Análisis de Mario & Sonic en los Juegos Olímpicos de Invierno 2014 (Wii U)

Ver a Mario y a Sonic juntos sigue siendo algo que muchos de nosotros encontramos chocante. Iconos de las consolas rivales antaño, con la salida de Sega del mercado de la fabricación de hardware, el popular erizo no ha tenido problema en llegar a las plataformas de su archienemiga, Nintendo, además, con algunos de los mejores juegos protagonizados por Sonic. Desde hace ya algunos años, Sonic y Mario se han dado la mano para celebrar los Juegos Olímpicos, tanto los de invierno como los de verano, y con los de Sochi a la vuelta de la esquina, toca de nuevo reunión.

A diferencia de los juegos deportivos de antaño, en los que la diversión residía en machacar botones hasta que tuviésemos toda la sangre de nuestro cuerpo concentrada en un brazo, estos títulos apuesta por una jugabilidad más relajada y variada, con la que se intenta transmitir sensaciones diferentes para cada minijuego, además de dirigirlo a un público más joven que, probablemente, no disfrutaría de una propuesta machacabotones.

Preparados...

Mario & Sonic en los Juegos Olímpicos de Invierno Sochi 2014 es un título que, dentro de lo fantástico de su propuesta, busca representar con cierto realismo las diferentes pruebas deportivas del campeonato, respetando en multitud de casos, las puntuaciones y las mecánicas de las originales. Aparte contamos también con eventos "Dream", en los que se introducen algunos elementos más fantásticos con los que aderezar la experiencia. De un modo u otro, no os esperéis aventuras extremas como las que viven nuestros protagonistas habitualmente en sus juegos.

De un modo u otro, las pruebas se suceden con relativa sencillez. Las mecánicas de cada una se explican en un claro aunque poco conciso tutorial –que podemos saltar– que nos ejemplifica una y otra la acción a realizar hasta que la hagamos correctamente. Si habéis jugado al anterior episodio de esta saga, lanzado para Wii, os encontrareis rápidamente familiarizados con los controles, ya que la evolución sufrida de una entrega a otra es bastante escasa. Tanto es así, que de no ser por el salto gráfico, en algunos la diferencia sería casi imperceptible.

Así, aprenderemos a realizar diferentes movimientos para cada prueba, en el que en el caso de pruebas más "técnicas" como el patinaje artístico sobre hielo, intentarán aprovechar la precisión adicional que ofrece el Wii Motion Plus, imprescindible para esta edición. En otras pruebas –como por ejemplo el hockey– utilizaremos los botones de manera tradicional, y en otras –como el curling, una combinación de los sensores de movimiento con los botones. ¿Y qué pasa con el GamePad? Pues, la verdad, algo muy extraño. Lo que debería haber sido el elemento diferenciador entre este episodio y el de Wii, se convierte en algo anecdótico, que muchas veces sentimos que incluso sobra.

Jugando en solitario, nos veremos alternando el Wiimote y el GamePad, sin que la lógica nos ayude a entender qué criterio se ha utilizado para recurrir al mando de Wii U en una u otra prueba. A excepción de un par de usos inteligentes –como en el bobsleigh–, sentimos que el GamePad sobra. Generalmente estaremos viendo una "retransmisión" de lo que sucede en pantalla, que intercala la acción del juego con un falso programa de televisión presentado por Toad. Sinceramente, nos parece una pena haber desperdiciado el elemento diferenciador de Wii U, y creemos que no habría costado demasiado haber hecho un esfuerzo adicional por añadir un sistema de control adicional adaptado al GamePad para cada prueba.

Listos...

En lo que respecta a modos de juego, encontramos cinco modos principales, con muy pocas sorpresas. Básicamente nos permiten organizar las pruebas con mayor o menor libertad, y una de las novedades, el de "Juega y Responde", es un tanto peculiar, y no sabemos si terminará de encajar entre sus usuarios. Organizado como un programa de preguntas y respuestas presentado por los dos robots que acompañan a Robotnik –o, venga, vale, Eggman– en Sonic Lost World, tendremos que realizar diferentes pruebas basadas en los deportes del juego con pequeñas modificaciones para darles un toque de concurso. Si bien es cierto que la propuesta no está del todo mal, y con algunas pruebas bastante conseguidas, la incesante charla de los robots acaban por desesperar, aburriendo al jugador en exceso.

Otra de las adiciones es el modo online. Si por cualquier razón no tenemos a nadie con quien jugar en un momento determinado y no se nos apetece el modo en solitario, podemos recurrir a la red para encontrar competidores. Esta adición nos ha resultado muy atractiva, y a estas alturas, también imprescindible. Podemos además competir por países para ver quién suma más medallas a nivel internacional, algo que, al menos a nosotros, nos ha incitado a luchar por la victoria. Incomprensiblemente, se limita sólo a unos pocos deportes, y nos priva de algunas pruebas con mucho potencial para el juego a través de internet, como el hockey sobre hielo.

Donde sí se aprecia la evolución de Mario & Sonic en los Juegos Olímpicos de Invierno Sochi 2014 es en lo visual. Aparte de una presentación muy, muy cuidada, con una interfaz atractiva y clara, los modelados de los personajes son bastantes sorprendentes. No es que sean algo sin precedentes, pero lo cierto es que para un juego de estas características se ven muy, muy bien, con una importante carga poligonal y con bastante detalle. Los escenarios también están bien renderizados, siendo muy vistosos, aunque sin llegar a la excelencia de los protagonistas.

En el aspecto sonoro, tenemos un juego doblado al castellano, en el que el énfasis del locutor puede llegar a ser algo tedioso, y unido a la música del menú, incluso desconcertante. Aparte de esto, las melodías de las pruebas son mucho más adecuadas, e incluso tenemos la posibilidad de desbloquear temas clásicos de diferentes juegos de Mario y de Sonic para acompañarnos de fondo en los deportes que así nos lo permitan. Un detalle a agradecer, que seguro que muchos aficionados sabrán apreciar.

¿Ya?

Mario & Sonic en los Juegos Olímpicos de Invierno Sochi 2014 es una entrega demasiado continuista, en la que se podría –y debería– haber hecho mucho más. El GamePad se convierte en un extraño que, en lugar de ilustrar las muchas bondades que tiene por ofrecer, se siente metido con calzador, aun con algunos destellos de brillantez. El modo online, una de sus principales novedades –si no la principal– queda oscurecida por lo limitado de ésta, aunque sigue siendo una adición digna de agradecimiento.

El salto visual, eso sí, es muy considerable, y gráficamente luce genial, con un gran acabado y una gran interfaz. Es innegable que con un puñado de amigos podemos pasárnoslo muy bien, pero creemos que después de cuatro años desde la anterior entrega invernal o dos desde la veraniega, y con un salto generacional de por medio, Mario & Sonic en los Juegos Olímpicos de Invierno Sochi 2014 debería haber sido más ambicioso. Si sois muy aficionados a la saga, o si se os apetece un juego de temática similar para jugar con amigos, éste puede daros lo que buscáis. Si no, quizás deberíais considerar otras opciones antes.