Análisis de Warriors Orochi (PSP)
Koei Entertainment, junto a sus dos series de acción más aclamadas, Dynasty Warriors y su filial, Samurai Warriors, se ha hecho un hueco por méritos propios dentro del género de la acción, con una inspiración evidente basada en la mitología oriental. La saga Dynasty Warriors cuenta con juegos en multitud de plataformas, ya desde las veteranas XBox, Game Boy Advance y Playstation 2, pasando a la actual generación de consolas en las últimas entregas de la saga para Playstation 3 y XBox 360. Junto a Samurai Warriors, saga filial de la anterior inspirada en las batallas de los afamados guerreros japoneses, ambas series han proporcionado un amplio abanico de contenidos, incluyendo un número ingente de guerreros, escenarios y batallas, que han servido, sin lugar a dudas, para la creación del título que nos ocupa.
Y es que, ciertamente, Warriors Orochi es una mezcla de ambas sagas, con un único común denominador: la aparición, de nuevo, en escena del malvado Orochi, el malvado demonio más temido de la imaginería oriental, que en esta ocasión se ha dedicado a raptar y enfrentar entre sí a los guerreros más importantes de las sagas antes mencionadas, en una lucha sin cuartel entre los guerreros más importantes de China y Japón.
Dentro del juego, podremos elegir formar parte del bando heroico, enfrentándonos a Orochi y su ejército, o, por el contrario, entrar a formar parte de las huestes del Rey Serpiente y combatir a su lado, acompañados por el enorme ejército demoníaco del mismo.
Así, nos enfrentaremos a hordas ingentes de enemigos de toda clase y condición, ejércitos enormes liderados por héroes y guerreros muy poderosos, a quienes deberemos de ir derrotando para poder realizar las diferentes misiones del juego con éxito. Nos encontraremos, esta vez, en escenarios inspirados en el Edo japonés, en entornos de grandes proporciones, en los que deberemos de movernos con rapidez y soltura para poder acometer los diferentes objetivos de cada misión. Y para ello, podremos utilizar más de setenta guerreros de todo tipo, tanto del bando benigno como del demoníaco, con héroes inspirados o extraídos de las sagas antes mencionadas.
Una adaptación muy digna.
Ya pudimos disfrutar de Warriors Orochi en su aparición para consolas domésticas en otoño del año pasado, con las correspondientes ediciones para PlayStation 2 y XBox 360. En esta ocasión, la adaptación para el formato portátil no se ha hecho esperar demasiado, y podemos disfrutar de un juego de grandes proporciones dentro de nuestra pequeña PSP. El apartado gráfico se ha desarrollado notablemente, con un motor gráfico muy similar al que ya viéramos en Dynasty Warriors 5.
Cuenta con algunos fallos- dados, sobretodo, por las limitaciones técnicas de la portátil- entre los que encontraremos una ausencia notoria de objetos en los escenarios (que se nos presentarán casi vacíos); una simplicidad evidente del diseño de los entornos, en general- incluyendo a los terrenos por los que nos moveremos y las edificaciones que encontraremos en nuestro camino-; y la aparición casi siempre repentina de nuestros adversarios en escena. Además, en algunos casos el juego sufre de ralentizaciones durante las batallas, sobretodo en los momentos en los que nos veamos literalmente rodeados por la batalla entre nuestros aliados y nuestros adversarios.
Aún así, el aspecto general del juego se ve muy mejorado por el diseño de los personajes, los cuales contarán con un modelado excelente, con todo lujo de detalles y con unas texturas de gran calidad, que podremos apreciar, sobretodo, en los planos más cercanos de la batalla, así como por las animaciones que acompañan a la narración de la historia, muchas de ellas realizadas exclusivamente para la edición para PSP del juego.
En lo que respecta a la música del mismo, nos encontramos con que la banda sonora que acompaña a la acción del título no se corresponde en absoluto con la época ni con la ambientación del juego. Esto no es, sin embargo, un punto en su contra, ya que la banda sonora en sí ha sido excelentemente realizada, con unos temas electrónicos muy pegadizos y de una calidad, contra todo pronóstico, notable. Las melodías techno y trance> que colorean nuestras incursiones en los feudos japoneses, al final, no nos resultarán tan chocantes, y resultarán un acompañamiento perfecto para la actividad frenética a la que nos someterá la acción del título, en la que no pararemos ni un solo momento de dar mandobles, golpes y mazazos a diestro y siniestro contra todo bicho viviente.
Por otra parte, el juego cuenta con unos efectos de sonido destacables, sobretodo en lo que respecta a las voces de los personajes protagonistas. Las voces que escucharemos durante el título, tanto dentro de la acción del juego como en las animaciones introductorias a la misma, han sido muy cuidadas, y cada personaje contará con su propio doblaje característico, así como diferentes expresiones y exclamaciones que podremos escuchar a lo largo de la aventura, mientras estemos enfrentándonos a las ingentes hordas del ejército enemigo.
Sistema de juego.
