Análisis Petoons Party, color y diversión para toda la familia (PS4, Switch, Xbox One, PC)
El catálogo de una plataforma no es nada si no se nutre de títulos para toda la familia y los más variados públicos. Un sistema debe afianzarse en una gran variedad de títulos, de distinta naturaleza y planteamiento, intentando abarcar el máximo número de videojuegos posibles. Petoons Party es el resultado de uno de los programas de Sony España, PlayStation Talents, una de las iniciativas más asentadas en nuestros país y que nos permite disfrutar de una buena base y lanzadera para infinidad de estudios independientes que buscan hacerse un hueco en la atiborrada y competitiva industria del ocio digital. Considerado el mejor juego infantil de 2018 y obra de Petoons Studio, se trata de un título para los más pequeños de la casa que ahora llega en formato físico a PlayStation 4.
Diversión y color
Petoons Party nace de una filosofía muy clara: la familia que juega unida, se divierte unida. Afincados en Barcelona, la obra de Sergio García y Daniel del Amor quiere unir a los jugadores de todas las edades a través de una propuesta muy accesible, divertida y sencilla. No obstante, su estudio va más allá de ser una simple desarrolladora de videojuegos, ya que intenta congregar diferentes propuestas transmedia en forma de dibujos y otros productos interactivos que fomenten la relación y la comunicación de padres e hijos, sin que las consolas, los televisores inteligentes o incluso los tablets y smartphones se conviertan en barreras que aumenten el aislamiento generacional. Así nació Petoons World, su anterior obra, y así ha evolucionado en el presente juego, que puede comprarse por 19,99 euros y que supone el primer paso hacia los títulos party al estilo de Nintendo.
En el presente juego, los Petoons deberán unirse en una arriesgada aventura que los llevará a luchar contra la malvada Kitra y los Muhls, los enemigos de la saga, en una misión que los invitará a salvar la frágil y paradisiaca isla de Kimera, defendiendo su hogar y su magia de la amenaza malgina. Con este pretexto, el equipo barcelonés diseña un título de tableros y party, con tres modos de juego diferentes, cuatro tableros, cuatro copas de dificultad variada y hasta 28 minijuegos distintos. Con la posibilidad de jugar hasta cuatro jugadores en una misma consola, tendremos a nuestro mando siete héroes, los llamados Petoons, que estarán representados en el videojuego por Yun, Lia, Momo, Deli, Fibo, Laka y Oklo. Cada uno tiene su propio diseño, que representa fielmente su personalidad y rol en el equipo, con colores, actitudes y formas radicalmente opuestas las unas a las otras, un aspecto muy destacable, sobre todo cuando estamos jugando en el modo multijugador y tenemos que reconocer rápidamente a nuestro alocado avatar virtual.
Abordándolo todo desde una perspectiva sencilla, Petoons Party es un título que entrará por los ojos, sobre todo a los más pequeños. Todo es llamativo, grande y fácil de entender, y aunque no llega al nivel de excelencia de los Mario Party -la referencia en el género-, sí es cierto que está lo suficientemente bien pensado como para no aburrir ni confundir a los jugadores más pequeños. Se nota, y mucho, que el equipo de desarrollo ha trabajado con pedagogos y educadores, un aspecto destacable y que demuestra el mimo puesto por Petoons Studio en el videojuego.
Todo en el juego es francamente fácil, con casillas y un tablero gigante, por el que iremos corriendo de un lado a otro mientras sorteamos las más diferentes pruebas. En este punto hay que destacar que el modo historia, que debería tener un pequeño plus de atractivo y dificultad, nos ha parecido un poco soso y simple. Eso sí, hay que tener que pasar casi de forma obligatoria por él, ya que los minijuegos de otra de las modalidades se irán desbloqueando de forma paulatina a través de esta modalidad con el acumulado de puntos.
Un título completo, variado aunque lento
Los videojuegos party suelen tener una duración determinada, con partidas y tableros más o menos largos, que pueden llegar a extenderse hasta una hora y media en títulos determinados. Es normal, deben ser largos para entretener a todos los participantes, y a mayor extensión y número de jugadores, más duración. A eso hay que sumarle dados, tiradas y estrategias, lo que añade más minutaje al contador. Petoons Party sigue esta estructura de forma casi religiosa, aunque con un problema que nos ha llegado a desesperar algo y que creemos que puede llegar a aburrir a los más pequeños: es extremadamente lento. Cada tirada, cada desplazamiento, cada animación y cada interludio entre tablero y minijuego, se nos puede hacer muy pesado, carente de toda velocidad, y que es algo tedioso sobre todo en los infantes de la casa.
A esto hay que sumarle otro aspecto muy deficiente, que es la reiterativa repetición de los minijuegos y pruebas, que aunque son distintas a nivel visual y pueden ser atractivos a los ojos críos, escondes mecánicas y jugabilidad excesivamente similares. Aunque encontraremos minijuegos que buscan ser plataformas a variantes jugables del célebre Bomberman, algunos rítmicos y varios de habilidad y reflejos, el conjunto es excesivamente homogéneo y poco desafiante para los más adultos. Sí, Petoons Party añade algunos combates contra jefes finales -incorporando una mecánica de cooperación muy interesante- y las Islas disponibles son distintas entre sí en temática, pero no consigue aportar ritmo o celeridad que consideramos ideal en un videojuego de esta índole, en el que es importante mantener la atención sobre lo que está ocurriendo en la pantalla.
Visualmente muy llamativo
Por otra parte, y aunque consideramos que puede llegar a hacerse algo pesado en su modo historia, Petoons Party es un título visualmente colorido, atractivo, original y muy llamativo. Sus creadores han conseguido crear un universo propio, con personajes estrafalarios, frenéticos y carismáticos, que interactúan de una manera muy convincente con los escenarios y los diferentes minijuegos. Cada fase es una algarabía cromática, con bichos y monstruos de grandes ojos, que se mueven, corretean y hacen ruidos cada vez que pulsamos un botón. Todo es nítido, claro y espectacular, y aunque no hablamos de un videojuego que destaque por sus gráficos -no lo pretende- sí consigue resultar agradable a los ojos de todo tipo de público, y sobre todo, claro está, de cara a los más pequeños, con islas, zonas nevadas y regiones volcánicas. El videojuego, que está traducido al castellano, cuenta también con un resultón acompañamiento musical lleno de melodías que amenizarán las partidas.
Conclusiones finales
Petoons Party es un título divertido y entretenido, que ofrece una propuesta jugable sólida y bien diseñada de cara a toda la familia y que puede resultar como una gran alternativa a videojuegos más consolidados y famosos en el mismo género, como el intocable Mario Party, un juego al que no le sale competencia. Pese a que se esfuerza por ser variado, y de hecho creemos que lo es, a veces le sobrevuela un cierto halo de repetición y lentitud, que llegan a atorar un poco las partidas. En cualquier caso, es un pequeño problema que puede obviarse si se busca un juego para todos en casa con el que disfrutar todos juntos alrededor de la consola.
Hemos realizado este análisis en su versión de PS4 con un código proporcionado por Meridiem Games.