Análisis de Monster Hunter Freedom 2 (PSP)
Tras un impresionante lanzamiento en territorio japonés cosechando unas ventas excelentes y enamorando a miles de jugadores, llega finalmente a España un título que pretende sin más desgarrar las listas de ventas.
Monster Hunter Freedom 2 es el juego de PSP de más éxito en Japón hasta la fecha, con cerca de 1,6 millones de unidades vendidas en total, de las cuales 700.000 se vendieron solo en la primera semana.
Sólo una semana después del lanzamiento norteamericano tenemos el juego en tierras españolas, para por fin poder degustar el nuevo arte que Capcom ha introducido en los videojuegos: el arte de la caza.
El juego, como ya pasó en su primera entrega, bebe de las versiones de Playstation 2 para ofrecer un juego adaptado a la portátil de Sony cumpliendo con creces con lo esperado. Mezcla de RPG de acción y hack´n´slash sin tapujo alguno.
Respecto a la primera entrega aparecida en PSP mejora todo lo mejorable y potencia cada punto que dio éxito al primer título. No solo el aspecto gráfico está mucho más conseguido (aunque se mantiene a una altura similar), sino que el concepto de juego en sí contiene mucha mayor profundidad y madurez que su antecesor.
Monster Hunter Freedom 2 no es un juego apto para públicos que busquen sencillez y diversión sin esfuerzos, sino que es un juego maduro, creado para todos aquellos jugadores consagrados con suficiente experiencia en los campos de RPG o aventura y sobre todo con gran paciencia para ir avanzando en los juegos. Y es que no estamos ante un título donde la curva de aprendizaje se nos vaya dictando a nuestro paso, sino que somos nosotros mismos quienes a la par de las experiencias acaecidas en el mismo juego y al número de horas dedicadas, vayamos creciendo como jugadores de Monster Hunter y así ir conociendo poco a poco todo el arte de la caza presente en el titulo.
Por lo demás, hablando de la propia dificultad de juego, no estamos ante un titulo sencillo, y más bien su dificultad es incluso mayor al del primer titulo, lo que hace que en varias misiones necesitemos casi forzadamente la ayuda de un amigo para superarlas. Esto puede llevar a la desesperación, e incluso a la frustración de un titulo que necesita ser comprendido, mimado y ante todo que nos dejemos llevar por su aura la cual esconde mucha más profundidad e inteligencia en su desarrollo del inicialmente sentido.
No, no tiene un argumento profundo como muchos juegos nos tienen acostumbrados, sino que el propio hilo argumental lo crearemos nosotros con historias propias que vayamos experimentando en las misiones. La linealidad apenas está presente, pudiendo cada jugador tomar un camino diferente a la hora de pasarse el juego, bien eligiendo unas misiones antes que otras o realizando unas acciones más enfocadas a la mejora del equipamiento que a la destreza y a la habilidad. Así el juego no tiene un objetivo dado, pero podría definirse como el hecho de capturar a todos los monstruos del juego a la par que mejoramos nuestras habilidades y maduramos nuestras técnicas de caza y combate.
El número total de misiones supera las 270, incrementándose éste número si incluimos las misiones secundarias. Así el juego se compone de varios tipos de misiones, desde las típicas de cazar y matar, hasta otras donde debemos vigilar a una serie de monstruos, recolectar objetos, matar a un numero determinado de enemigos en un tiempo dado, encontrar a una serie de personajes, e incluso pescar. Las misiones se dividen por rangos, no siendo accesibles todas desde un principio, y solo cuando el jugador haya reunido la destreza suficiente podrá afrontar las de mayor dificultad. La duración de las mismas pueden ser desde unos pocos minutos hasta más de una hora.
Igualmente existen varias opciones de modificación del personaje, como el estilo de pelo, su clase, el atuendo, las diferentes armaduras, armas, e incluso su tipo de cara y voz. También el número total de armas son de 700 (11 tipos), incluyendo en las mismas sus diversas variantes con sus respectivas habilidades. Algunas serán nuevas como la Lanza de fuego, el arco, la Gran Espada y demás. Y sin olvidar las 1400 partes de armaduras disponibles para la personalización del personaje.
