Análisis de History Legends of War (Xbox 360, PSVITA, PS3, PC)

El género de estrategia, en la mayoría de sus acepciones y definiciones, siempre ha sido un coto cerrado para los jugadores de PC. Es la plataforma donde más extendidas versiones, secuelas y adaptaciones podemos encontrar, y algunas de ellas, de calidad incuestionable. Sería muy difícil hacer una relación de los títulos recibidos en PC los últimos años, pero sí que estamos viendo una cierta tendencia a adaptar y versionar los intríngulis de la estrategia a las consolas. En un incesante goteo de lanzamientos, consolas de sobremesa como Xbox 360 o PS3, han ido recibiendo versiones y adaptaciones muy interesantes de juegos y franquicias hasta la fecha, exclusivas de PC.

Los resultados pueden ser dispares, pero es evidente, que poco a poco, muchos de estos juegos se aventuran a salir también en máquinas que hasta hace nada carecían de exponentes del género en su catálogo. Legends of War, auspiciado por el canal estadounidense de televisión, History Channel, llegó hace unos años a la portátil de Sony, PSP, con un más que decente resultado final.

Ahora nos llega su versión para Xbox 360 y PS3 -además de PC-, contando con un buen lavado de cara y la adición de algunos modos, misiones y elementos que justifiquen el tiempo entre una adaptación y otra. Legends of War nos invita, consola y mando mediante, a capitanear a las tropas aliadas durante su asalto final en la Segunda Guerra Mundial.

Sangre y agallas

Legends of War, para Xbox 360, PS3 y PC, es una oda a uno de los mejores generales de la historia de la humanidad, y en particular, de los Estados Unidos: George Smith Patton. Patton, general con una dilatada experiencia -dirigió en la Primera Guerra Mundial una brigada de carros de combate en Francia y se encargó, entre otras hazañas militares ocurridas en Túnez y Marruecos, personalmente del desembarco del VII Ejército en Sicilia allá por 1943-, es el protagonista absoluto del juego, pivotando todo, en cuanto a argumento y hechos históricos, alrededor de la obra y milagros del laureado personaje. El carismático general también fue el encargado en jefe de dirigir al III Ejército de los Estados Unidos durante la operación Overlord, -el desembarco definitivo de los aliados en territorios ocupados por los nazis en junio del 1944-, hechos que en su mayoría se relatarán en Legends of War.

El juego comenzará con una breve introducción, donde se nos pondrá en situación. Junio de 1944. Los aliados se afanan por entrar y desembarcar en una Francia ocupada por las tropas del tercer Reich. Mientras avanzamos -como Patton y con todo los recursos del III Ejército a nuestra disposición- por la Europa más occidental, intentaremos cortar suministros, defender posiciones y atacar por sorpresa a los diversos emplazamientos y divisiones alemanas en nuestra ruta hacia Berlín. Así, Legends of War nos invitará a encarnar a semejante genio y estratega militar, siguiendo sus pasos, misiones y operaciones, que intentarán -en la medida de lo posible, ya que hay ciertas licencias históricas que pondrán de los nervios a los más fieles y amantes de la época-, ser idénticas a las ocurridas en los dos últimos años de la guerra que conmovió y conmocionó al mundo entero.

Juegos de guerra

A nivel jugable, Legends of War es un juego de estrategia por turnos de lo más clásico. Descontando el handicap que supone jugar con mando -nosotros, en el análisis lo hemos hecho en su versión para Xbox 360-, lo cierto es que Legends of War se deja jugar. Se han simplificado todas las tareas posibles, y se ha intentado replicar, de una forma inteligente, la experiencia de jugar con ratón y teclado. ¿Cómo? Pues eliminando la selección clásica, y apostando por un control individual de cada unidad de combate o tropa de infantería, todo ello mediante pulsaciones en los botones superiores -RB, LB-, golpes de stick analógico y un par de botones -X para agacharnos, Y para elegir armas, A para disparar-.

El transcurrir de un turno en Legends of War se puede reducir a dos fases: movimiento y ataque. Antes de cada misión, se nos ofrecerá una pequeña introducción técnica con los objetivos a cumplir, las unidades disponibles y la localización exacta en el mapa de campaña de la misma. Al principio solo tendremos acceso a los soldados y tropas de infantería, pero más adelante, conforme nos adentremos en la campaña de toma y liberación de París, recibiremos el apoyo de más unidades blindadas y especializadas, que nos facilitarán mucho las cosas, como tropas paracaidistas, ingenieros, distintos tipos aviones de apoyo... Legends of War tiene cuatro o cinco tipos de misión -ataque, combate, sabotaje, infiltración o defensa-, y en función de ellas, deberemos plantear un tipo de estrategia u otro.

Los mapas en los que transcurre el juego son de tamaño variable, destilando cierto toque a juego de mesa que nos ha gustado bastante. Es difícil explicarlo, pero Legends of War parece, por momentos, una adaptación virtual del famoso juego de tablero y miniaturas Flames of War -venerado y conocido por miles de jugadores en nuestro país, y por millones en todo el mundo-. De esta manera, sabremos perfectamente cual es la situación geográfica de cada elemento o unidad en el escenario, algo que nos facilitará mucho las cosas.

Con un simple vistazo -y siempre cuando la omnipresente niebla de guerra se disipe-, vislumbraremos elementos como casas, iglesias, bosques o setos, y sabremos perfectamente donde podemos cubrirnos, esperar o tender trampas. Algunos escenarios nos invitarán a que nos infiltremos en las líneas enemigas -de lejos, los más divertidos-, mientras que otros, buscarán el enfrentamiento directo con terrenos amplios y faltos de coberturas. La orografía del terreno en Legends of War influye bastante en la toma de decisiones, y eso nos ha gustado particularmente.