A pesar de que, a todas luces, Warriors Orochi es un juego de acción en toda regla, dentro de los cánones de la aventura tipo ‘yo contra el barrio’ más convencional, eso sí, en tres dimensiones y con una libertad absoluta de movimientos en escenarios de enorme tamaño, el juego en sí cuenta con algunos añadidos que podrían adscribirse más dentro del género de rol e, incluso, de la estrategia táctica, cosa que otorga al juego una variedad de opciones muy significativa.
El juego cuenta con cuatro historias diferentes, según el grupo de personajes que elijamos. Así, nos encontramos con cuatro grupos de personajes pertenecientes a las sagas de Dynasty Warriors y Samurai Warriors: Shu, Wei, Wu y Samurai, los cuales vienen representados por un animal simbólico característico de la mitología oriental. Cada uno de ellos cuenta con un hilo argumental diferente, aunque todos ellos cuentan con el nexo común que ofrece la gran guerra contra el malvado Orochi.
Una vez dentro de la acción del juego, manejaremos a un grupo de tres personajes, que podremos ir intercambiando según la situación en la que nos encontremos, ya que cada uno de ellos contará con habilidades específicas en diferentes categorías de fuerza, velocidad, defensa o tecnología. Además, cada guerrero tendrá una serie de ataques especiales de mayor poder, que podrá utilizar cuando su medidor de Musou (energía de ataque o poder mágico, según el caso) alcance su punto álgido. Así, cuando uno de nuestros personajes tenga bajo mínimos su medidor de salud o de energía, podemos intercambiarlo por alguno de nuestros otros personajes para dejar que se recupere totalmente, y poder, así, volver a utilizarlo más tarde.
Durante las diferentes misiones, se nos propondrán retos y misiones secundarias, muchas veces a través de textos insertos en la acción del juego. Esto, que por un lado es un incentivo dentro del título, puede resultar, francamente, engorroso en los momentos en los que el fragor de la batalla nos envuelva, ya que los textos y diálogos entre personajes en pantalla pueden llegar a distraernos y hacernos sucumbir ante algún enemigo especialmente hábil o poderoso. Las misiones tendrán una serie de requisitos para su cumplimiento, como vencer a tal enemigo o rescatar a algún aliado para incorporarlo a nuestras tropas. Por otro lado, en ocasiones deberemos de huir de nuestros adversarios hasta llegar a algún punto concreto del mapa, evitando a toda costa que alguno de los personajes del juego sea capturado o muera, cosa que daría por fallida la misión.
Por otra parte, podremos utilizar diversas armas, así como modificarlas mejorándolas en el menú de inicio de cada misión, e incluso combinarlas con otras, adquiriendo así las habilidades características o los poderes mágicos de aquéllas, en caso de que los tuvieran. También podremos cambiar los personajes que controlemos, ya que, a medida que vayamos superando las diferentes misiones del juego, la plantilla de personajes disponibles irá, a su vez, aumentando. Aún así, es recomendable mantener siempre el mismo grupo de personajes, ya que podremos mejorar sus habilidades en combate, así como añadir nuevas habilidades a cada personaje, y subir su nivel a medida que avancemos en la aventura, como si de un juego de rol se tratase.
Todo ello aderezado con un control bastante táctico de los mapas de los diferentes escenarios a los que nos enfrentemos, sea en una vista previa antes de la acción del juego, sea durante la aventura en sí. Estos mapas nos situarán tanto los objetivos de la misión como los personajes aliados o enemigos, con lo que nos serán especialmente útiles en las misiones en las que debamos de derrotar a algún adversario en concreto o aliarnos con algún otro guerrero.
Lástima que, en definitiva, el juego no pase de ser un título de acción de los de toda la vida, en los que machacar botones a toda velocidad es garantía segura de éxito. Las batallas, por su parte, pueden resultar bastante caóticas, dado el alto número de guerreros que se enfrentarán durante las mismas, y muchas veces en pleno fragor de la batalla no tendremos demasiado claro quiénes están de nuestra parte y quienes no, cosa que restará bastante dinamismo a las contiendas. Por otro lado, el control del personaje es bueno, aunque en ocasiones la inercia de los ataques y de las combinaciones de golpes nos juegue malas pasadas, y acabemos viendo como nuestros mandobles siegan el aire a nuestro alrededor, mientras un sinfín de enemigos nos ataca por la espalda.
El juego cuenta con el clásico modo historia, del que ya hemos hablado, y de una modalidad libre de juego, en la que elegiremos los personajes que controlaremos de entre toda la plantilla del juego y el escenario en el que deberemos de luchar. Por último, cuenta con un modo multijugador cooperativo nada despreciable. Si bien no deja de ser más de lo mismo, compartir con algún amigo la acción sin tregua de una aventura como la que nos ofrece Warriors Orochi siempre es un detalle de agradecer.
Conclusiones.
Warriors Orochi es una notable adaptación del juego homónimo que saliera para PlayStation 2 durante el otoño del año pasado. Si bien cuenta con algunas limitaciones técnicas, propias del sistema para el que ha sido desarrollado, la acción trepidante y desenfrenada de las innumerables batallas que nos ofrece el título, en cuatro historias paralelas con más de setenta personajes a nuestra disposición, sin duda, son suficientes para hacer de él un juego a tener en cuenta dentro del catálogo de la portátil.