Y a todo esto hay que unir un mapeado el doble de extenso que su antecesor, con 8 áreas tan dispares como terrenos desérticos o helados, llanuras, montañas, pantanos… ¿Y qué decir de los monstruos? Pues nos enfrentaremos a unos 70 monstruos diferentes dispersos por todo el mundo, siendo unos más difíciles de encontrar que otros, y algunos casi imposibles de derrotar si no tienes la habilidad, arma y objeto adecuado para afrontarlo. Muchos de los cuales serán totalmente nuevos. El juego con todo esto y mucho más, se hace casi ilimitado, donde el aburrimiento no tiene cabida y solo aquellos que o bien no estén a gusto ante su estilo de juego o bien busquen otros caminos en su concepto puedan dejarlo de lado.
Nuestro punto de referencia en el juego será la Villa Pokke, totalmente nueva, con decenas de personas con quienes interactuar, y con nuestra propia casa que la podremos ir personalizando a nuestro gusto a la par que nuestro personaje. Pero no solo hablando, y luchando conseguiremos ser grandes cazadores. Y es que para llegar a lo más alto debemos afrontar el arte de la pesca y del cultivo, para lo que contaremos con una granja donde poder conseguir materiales y minerales para la consecución de nuevas armas y objetos.
También otras novedades respecto al primer Monster Hunter radican en nuevos niveles de carga en las armas, nuevos ataques de lanza, ayudas en pantalla antes no aparecidas, e iconos más intuitivos para objetos y armas.
Otro de los aspectos a destacar será la climatología, que afectará a la salud del personaje, teniendo que salir con ropaje adecuado para cada una de las misiones. Deberemos hacer uso de comidas y bebidas para entrar en calor o para refrescarnos, y así no ver mermada nuestra salud. La barra de resistencia nos permitirá correr más rápido, agilizar nuestros movimientos e incluso escalar a mayor ritmo las colinas. Y es que el medioambiente jugará un papel preeminente en la aventura.
Los objetos podremos conseguirlos de varios métodos, o bien de la fauna y flora, reuniendo minerales o bien de distintos elementos orgánicos de los monstruos para usarlos como armas o como partes defensivas. Su combinación y uso inteligente será primordial para nuestro éxito.
Cada arma tendrá un comportamiento diferente en batalla, y como es lógico su manejo será diferente a otras. Básicamente cada arma contará con varios ataques, unos primarios, otros secundarios y otros especiales. Pulsando varios botones a la vez podremos realizar una serie de combos, sin obviar que no todo será ataque, sino que la defensa será un punto a dominar si no quieres ser un cazador cazado.
A pesar que esperábamos con ansias la inclusión de un modo online en el multijugador del juego, finalmente Capcom no lo ha incluido. En su lugar debemos conformarnos con un más que logrado, enganchante y divertido modo para cuatro jugadores por ad-hoc, que aunque no tiene una profundidad tan grande como una hipotética inclusión de modo online, sí que eleva la diversión a unos caudales desbordantes, donde la alianza entre cazadores será fundamental para derrotar a ciertos enemigos casi imposibles para jugadores solitarios. Eso sí, fundamental tener a tus amigos cerca. También, aunque todavía no está disponible en las versiones europeas, podremos descargar nuevas misiones y mapas de la página web oficial del juego.
El apartado técnico de Monster Hunter Freedom 2 es uno de los más punteros aparecidos para PSP, pero peca de ciertos errores que le hacen resentirse a la hora de ofrecer un juego compacto y con equilibrio entre sus variables.
Gráficamente estamos ante uno de los puntos mejor conseguidos del juego, y está entre los primeros en este apartado para la portátil de Sony. Cierto que utiliza el mismo motor que su precuela, pero las mejoras son más que evidentes. Un mapeado enorme, compuesto por grandes y bellos escenarios donde la fauna y flora permanece viva a nuestro paso, a veces hasta a su libre albedrío mezclándose con el medio, lo que dota de cierta creatividad de comportamiento dentro del mundo fantástico que le ha tocado vivir. El detalle de la climatología y el cambio entre día y noche son mención destacable también. El diseño de los monstruos es sublime, con multitud de variedad de enemigos, donde la imaginación de los programadores ha sido exprimida a límites insospechados, que a su vez acompañan a unas animaciones suaves y fluidas.
