Análisis Shinsekai into the Depths, un sorprendente metroidvania (Switch, iPhone)
Hace ya un tiempo que Apple Arcade fue estrenado para los dispositivos compatibles, un enorme mercado online que ha acogido a un gran número de producciones, incluso algunas de ellas exclusivas. Uno de estos casos es (o era, mejor dicho) Shinsekai: Into the Depths, una producción de Capcom que, posiblemente, puede que sea la que menos repercusión ha tenido en los últimos años. De hecho, es uno de esos títulos nicho que muchos jugadores ni tan siquiera conocen… lo cual nos parece una verdadera locura porque se trata de una aventura realmente apasionante, única y muy bien concebida. Un título que, por sorpresa, acaba de ser editado también en Switch por la propia Capcom, compañía que se ha animado a comentar que su adaptación a la consola híbrida de Nintendo ha sido tremendamente sencilla. Y eso se deja notar a medida que nos adentramos en esta aventura submarina.
El argumento nos transporta a un futuro postapocalíptico… pero de corte bastante diferente al que muchos estáis pensando. Debido a una especie de nueva era de hielo, la humanidad se ha extinguido casi por completo. El único superviviente conocido viene a ser el personaje al que controlamos y protagonista de toda esta historia, quien para tratar de mantenerse con vida ha tenido que adentrarse en las profundidades marinas para tratar de huir del hielo.
Sin embargo el avance de esta amenaza es tan implacable que incluso ha comenzado a extenderse bajo el mar, por lo que a nuestro protagonista no le queda otra que tratar de escapar para salir con vida. Y eso pasa por adentrarse cada vez más en las oscuras profundidades oceánicas… Una narrativa bastante sugerente que ha sido todavía mejor interpretada gracias a su magnífica propuesta de juego.
Sobrevive bajo el mar
En esencia, estamos ante una aventura de desarrollo tradicional en 2D con claras reminiscencias del estilo metroidvania. Un tipo de aventuras que a lo largo de los últimos años se ha visto bastante bien respaldado por un amplio número de producciones pertenecientes a este mismo género. Sin embargo pocas nos han parecido tan originales y únicas (dentro de unos límites) como lo que nos propone esta obra de Capcom, que destaca en multitud de aspectos, comenzando por lo bien recreada que está la jugabilidad. Ataviados con el traje de buzo correspondiente, tenemos que ir explorando los confines del océano con la ayuda de ciertos objetos y elementos que se convierten en nuestros únicos aliados, al menos durante los primeros compases de la aventura. Unos primeros minutos que desde luego no nos ponen las cosas fáciles.
El factor supervivencia es uno de los principales componentes que conforman los cimientos sobre los que descansa esta propuesta. Y es que es necesario estar pendientes ya no sólo del hielo, capaz de acabar con la vida de nuestro protagonista si se expone a él durante un período más o menos prolongado, sino a otros muchos obstáculos e inconvenientes derivados del medio en el que tenemos que desenvolvernos. Para empezar, nuestra meta principal es escapar de la superficie del mar, es decir, tratar de avanzar hacia las profundidades del océano, algo que el traje del protagonista no es capaz de aguantar… a menos que le dotemos de las mejoras necesarias. Pero de eso hablaremos más tarde. Y junto a esto, las reservas de oxígeno también son limitadas, siendo necesario estar pendientes de sus reservas y, también, de no dañar los tanques del indispensable oxígeno.
El problema es que conseguirlo no es precisamente sencillo, dado que tenemos que tener en cuenta diversos factores. Para empezar, los mencionados tanques son bastante delicados y pueden romperse si les sometemos a un golpe demasiado severo o, simplemente, si tras efectuar un salto, caemos al suelo con demasiado ímpetu. La presión tampoco es para tomársela a la ligera y si descendemos más de lo debido (algo delimitado por una clara línea roja que se muestra en el propio escenario), el traje sufrirá las consecuencias. El implacable hielo ya citado también es otro problema, y si a esto se suma la presencia de diversos animalejos acuáticos (algunos de ellos de origen robótico) no demasiado amistosos, las cosas no pintan demasiado bien para el pobre superviviente.
Afortunadamente, es posible ir encontrando multitud de recursos como tanques de oxígeno extra así como diversos materiales que nos permiten fabricar distintos componentes. Y eso incluye desde armas a un buen número de mejoras para nuestro traje, desde mayor capacidad de almacenamiento a una superior resistencia. Este componente rolero se ve bien reforzado por otros elementos, como por ejemplo el backtrackeo, siendo posible regresar a zonas previamente visitadas con nuevas mejoras y habilidades que nos permitan avanzar y tomar rutas previamente inaccesibles. También es necesario acabar con ciertos rivales, jefes finales incluidos, si bien es cierto que dichos momentos de acción son menos frecuentes que en otros juegos similares, algo que gustará más o menos en función de los gustos de cada usuario.
El resultado de todos estos factores (supervivencia, exploración, mejora de habilidades, backtrackeo y acción) dan como resultado una aventura verdaderamente absorbente que, además, nos depara más de una sorpresa muy interesante. Un título que puede mantenernos ocupados durante unas 6 o 7 horas perfectamente y que nos deja una sensación muy gratificante. Y parte de esto último se debe también a lo llamativo que resulta su parcela gráfica. El fondo del mar ha sido interpretado de manera magnífica por parte de los desarrolladores, pudiendo disfrutar con la presencia de escenarios más variados de lo que cabría esperar por las circunstancias que rodean a esta aventura, y además el efecto de estar permanentemente bajo el agua ha sido muy bien realizado. También destaca el aspecto que posee la fauna con la que debemos convivir, así como el empleo de ciertos efectos especiales, muy vistosos. Un trabajo estético al que se une un apartado sonoro casi igual de bueno, con efectos muy buenos y una banda sonora sosegada pero que sabe cuándo "apretar" en los momentos que así lo demanda esta producción.
Infierno bajo el agua
Este nuevo representante del género metroidvania destaca por diversos aspectos, comenzando por su interesante planteamiento general en el que tenemos que tratar de mantenernos con vida bajo las profundidades de un mundo asolado por una nueva edad de hielo. La jugabilidad que propone no es especialmente novedosa en cuanto a los elementos que la componen, pero sí la forma en la que ha sido recreada en su conjunto, dando forma a una aventura de jugabilidad 2D muy atractiva y relativamente duradera. Un título que encima posee un acabado visual impecable y una vertiente sonora más que solvente.
Hemos realizado este análisis mediante un código de descarga enviado por Koch Media.