Análisis de Fable Heroes XBLA (Xbox 360)
Pese al nombre, Fable Heroes no tiene casi nada en común con la serie de rol. Sus únicas conexiones son el mundo de Albión en el que se ambientan y que podrás usar parte del oro y contenido en el próximo Fable: The Journey. Tal vez el miedo a lanzar una saga nueva sin red ha llevado a poner esta hack’n’slash bajo el cielo de Albión. Tanto si es así como si no, resultado es una propuesta más divertida de lo que puede parecer al leer cómo funciona el juego.
Fable Heroes no se complica con una historia. Vas recorriendo los distintos escenarios del mapa (basados en Albion, con hielo, cuevas, cementerios…) a base de matar a todo enemigo que te encuentres y recoger el mayor número de monedas que puedas.
Con ese dinero puedes comprar luego habilidades para tus personajes en el tablero de habilidades. Si pierdes toda la vida podrás seguir jugando como fantasma, pero no podrás recoger monedas hasta que recojas un corazón y vuelvas a la vida.
Pero no es suficiente tener las monedas necesarias, sino que debes lanzar el dado en el tablero de habilidades y caer en una casilla que te interese. En los primeros momentos de juego esto puede ser algo desesperante porque, aunque tienes las 39 habilidades para comprar ante ti y dinero, algunas casillas están bloqueadas hasta que hayas jugado un escenario concreto, lo que te puede llevar a desperdiciar bastantes tiradas en las primeras partidas. El juego te incita así a que completes lo antes posible todos los niveles.
Un modo para un jugador soso al rato de estar jugando
Fable Heroes está pensado para jugarlo con más gente, y se nota. Aunque es posible hacerlo uno solo y que la inteligencia artificial lleve los otros tres personajes, el modo para un jugador se asemeja a unos trabajos forzados en los que vas recogiendo monedas para ir subiendo a tus personajes a base de comprar habilidades.
Cuando percibes que los otros tres personajes esperan con casi adoración tus decisiones casi echas de menos las trifulcas del online, aquellas en las que nadie se pone de acuerdo sobre qué camino seguir en una bifurcación y estáis un minuto yendo de un lado hacia otro hasta que alguien cede.
Jugando solo tirarás los dados por los cuatro personajes en el tablero de habilidades, lo que te llevará algo de tiempo. El equipo que viene por defecto tiene una configuración clásica de dos personajes cuerpo a cuerpo (un espadachín –el héroe- y una chica con un martillo a doble mano –Hammer) y dos a distancia (un mago y un personaje con pistola, -Reaver, que parece ser es el más débil inicialmente-). En el tablero podrás desbloquear otros personajes a base de monedas y también deberás comprarles las 39 habilidades, lo que alarga la vida del juego bastante, en caso de que quieras jugar con todos los personajes, claro.
Los niveles duran unos diez minutos y son bastante repetitivos. Consisten en matar hordas de enemigos y seguir avanzando cuando una zona queda limpia. En la mayoría de las refriegas hay momentos en los que no ves ni dónde estás por el lío de tus compañeros, unos 20 enemigos y monedas saltando por todas partes, hasta el punto de tener que usar el gatillo para localizarte con un círculo luminoso y tu nombre sobre tu cabeza. La situación se complica si la cámara está bastante alejada –algo que sucede en más ocasiones de las deseables-.
Al final de cada nivel hay una bifurcación, y eliges si enfrentarte a un jefe o a un minijuego. Algunos de estos segundos son originales y divertidos, como el lanzamiento de pollos a una portería o las batallas de supervivencia –realmente emocionantes jugando online-, pero las carreras quedan limitadas a un QTE ramplón.
La cámara es un problema en ocasiones, sobre todo en multijugador local. A veces te impide ver y coger algunas monedas, otras no logras ver la acción e incluso en las carreras es normal que uno de los jugadores desaparezca de la pantalla si queda retrasado, de forma que ni sepa qué teclas debe pulsar.
Un juego con un modo para un jugador que se siente como soso cuando llevas unas pocas partidas se salva y cambia al pasar a multijugador online. La estrella son los escenarios oscuros, los mismos pero sin luz y con otro aire y bonificaciones. Pocas veces jugarás en escenarios diurnos, y es lógico. Si quieres subir a uno de los personajes específico deberás ser tú el host de la partida o entrar en una partida personalizada. Olvídate de las partidas rápidas, ya que en estas están los cuatro personajes básicos y te asignan uno de ellos.
El multijugador te dará mucho dinero y buenos ratos al competir mientras cooperáis
Además de ser muchísimo más divertido porque tus compañeros no te protegerán con veneración, el online es mucho más fructífero económicamente hablando, y volverás seguramente de cada partida con un buen botín debido precisamente a que jugarás sobre todo en el Albión oscuro. Avanzaréis por el nivel todos juntos, pero al mismo tiempo luchando entre vosotros por cada moneda y cada cofre que os encontréis. Cuando no sepas qué hacer con todo el dinero que tienes de jugar online podrás esperar a que salga Fable The Journey y transferir allí tu oro. Y, cuando tengas Journey, podrás desbloquear otras dos marionetas.
Gráficamente el juego es atractivo. La idea de utilizar marionetas en lugar de personajes más realistas describe a la perfección cómo te sientes en una partida rápida online, en manos del host. Los escenarios tienen un aspecto algo infantil, pero también lo tenían los de LittleBigPlanet y no por eso era para niños. Con un aspecto más realista, es probable que Heroes no funcionase igual de bien.
Aunque el diseño de niveles es correcto, cabe destacar el de los créditos, probablemente el más divertido y original de todo el juego a lo largo del recorrido y su espectacular final.
Dentro de este apartado técnico hay que mencionar también la música, una estupenda ambientación con la variación necesaria para no cansar en ningún momento y animar a seguir jugando. En el lado negativo hay que incluir algunas caídas de frame rate en el multijugador cuando surgen las hordas de enemigos sobre todo, y picos de lag en el juego online.
Uno de los mayores problemas de Fable Heroes es su indefinición con el público al que se dirige, probablemente al intentar llegar a todo el mundo. La existencia de una dificultad Familia en la que la puntuación se divide entre todos los jugadores, lleva a pensar que va dirigido a los niños, para que jueguen con sus padres, pero el tablero de habilidades puede ser una barrera para ellos. Los adultos probablemente rechacen el aspecto del juego y su carácter casi de minijuegos. La franja intermedia echará de menos un modo historia y las carreras les parecerán de sobra, pero tal vez agradezcan el modo más difícil, sin HUD y, por tanto, sin saber cuánta vida te queda.
¿Y jugar con los amigos cuando vienen a casa? Puede ser una buena idea porque puede haber buenos piques. Pero incluso jugando con gente aleatoria puedes pasar unos ratos entretenidos sin mayores complicaciones.
Fable Heroes es un spin off con una jugabilidad muy diferente a su serie "madre" que gustará a los jugadores de la serie por sus guiños a los símbolos del juego de Albión (las referencias a los pollos son de lo mejor), pero incluso si nunca has tenido un perro en un juego puedes disfrutar de los niveles y las marionetas de esta propuesta.