Los personajes aunque no tienen un diseño tan llamativo como el de los enemigos, están igualmente a un buen nivel. Por lo demás hay ciertos puntos que hacen que este apartado ande cojo, y es en ciertos aspectos que pasamos a describir. Tenemos unos escenarios excesivamente vacíos para lo grandes que son, con aparición de niebla en grandes espacios para esconder la aparición repentina del paisaje, y un molesto clipping al atravesar nuestro personaje los cuerpos de los monstruos el yacer en el suelo, sobre todo al despedazarles para sacar ciertos materiales. Por lo demás ciertas partes de los escenarios contienen bordes dentados, donde falta pulirse un poco más. En general un gran apartado, pero que podría haberse mejorado.
El tema del apartado sonoro y musical raya a buena altura. La banda sonora es épica, con temas exquisitos y que te ayudan a entrar en la piel del personaje y de las situaciones. Muy bien hilvanadas con el momento que nos precisa vivir en la aventura, cambiando de tema en cada uno de los momentos. El sonido cumple con su propósito, con multitud de sonidos para cada enemigo y personajes.
La jugabilidad, bendito apartado que está por encima de cualquier otro. En Monster Hunter Freedom 2 nos encontramos con una irregular curva de aprendizaje, lo que puede provocar frustración en muchos jugadores y que solo la dedicación de muchas horas pueda salvarlo. No es un juego fácil, y por ello no es apto para cualquier jugador que desee jugarlo. Igualmente en ciertas misiones requiere la colaboración de otros compañeros, que no siempre es posible, lo que limita mucho el tipo de público al que va dirigido. El manejo del personaje es sencillo, con multitud de funciones a realizar y que exige un buen dominio de cada arma y del conocimiento de cada uno de los cientos de objetos presentes. Pero el sistema de cámara se nos antoja excesivamente tosco para el enfrentamiento con los enemigos. Es cierto que podemos centrarla con el botón L y que incluso con el pad direccional podemos moverla a nuestro gusto, pero se podría haber optado por aportar un cambio automático o un comportamiento diferente ante los enfrentamientos, para así hacer este punto mucho más hilvanado y que favorezca la jugabilidad. Los tiempos de carga son menores que su predecesor, aunque siguen estando demasiado presentes.
La traducción del juego está en un perfecto español, donde el sentido de las palabras se mezcla a la perfección con el tono que se le desea dar a cada una de las conversaciones.
Sobre el tema de la durabilidad, y por consiguiente la diversión del juego, en esto no hay duda alguna. Estamos ante un juego casi ilimitado (quizás algo repetitivo), con cerca de 100 horas de juego real pudiéndose incrementar la duración si se desean realizar todas las misiones secundarias. Con multitud de objetos que encontrar, monstruos que vencer, armaduras que completar y armas que reunir, y si a esto le sumamos la posibilidad de jugar con 4 amigos por conexión ad-hoc, la diversión parece casi inacabable.
Conclusión
Monster Hunter Freedom 2 para PSP es un juego de éxito, creado a imagen y semejanza del mercado japonés, y que ha cautivado también en el resto del mundo. No es un juego apto para cualquier tipo de jugador, pero ideal para aquellos que adoren su concepto de juego. Mejora sustancialmente a su predecesor, aportando elementos novedosos que lo hacen mucho más profundo y compacto. Estamos ante un juego difícil de dominar, pero eso es gracias a sus impresionantes posibilidades de juego. Como apuntábamos, el juego puede hacerse frustrante por su dificultad y por el tiempo necesario para alcanzar nuevas habilidades y mejoras, pero es prácticamente la esencia inherente que conlleva. El modo multijugador por conexión ad-hoc es la llave para la diversión, pero no todo el mundo posee dicha llave y esperábamos un modo online.
En definitiva, Monster Hunter Freedom 2 toma todo lo bueno del original, y lo potencia, mejora, modifica a su antojo para conseguir un título adulto, serio, donde la diversión alcanza límites que solo los grandes jugadores podrán soportar. Un grandísimo juego que todavía pudo alcanzar cotas de calidad mayores sí hubiera mejorado ciertos aspectos. Lo adorarán muchos y odiarán otros, pero que el término medio no existe en su concepción.