Análisis de Ultra Street Fighter IV (PS4)
Ultra Street Fighter IV no necesita presentación. ¿Qué más podemos decir de uno de los grandes éxitos de Capcom en la pasada generación? Los juegos cooperativos y competitivos van y vienen todos los años, pero sólo los auténticamente buenos resisten el paso del tiempo. No importa la potencia gráfica, campaña de marketing u ornamento lo suficiente potente para que un juego siga incombustible después de siete años, algo tiene detrás seguro. Y eso lo decimos a sabiendas de que Street Fighter IV no es perfecto, y tampoco es el mejor capítulo de la serie.
Como paso previo a Street Fighter V, que se lanzará el próximo año, Sony ha colaborado con Capcom para llevar la última edición a PlayStation 4. Bien por el contenido, que incluye todo el disponible hasta la fecha, y regular por la adaptación que en su salida ofrece luces y sombras, una conversión inexplicablemente menos brillante de lo que merece.
Street Fighter IV y sus versiones
Street Fighter IV debutó con una plantilla compuesta por bastantes caras conocidas -los doce del Street Fighter II-, cuatro personajes completamente nuevos -Rufus, Abel, C. Viper y el Fuerte-, y otros ocho que desbloquear: Gen, Akuma, Gouken, Sakura, Dan, Feilong, Rose, Cammy y Seth, el jefe final del juego. Fue extraño sin embargo que en plena generación de consolas totalmente preparadas para la conexión este disco no se pudiese ampliar por las sucesivas revisiones, un fallo por parte de Capcom que se repetiría con Marvel vs. Capcom 3 y su Ultimate.
El éxito de SF IV fue rotundo y apenas un año después se estrenó Super Street Fighter IV, la ampliación de la plantilla más grande del juego, subiendo el número de caras a elegir hasta los 35. Se recuperó a Dee Jay y T-Hawk; los veteranísimos Guy y Cody de Street Fighter Alpha -y Final Fight-, Adon de Street Fighter -y Alpha-, y Makoto, Ibuki y Dudley de Street Fighter III más dos nuevos personajes: Juri y Hakan. En otro orden de cambios menos relevantes, se equilibró a los luchadores y se añadieron dos ataques ultra para cada uno, seleccionables antes del combate.
La popularidad del juego de lucha no dejó de crecer. Mientras otros títulos de lucha se mostraban mucho más fugaces, el incombustible de Capcom se renovaba a ritmo anual y no sólo con los pertinentes ajustes de fuerzas. En 2011 se lanzó Super Street Fighter IV: Arcade Edition, una actualización que se podría definir como pequeña en comparación con la edición Super respecto a Street Fighter IV. Sumó cuatro luchadores no demasiado impactantes –al menos en personalidad-: Oni y Evil Ryu, versiones malignas de Akuma y Ryu, más Yun y Yang, rescatados de Street Fighter III. La plantilla asciende entonces ahora a un total de 39 luchadores, una cantidad más que respetable en la que se hace no encontrar un personaje que se adapte a tus gustos, combos o velocidad.
En 2014 llega otra actualización de peso: Ultra Street Fighter IV, con selección de cinco luchadores extra que vienen a redondear un catálogo de caras muy variado. Así como a la versión original se le podía achacar que 25 luchadores era un número algo escaso -teniendo en cuenta las cifras que manejan otros títulos-, ahora disponemos casi del doble, 44, con más retornos clásicos y otros completamente nuevos.
Cuatro de los Ultra son invitados de Street Fighter x Tekken: la accesible Poison, el lento y poco dado a combos Hugo, el retorno de Elena de Street Fighter III y Rolento, con muchos recursos para desconcertar al oponente. La quinta integrante, guardada en secreto durante mucho tiempo, es Decapre, una doll de aspecto similar a Cammy que sin embargo en jugabilidad ofrece otro tipo de movimientos más ágiles y rápidos.
Recientemente el juego se actualizó –gratuitamente- con el modo Omega -1.04-, que introducía nuevos movimientos a la plantilla, aunque éstos no estuviesen equilibrados al milímetro –razón por la cual, no se utiliza en torneos ni partidas de clasificación-. Tras el anuncio de Street Fighter V se sospecha que Omega es un campo de pruebas para posibles técnicas que Capcom esté estudiando implementar en la plantilla.
Una conversión que no alcanza el "Perfect"
La calidad de las conversiones depende más del equipo encargado del trabajo que de la potencia de la plataforma. Ultra Street Fighter IV en PlayStation 4 es un encargo de Sony a Other Ocean, autores de #IDARB y del port Mortal Kombat Arcade Kollection. Su historial no es demasiado amplio, si bien tampoco cuenta con sonadas meteduras de pata –algo que no puede decir High Voltage Software-.
