Análisis Call of Duty: Modern Warfare 2 Remastered, una campaña espectacular pero corta (PS4, Xbox One, PC)
Infinity Ward y sus dos primeros Modern Warfare cambiaron por completo el panorama de los shooter desde hace más de una década. Influyeron en multitud de juegos –y no sólo en los FPS-, tanto en la manera de contar historias como al marcar tendencias con su multijugador. Puede que hasta la explosión de los battle royale, a la que también se ha sumado Call of Duty, ningún otro juego revolucionase tanto el género como los Call of Duty de 2007 y 2009 desde los tiempos de Doom. Sus ventas millonarias también garantizaron que Activision destinase todos sus recursos a anualizar la saga, anualizando las entregas, alternando entre estudios –ya fuesen Infinity Ward, Treyarch o Sledgehammer, más las colaboraciones de otros equipos-, con el consiguiente desgaste de la marca, que ha tenido momentos fuertes y algún que otro traspiés en cuanto a críticas. Inevitable en una saga que por otra parte, aún hoy suele ser de las más vendidas año tras año.
En 2016 Activision rescató el juego que lo revolucionó todo con Call of Duty: Modern Warfare Remastered, una puesta a punto que renovaba los gráficos del original y acompañaba, inicialmente, a una de las versiones de Call of Duty: Infinite Warfare. Dicho título incluía también sus modos multijugador, y para muchos, incluso era el verdadero atractivo de Infinite Warfare hasta que se puso a la venta de manera individual. Ahora, y prácticamente por sorpresa –adelantada en los últimos meses por numerosas filtraciones-, nos llega Call of Duty: Modern Warfare 2 Remastered de la mano de Beenox, sin necesidad de adquirir otro juego, aunque con un contenido más limitado. Eso sí, con una exclusiva temporal en PlayStation 4; a Xbox One y PC llegará a finales de abril.
"Nada de multijugador"
En primer lugar, hay que señalar que el nombre completo del juego es Call of Duty: Modern Warfare 2 Campaign Remastered y no por casualidad: esta vez hablamos únicamente de una actualización de su épica historia, pero perdemos su modo multijugador competitivo y el cooperativo. Activision ha explicado que la decisión se tomó para no dividir a la comunidad con otro multijugador, algo comprensible cuando el último Modern Warfare apenas tiene unos meses en el mercado y podemos descargar Call of Duty: Warzone –un battle royale gratuito-. Además, muchos de sus mapas clásicos están de vuelta en Modern Warfare y como parte de Warzone. Justificado, y más cuando en unos meses nos llegaría el rumoreado reinicio de Black Ops, pero también un importante punto negro en este Remastered respecto al original o al anterior Modern Warfare Remastered.
Otro día, la misma... acción cinematográfica
La campaña de Modern Warfare 2 desarrolla su historia desde cinco puntos de vista diferentes que nos llevan a distintos puntos calientes del globo ante la amenaza de Vladimir Makarov, un extremista que prepara una campaña de venganza mediante atentados terroristas en intereses occidentales. Roach, Joseph Allen, James Ramirez y John "Soap" MacTavish protagonizan esta aventura, más un breve vistazo a la Estación Espacial Internacional, pasando por zonas en guerra, la peligrosa Prípiat –un lugar abandonado tras el desastre de Chernobil-, las favelas de Río de Janeiro, la mismísima Casa Blanca, un cementerio de aviones o una base petrolífera, entre otras muchas localizaciones. Destacamos especialmente dos misiones: la que transcurre en un gulag por su clara inspiración en la película La Roca –en especial la zona de los baños- y la polémica escena del aeropuerto; a estas alturas está suficientemente spoileada pero evitaremos hablar de ella por si es vuestra primera partida.
Modern Warfare 2 no sólo se lucía con una sucesión de explosiones y escenas de pura adrenalina dignas de las superproducciones cinematográficas, también era muy divertido de jugar, apostando por un control rápido y sencillo, con misiones que cambian el ritmo de juego cada tres minutos. De infiltración a guerra abierta, de manejo de un dron Predator a persecuciones en motos de nieve, manejo de artillería pesada, carreras por entornos urbanos, hogares, restaurantes… Nada de esto se ha perdido con el remake, con un gunplay que nos sigue pareciendo igual de adictivo que siempre. Tanto si es la primera vez que lo juegas como si lo tenías algo olvidado, este Call of Duty sigue siendo una bomba en el apartado jugable al que cuesta muy poco acostumbrarse. La verdad es que temíamos descubrir un control que estropease nuestros recuerdos, pero nada más lejos de la realidad.
¿Cuál es el punto débil? Sin duda, la brevedad. En apenas unas cinco horas habrás llegado a su final, algo más si quieres exprimirlo al máximo o lo juegas en las dificultades más altas, pero eso no oculta que un jugador experimentado en el género podrá terminarlo en dos o tres partidas. Tampoco es excesivamente rejugable por el tipo de desarrollo de la campaña: muy lineal en el recorrido y con escasas opciones de estrategia. Las misiones te llevarán de un punto a otro eliminando a todos los enemigos de la zona, protegiendo un lugar o simplemente huyendo, pero para el estándar actual se siente demasiado encorsetado y sin margen para ser creativo. Una vez conoces todos los giros de su historia y los puntos de aparición de los enemigos, la segunda vuelta aporta muy poco nuevo.
Naturalmente, en el Modern Warfare 2 original esta campaña era más bien un fantástico aperitivo o entrenamiento para las decenas o centenares de horas que llegaban después con la auténtica estrella, su multijugador, pero sin esto Modern Warfare 2 Remastered pierde demasiado valor –sobre todo si ya lo has jugado-. No vamos a decir que su llegada no sea bienvenida porque habrá nuevos jugadores que no lo han disfrutado en su momento, sin embargo para quien todavía tiene su copia en la estantería o distribución digital ya no hay el mismo atractivo.
Aguanta bien en el apartado visual y sonoro
El remaster/remake toca lo necesario para que el juego luzca estupendamente en 2020. Nítido, a 60 imágenes por segundo completamente sólidas, con personajes que multiplican polígonos, nuevos efectos y texturas, HDR… En ningún caso es comparable a los últimos Call of Duty de la actual generación y por supuesto se aprovecha de la escasa libertad de movimiento que nos ofrece para ser muy resultón, pero al final lo que importa es que Modern Warfare 2 nunca se había visto y escuchado tan bien –con las voces en español y la genial banda sonora de Hans Zimmer para el tema principal y Lorne Balfe en el resto de temas-.
Conclusiones
Una pequeña sensación agridulce con Modern Warfare 2 Remastered, porque a pesar de cumplir con lo que promete e incluso con creces –no se puede pedir más al trabajo de la remasterización sin convertirlo en un auténtico remake-, se hace complicado justificar la compra salvo para aquellos que nunca lo jugaron en 2009. El pack original sin duda fue sobresaliente y no creemos que alguien lo ponga en duda, pero reducir Modern Warfare 2 a una corta campaña que no es excesivamente rejugable y con un precio de 24,99 euros hace difícil recomendarlo por la simple nostalgia. Entretenido, intenso y con la misma espectacularidad que recordábamos, pero se completa en un suspiro y ciertas decisiones de diseño se perdonarán ahora mucho menos que en la pasada generación.
Hemos realizado este análisis con un código que nos ha proporcionado Activision.