator y Alien llamado Predalien bastante curioso.

El control de AVP Extinction no es el de un juego de estrategia en tiempo real estándar, como habréis supuesto al estar adaptado para consola usa otro esquema. En primer lugar, con los dos sticks analógicos se controla la cámara del juego y la cámara del mapa. Pulsando A haremos una selección en la ventana del juego si hemos movido por última vez el stick L, o la cámara se desplazará al punto señalado en el mapa si estábamos moviendo el R. La selección y el movimiento/ataque se hacen con los botones A y B, mientras que L hace de botón auxiliar y transforma estas acciones en "añadir a la selección" y "desplazarse atacando" si lo mantenemos pulsado. El sistema de selección de unidades se simplifica pudiendo seleccionar todas las del mismo tipo pulsando dos veces el botón A, o bien todas dentro del círculo que cada vez se amplía más si mantenemos pulsado el mismo botón. Pulsando el botón R nos sale el menú de selección de comportamiento, donde podremos elegir si nuestras tropas son ofensivas, defensivas, estacionadas o pasivas hacia el enemigo, y otro tipo de cosas como el seguimiento a una unidad o personaje y el establecimiento de rutas de patrulla. Finalizando con el control, los botones X e Y nos transportan a la base y al lugar donde se ha producido el último aviso respectivamente, con el botón blanco controlamos los grupos (muy fáciles de crear y llamar, usando la cruceta) y con el botón negro realizaremos acciones especiales de un tipo de unidad (el menú de encargar tropas en el caso del Comm Tech, el camuflaje en el de los Predators).

Esta disposición de los controles es buena para el juego, que es tranquilamente el RTS que mejor se controla en una consola (gracias también a que no es muy complejo), y la jugabilidad en general es divertida y llevadera, salvo por algún que otro fallo de la IA cuando nos dirigimos en grupo hacia un lugar (algunas tropas se van por su cuenta por otro camino al ver que el paso es muy estrecho... con consecuencias fatales) y en el comportamiento de las tropas en general.

El apartado gráfico del juego es simplemente correcto. No posee fallos pero tampoco ninguna virtud destacable más allá que un framerate estable gracias al poco nivel de detalle y la poca complejidad poligonal del juego. Ciertos efectos son vistosos, mientras que el poder jugar con varias cámaras se agradece. El sonido tampoco es algo que destaque. Las voces (al igual que los textos) están en inglés, los FX son variados y predecibles y la música ambienta bien la acción ya que está tomada de las películas de ambos personajes.

Como conclusión, Alien vs Predator Extinction es un juego bastante interesante, donde destaca cómo cambia la jugabilidad según la especie que elijamos, pero cuyas mayores lacras son una duración limitada (tres campañas de siete misiones) y una falta de brillantez en sus apartados, con unos gráficos algo sosos y una inteligencia artificial que todavía necesita unos cuantos retoques. Si eres fan de la estrategia en tiempo real y quieres jugar a este género inexorablemente en Xbox, hazte con él. En otro caso, considerando que el 98% de los visitantes de esta web entran a través de un PC, hay docenas de alternativas empezando por Command & Conquer Generals y Warcraft 3.