Por una parte, en cuanto al contenido trae todas las expansiones –personajes, escenarios- y las descargas de apariencias con un precio de 24,99 euros. Sólo existe versión digital, pero el precio está muy ajustado y huelga decir que es una compra más que obligada para cualquier aficionado al género que no disponga del juego o que le falte alguna de las expansiones, caso de aquellos usuarios con Street Fighter IV que rechazaron pasar por caja con la edición Super y siguientes.
¿Y si ya tienes Ultra Street Fighter IV en otro formato? Aquí entra más la cuestión de la fortaleza de las comunidades, que es la que define la longevidad a medio y largo plazo. Probablemente la llegada de PlayStation 4 no borre de un plumazo el éxito online en otros sistemas, pero se puede pensar que parte de los jugadores sí darán el salto tarde o temprano –sobre todo de cara a SFV-.
Lamentablemente, carece de juego cruzado con PS3 o PC, y los datos del perfil se resetean de nuevo aquí, lo que significa que los títulos e iconos desbloqueados, así como la cantidad de puntos obtenidos por victorias/derrotas comienza de cero. Ojo a los novatos: durante las primeras semanas muchos de esos jugadores con nivel bajo son jugones con gran experiencia. Sí es compatible con los sticks de recreativa de PS3.
Street Fighter IV es un juego que en consolas de la pasada generación lucía estupendamente. El trabajo de Other Ocean adapta los gráficos a 1080p de resolución y aparentemente las partidas van fluidas, sin caídas en las 60 imágenes por segundo. Gráficamente no hay demasiadas diferencias y por supuesto, esto no justificaría su compra.
Ahora llegan las malas noticias, todas con solución mediante parches. Other Ocean ha dejado pasar ciertos bugs que son fácilmente detectables por los jugadores que conocen de memoria y al tacto los tiempos de reacción de los personajes. Ya de entrada encontramos que la conversión se ha hecho con prisas. Pantalla de inicio: pulsa Start. ¿Start? El DualShock 4 no tiene dicho botón. Pantalla arcade que informa de la recepción de invitaciones para el multijugador en Super Street Fighter IV. ¿Super? Alguien no ha editado el texto que debería referirse a Ultra.
Estos defectos nimios delatan que está poco pulido en otras cuestiones más notables. La interfaz es más lenta que antes, y no hace falta una comparación directa para saberlo, la selección de opciones o luchador está, sin ningún tipo de explicación lógica, ralentizada. Muchas otras de las diferencias jugables de esta versión se detectan probando personajes que conoces como anillo al dedo: una respuesta tardía –cosa de frames, pero importante para los jugones-, errores en el sonido –desequilibrio del volumen- y gráficos al activar ciertos ataques.
El grado de importancia de estos fallos depende principalmente del conocimiento de los usuarios, la memoria en el imput lag. Un novato se adaptará al tacto de esta versión y no tendrá queja, pero esa no es la cuestión. ¿Qué quiere decir eso? Que los problemas están ahí y el experto de SF IV será el primero en notarlo. Justo el usuario al que mayoritariamente va dirigida esta conversión.
Definitivamente la conversión es mejorable y pide parches. Quizás en un par de semanas la mayor parte de estas críticas estén subsanadas, al fin y al cabo, el resto de versiones también han pasado por una retahíla de actualizaciones. Pero es justo decir que tratándose de un lanzamiento tan exprimido, que además cuenta con versión PC –teóricamente fácil de adaptar a PS4-, esperábamos un debut más pulido.
Conclusiones
Disfrutar de Ultra Street Fighter IV en PlayStation 4 como aperitivo a Street Fighter V a un precio muy competitivo, con todo el contenido descargable o la seguridad de una comunidad que seguirá al pie del cañón durante meses –muy importante- son motivos más que de sobra para adquirir el juego con los ojos cerrados si eres aficionado a la lucha virtual.
La alegría sería completa de disponer de la prometida versión definitiva. Ahora mismo, con la versión del lanzamiento, el resultado no es redondo. Si es la primera vez que tocas Street Fighter IV probablemente no encontrarás fallos porque tampoco abundan los bugs críticos ni aparecerán cabezas flotando. Es más la sensación que sólo tiene el dueño de un vehículo para detectar un error en el motor.
Lástima que un lanzamiento que sería de sobresaliente quede un poco empañado por las prisas. Pocos juegos están exentos de errores y no hay nada irreparable, así que si tienes dudas, recomendamos que esperes a una actualización que devuelva al Rey a su trono.