Pero nada más lejos de la realidad. La mayoría de las misiones se traducen al clásico "flanqueo y ataque rápido", con nuestros soldados asaltando a los alemanes a la mínima que tengamos oportunidad. A posteriori, repetimos, el juego tomará otro camino -sobre todo cuando nos internamos en territorio alemán-, más orientado al enfrentamiento directo entre ejércitos, pero dado que es un juego largo -una treintena de misiones ambientadas en siete campañas distintas-, lo cierto es que se puede hacer extremadamente repetitivo a corto y medio plazo. Para hacerlo más entretenido o variado, recomendamos encarecidamente elegir un nivel de dificultad alto, y evitar, en la medida de lo posible, usar las unidades disponibles más fuertes en combate -unidades que, en general, están limitadas a ocho distintas al mismo tiempo-.

El control de Legends of War es simple, pero cuesta un poco adaptarse. Al principio nos parecerá muy ortopédico eso de girar la cámara o hacer zoom, y más todavía eso de seleccionar un soldado y hacerlo disparar. Pero no hay que tener prisa, ni ser demasiado dramáticos. Legends of War, al ser un juego de estrategia por turnos, no nos presiona con incesantes tiroteos, y nos da la oportunidad de seleccionar y mandar a nuestras tropas al frente o a la acción sin necesidad de implorar al milagro. Esto, al mismo tiempo, es también su propia maldición jugable.

¿Por qué? Es sencillo. Supongamos que estamos tomando un apacible -en otro tiempo- pueblo francés. Nuestros informes hablan de que hay numerosas unidades y tropas alemanas en la zona, con lo que esperamos fuego enemigo. Una vez en combate, veremos que eso, a efectos prácticos, no es del todo exacto. Simplemente, en Legends of War, el combate, se limitará a un intercambio, ordenado y limpio, de disparos por turnos. No hay contraataques directos, o ataques sorpresa. Dispararemos, y ellos, harán lo propio cuando les toque su momento.

Sí, es lógico, pero nos sorprende que, un alemán que tiene a un soldado yanqui a menos de diez metros de su posición no se moleste en gastar ni una sola bala hasta que llegue su turno. En un juego mesa lo entendemos, ¿pero en un videojuego que se presupone más instantáneo, realista y directo? ¿Qué motivo hay? La situación, a la postre, es francamente desoladora, pues donde hablamos de un soldado alemán, más tarde, hablaremos de un tanque. O de una ametralladora fija. Legends of War puede convertirse en un juego insultante en cuanto a dificultad, así que, una vez más, os invitamos a poner toda la carne en el asador y jugarlo en el modo más complejo y difícil.

Una vez superemos una misión, se nos brindará una recompensa y se nos informará de una serie de consecuencias derivadas de nuestro éxito o fracaso en la misma. Por una parte, tendremos unos puntos de experiencia y prestigio que podemos invertir en las unidades, mejorando su ataque, defensa o carisma, y por otras, consecuencias directas como la cantidad de dinero perdido, nuestra reputación dañada o la cantidad de combustible utilizado. Gestionar reparaciones, heridas, bajas y demás consecuencias estará a la orden del día, e invertir con cabeza y razón nuestros recursos, será vital para el éxito de la campaña. Prestar atención a los recursos obtenidos y perdidos en las misiones -munición principalmente, así como a las heridas o bajas sufridas- es uno de los elementos más interesantes de Legends of War.

A nivel gráfico, Legends of War es una cal y otra de arena. No está nada mal, y cumple con lo que promete, pero lo cierto es que destila un cierto aroma a juego de bajo presupuesto y nula ambición -hay que recordar, que en herencia, es un juego de PSP muy vitaminado-. Tiene un motor gráfico relativamente solvente, con buenos modelados y texturas más que decentes, y el diseño, dentro de lo que cabe, nos ha parecido destacable. Estamos hablando de escenarios bien representados, con muchísimos elementos distintos y unidades similares a sus homólogas reales, pero poco más. No hubiera estado nada mal tener una visión en primera persona para apuntar mejor, o una vista superior más clara, pero no se le pueden pedir peras al olmo.

Legends of War tiene una buena banda sonora, con los consabidos temas y fanfarrias, pero también tiene uno de los peores doblajes y apartados sonoros en cuanto a efectos de los últimos tiempos. Los disparos suenan como petardos de feria, y los soldados aliados, que hablan en perfecto inglés, gritan a un nivel exagerado -más que suficiente como para despertar y alertar a media Alemania- y tienen un nivel de interpretación francamente pobre. Ni transmiten, ni consiguen otorgar realismo a la situación de guerra y tensión que se vive. Legends of War, eso sí, está traducido al castellano.

Conclusiones finales

Legends of War es un juego largo, a ratos entretenido, pero poco pulido, con una dificultad excesivamente variable y un sentido del ritmo totalmente inexistente. Tendremos la constante sensación de que las misiones se repiten una y otra vez, y que lo que parecía en un principio original o diferente, a las pocas horas se convierte en monótono. Con un poco más de ambición, y la inclusión de un modo multijugador online -el juego tiene un modo enfrentamiento entre dos jugadores en una misma consola muy interesante-, Legends of War habría ganado varios enteros como juego.

De sistema bien planteado -aunque tosco- y de dilatada duración, Legends of War ofrece mucho a tenor de su precio reducido, sobre todo si se disfruta con el género de la estrategia. Pero no os engañéis, pues en el fondo, lo que debería ser una oda ostentosa y fastuosa al trabajo del general Patton en los últimas días de la guerra, acaba siendo un somero agradecimiento.