Análisis de ELEX (PS4, Xbox One, PC)
Piranha Bytes es una desarrolladora alemana conocida por crear la saga Gothic, que causó un gran impacto entre los aficionados a los títulos de rol, al ofrecer un gran mundo abierto lleno de misiones, entresijos y diferentes facciones entre las que debíamos escoger para encarar nuestra aventura.
Después de unos últimos años en los que el estudio ha pasado de puntillas por diferentes plataformas sin lograr recuperar el éxito de sus primeros juegos, los alemanes prueban ahora suerte con ELEX, un título que nos emplaza en un mundo futurista postapocalíptico.
Un juego muy Piranha Bytes
Como comentamos hace sólo un par de líneas, Piranha Bytes decide en esta ocasión ambientar la historia de ELEX en Magalan, un mundo futurista de corte fantástico sin renunciar del todo al habitual guiño a la Edad Media de sus títulos más aclamados, ya que las construcciones de piedra o madera, la magia y el combate cuerpo a cuerpo están muy presentes a lo largo del juego.
Nos encontramos con un título que cuenta con todos los ingredientes y clichés típicos del estudio alemán, dejando al jugador una libertad apabullante desde el inicio de la partida, pudiendo escoger nuestro propio camino, teniendo que tomar complicadas decisiones que marcarán la aventura desde el primer minuto de juego y, por supuesto, pudiendo escoger entre las diferentes facciones disponibles.
Estas facciones, como suele ocurrir en los juegos de rol de Piranha, tienen diferencias muy claras entre sí pudiendo optar, por ejemplo, por los clérigos, que han decidido abrazar ese material extraterrestre llamado Elex que significó el fin del mundo, aprovechando su potencial y todas sus tecnologías.
En el otro lado de la balanza, sin embargo, nos encontraríamos con los berserker, que han decidido renunciar a toda la tecnología alienígena y que lucha por devolver la vida a la tierra transformando el Elex en maná para poder utilizar la magia, compensando así su carencia tecnológica.
En posiciones más intermedias tenemos en primer lugar a los proscritos, una facción que aboga por la libertad de todos sus componentes siendo todos ellos valorados por sus cualidades y utilizando el Elex como una simple droga.
Por último, nos encontraremos a los Albos, hombres y mujeres que han aprendido a no sucumbir a la adicción del Elex y a utilizarlo para mejorar sus atributos físicos y mentales pagando el precio de ser unos seres vacíos, sin sentimiento alguno.
Libre por el mundo, pero sólo hasta donde este te permita
La libertad del jugador para decidir hacer lo que le venga en gana pudiendo explorar todo el mundo con libre albedrío y sin tiempos de carga es uno de los principales atractivos jugables de Elex que nos recuerda mucho a las sensaciones que teníamos al jugar a Gothic o que hemos tenido más recientemente con títulos más modernos como The Witcher 3 o Skyrim.
Sin embargo, como suele ocurrir, esta libertad está limitada por el propio mundo en sí, ya que notaremos rápidamente las zonas que se nos quedan demasiado grandes para nuestro nivel o equipamiento y que nos empujan a volver sobre nuestros pasos para realizar misiones o subir nuestro nivel antes de poder aventurarlas.
Las misiones principales para seguir la trama del juego cuentan con una dificultad bastante elevada desde un primer momento, invitándonos a perdernos por el mundo y a explorarlo antes de sumergirnos en el arco argumental principal.
Esto es una navaja de doble filo ya que, pese a que se agradece este empujón a hacer lo que nos venga en gana, también nos obliga a realizar algunas misiones secundarias bastante aburridas y asumibles que consistirán en investigar, explorar y hablar con algunos personajes para subir unos cuantos niveles antes de poder, por fin, enfrentarnos con garantías ante las diferentes criaturas del mundo y a las misiones más interesantes.
La consecuencia con esta decisión es que el juego tiene un ritmo bastante lento y pesado durante unas primeras horas que pueden ser bastante tediosas para algunos jugadores que busquen un título que enganche más rápido. Por suerte, el juego se va agilizando a medida que vamos desarrollando nuestro personaje hasta que nos permite disfrutar por fin, de todo lo que nos ofrece Elex.
