Análisis de Monster Energy Supercross - The Official Videogame (PS4, PC, Xbox One, Switch)
La velocidad vive un momento muy dulce, suponemos que debido (aunque sólo sea en parte) al auge de los eSports, segmento en el que este tipo de producciones gozan de bastante protagonismo. Milestone es uno de los estudios más comprometidos con este tipo de títulos, equipo que nos presenta el nuevo Monster Energy Supercross - The Official Videogame.
Con ese nombre ya sabéis lo que vais a encontraros: velocidad sobre el barro a lomos de motos oficiales y una carga de espectacularidad bastante notable… aunque no todo lo destacada que nos hubiera gustado desde el punto de vista técnico.
Eso sí, se trata de un título relativamente completo y que presenta una gama de modalidades más que digna, incluyendo modo online para una docena de jugadores simultáneos así como un editor de circuitos que da mucho juego… opción que no está disponible en la edición para Switch, tened esto presente.
Velocidad y muchos saltos
Una de las principales cualidades que acapara esta nueva saga de Milestone es su carácter oficial. Debido a esto es posible participar en los torneos oficiales de la FIM (World Championship) así como de la AMA (Monster Energy Supercross, el campeonato americano), pudiendo competir con todos los pilotos reales y sus correspondientes motos… y pisar a fondo en todos los trazados oficiales, existiendo una amplia cantidad de todos ellos.
También podemos participar en competiciones distintas, como son las pruebas "menores" 250 East y 250 West así como la categoría reina: la 450 SX. La sensación de velocidad en ambos casos está muy conseguida, así como los derrapes en las curvas cerradas que presentan los recorridos y, por supuesto, los saltos. Precisamente si por algo destaca este deporte en concreto es por ofrecer a los espectadores constantes saltos de varios metros de altura, siendo quizá el ingrediente o el gancho más llamativo.
Precisamente dichos saltos requieren de bastante concentración por nuestra parte, siendo necesario calcular bien tanto el impulso inicial como, por supuesto, dominar el body control de nuestro piloto. Para esta última tarea debemos emplear el stick derecho, un aspecto fundamental que diferencia a los jugadores novatos de los expertos. Y ya que nos hemos metido en el tema del control, la verdad es que estamos ante el típico juego que se mueve entre la simulación y el arcade como pez en el agua, siendo un título apto para un amplio segmento de usuarios.
En cuanto a los modos de juego, Milestone nos ofrece una cuantía destacada, si bien ninguna de sus ofertas resulta especialmente original, más bien lo opuesto. De todas las modalidades disponibles (online, Campeonato, Partida Rápida…) destaca el modo Trayectoria. En este modo debemos crear a un piloto desde cero y comenzar a ganar torneos en la cilindrada de 250 para, posteriormente, dar el salto a la 450 SX. Mientras competimos es posible ir ganando tanto puntos de prestigio que nos permiten ir subiendo de nivel a nuestro piloto como, también, obtener dinero que nos posibilita acceder a nuevas motos y complementos. Un modo de juego que, sin ser nada del otro mundo, entretiene bastante.
Algo similar se puede comentar acerca de otra de las grandes características que han sido incluidas en este juego: el editor de pistas. Gracias a una herramienta bastante simple es posible recrear en cuestión de minutos los trazados que más nos apetezca, pudiendo elegir entre un número relativamente elevado de "piezas", desde curvas a rampas, rectas, etc. Dichas creaciones pueden ser compartidas online y, también, disfrutar de las realizadas por la comunidad, si bien es cierto que a la hora de elaborar este análisis no existía una gran cuantía de ellas. Y, recordad, esta opción no está habilitada en la versión para Switch, al menos de momento.
Todo esto que os acabamos de comentar forma, a grandes rasgos, la jugabilidad que alberga esta nueva licencia de Milestone. Un título bastante entretenido que, sin despuntar ni ofrecer nada particularmente llamativo ni original, cumple con su cometido.
Precisamente podríamos decir prácticamente lo mismo en lo relacionado con el aspecto técnico que ostenta el juego. El Unreal Engine 4 ha vuelto a ser la herramienta empleada por los desarrolladores para recrear el título, obteniendo unos resultados satisfactorios pero no deslumbrantes bajo ninguna circunstancia. La física de los pilotos y las motos, salvo alguna que otra excepción (a veces hemos contemplado reacciones algo extrañas), se comporta de manera muy realista en general. Y en cuanto al aspecto que muestran los trazados, dejando de lado la presencia de algunas texturas un tanto borrosas y de baja calidad en los mismos, el resto cumple con creces.
¿Y qué pasa con la tasa de frames? Pues que, al menos en PS4 Pro que es la versión que hemos probado, todo fluye de manera muy estable, incluso cuando aparecen todos los pilotos a la vez en pantalla. Un apartado sólido que sólo flojea en varios aspectos, como por ejemplo lo que tiene que ver con la indecente representación facial de los pilotos que es posible advertir en el editor y en la entrega de premios. Y en cuanto al sonido, melodías rockeras acompañan los menús de forma acertada, mientras que los sonidos de los motores acaparan todo el protagonismo durante las carreras.
Motocross divertido y solvente
Milestone vuelve a crear otra obra notable vinculada al mundo del motor, en este caso a la especialidad de motocross. Un título bastante completo y que seguramente satisfará plenamente a los seguidores de esta disciplina, aunque se trata de un juego que todavía posee mucho margen de mejora en ciertas áreas.
Hemos realizado este análisis en su versión de PS4 con un código proporcionado por Bandai Namco.