En el lado positivo de esta oleada de libertad a coste de un ritmo lento hay que decir que Magalan es una tierra llena y rica de historia, de lugares diferentes y muy bien diseñados que atrapa y seduce a medida que la vamos conociendo aunque, en ocasiones, se mezclan criaturas y conceptos un tanto dispares que parecen estar introducidos de forma un tanto forzosa en el planteamiento del juego.
También queremos destacar una de las decisiones más acertadas de Piranha, que es la de introducir un propulsor que nos permite explorar el mundo como nunca habíamos podido hacer antes en sus juegos, dándonos una riqueza a nivel jugable bastante más profunda de lo que en un principio pueda parecer.
Todos estos ingredientes harán que completar Elex nos pueda llevar unas 60 horas pero además, dado a esta libertad y a todas las elecciones que deberemos de tomar como jugador (empezando por escoger facción) hace que el juego sea tremendamente rejugable, asegurándonos cientos de horas de diversión, misiones, disparos y espadazos.
Atractivo a nivel jugable, demasiado viejo a nivel visual
Piranha Bytes cuenta con varios ingredientes a nivel jugable que sin duda atraerán a los amantes de los juegos de rol de la vieja escuela gracias a la libertad de Elex, algunas misiones bastante interesantes o la profundidad argumental de su universo que han creado para la ocasión.
Pero todo esto se empobrece por culpa de una envoltura para el juego demasiado vieja y que a todas luces debe mejorar ya que, en su apartado técnico, Elex parece un título de la pasada generación de consolas y ordenadores, estando muy lejos de otras propuestas más atractivas que hemos visto en el género en los últimos años.
Esta mala envoltura la vemos desde que ejecutamos el juego por primera vez, notando unos gráficos, en general, bastante simplones y una calidad en las texturas que está lejos de lo que podemos esperar en el 2017.
El caso más flagrante en este sentido son las animaciones tanto de nuestro personaje principal como de los diferentes monstruos o protagonistas que nos encontramos a lo largo de la aventura, demasiado básicas y robotizadas y que no hacen ningún bien al juego sobre todo a la hora de encarar los combates cuerpo a cuerpo.
Otro punto negativo a nivel visual es el de la interfaz, demasiado pobre, en la que no se nos muestran reproducciones de los objetos, sino que se basa en números y letras a excepción del mapa y de sus diferentes indicadores.
Esta interfaz es básica hasta tal punto que ni siquiera tenemos una parte visual con la que equipar los diferentes objetos de nuestro personaje, sino que tendremos que hacerlo tirando de una lista de objetos que estaba bien hace un buen puñado de años, pero que se queda vieja con el potencial que han alcanzado los videojuegos hoy día.
Conclusiones
Elex es un juego que conserva todo lo bueno que Piranha Bytes nos ha ofrecido con juegos como Gothic, dándonos una envidiable libertad para tomar decisiones y hacer casi lo que nos dé la gana en este nuevo universo postapocalíptico que han creado para la ocasión y que nos resulta bastante interesante.
Por lo tanto, podremos perdernos explorando el mundo, realizar cientos decisiones y tomar decenas de decisiones afectando todas ellas a nuestra aventura, y convirtiendo un juego de unas 60 horas en una primera vuelta en un título tremendamente rejugable.
La parte negativa es que nos encontramos con un juego que está muy lejos de lo que debería ser un título de estas características en 2017, con unos gráficos bastante sencillos, unas animaciones toscas y una interfaz que es demasiado vieja y de la que se debe esperar más, mucho más.
Desde luego, si os gustaron los trabajos anteriores del estudio alemán y no os importa la interfaz poco atractiva o su aspecto gráfico tan básico, Elex os hará pasar de decenas a cientos de horas sumergidos en un universo postapocalíptico interesante, divertido y con una narrativa bien trabajada.
Hemos realizado este análisis en su versión de PC con un código de descarga que nos ha proporcionado Dead Good Media.