Análisis de A Way Out (PS4, PC, Xbox One)
Sólo multijugador online, siempre conectado, battle royale, mundo abierto, loot boxes, juegos a medias, micropagos… La lista de tendencias que sigue la industria muchas veces nos hace caer en eso de "cualquier tiempo pasado nos parece mejor". Los videojuegos se están convirtiendo en un negocio muy arriesgado, donde un mal juego puede suponer el cierre de un estudio, y las compañías tienen que maximizar el beneficio a costa de prácticas que no terminan de ser todo lo positivas que deberían de cara al usuario.
Por eso, cuando una de las grandes editoras como es Electronic Arts nos ofrece un juego centrado en la narrativa, con cooperativo tanto local como online, que permite que dos usuarios jueguen a través de internet con una única copia del juego, que hace algo nuevo, y que además lo hace bien, nuestro corazón de jugador veterano se reconcilia un poquito con la industria actual. A Way Out es una agradabilísima sorpresa que nos ha atrapado de principio a fin. Os contamos por qué.
Buscando la salida
A Way Out es una aventura cooperativa en tercera persona para dos jugadores, en la que encarnamos a dos presos que intentan escapar de la cárcel y de la justicia.
El juego nos ofrece jugar tanto de manera local con un segundo mando como a través de internet, permitiendo que nuestro compañero remoto se descargue una copia del juego sin coste adicional.
La historia transcurre (casi) en todo momento con los dos personajes en pantalla. Esto quiere decir que jugamos a pantalla partida, tanto online como offline, y esto es una de las claves de la experiencia. Cada plano, cada cámara está medida, y la división de la pantalla se ajusta en función de lo que esté pasando y de lo que quiera contarnos. Que nadie vaya a pensar que este formato de imagen es algo negativo, porque es todo lo contrario. Gracias a esta particularidad vamos a vivir momentos memorables y va a conseguir sorprendernos de manera que otros juegos nos podrían conseguir.
No vamos a contaros demasiado sobre la historia o el desarrollo de la aventura como tal, pero sí que os vamos a decir que A Way Out tiene de todo. Tiene acción, infiltración, momentos frenéticos, momentos pausados, humor, drama, minijuegos… y todo ello con un ritmo excelente. Creemos que cuanto menos sepáis al respecto mejor; id a ciegas y dejar que todas las sorpresas que guarda hagan su trabajo.
Queremos dejar claro que, si bien la experiencia es guiada, hay muchas secuencias en las que podemos explorar el entorno libremente e incluso encontrar pequeñas subhistorias en las que podemos intervenir, además de pequeños minijuegos competitivos para enfrentarnos a nuestro compañero. Es un título en el que todo tiene que funcionar como un reloj para que las dos partes se entrecrucen, y aun así consigue darnos sensación de libertad.
Completarlo nos ha llevado unas siete horas, pero se presta fácilmente a una segunda vuelta. No sólo querremos vivir la aventura con el otro personaje, sino que también hay momentos en los que tenemos que elegir entre dos maneras totalmente diferentes de afrontar una situación, algo que nos incitará a rejugarlo. Ah, ¿y hemos mencionado que tiene dos finales? Obviamente, en la segunda vuelta no tiene el mismo impacto, pero es de agradecer que Hazlight nos dé razones para volver a él.
La única "pega" que le podemos poner es que a nivel jugable es bastante sencillo; muchas situaciones se resuelven con QTE y nunca llega a ser un desafío. Y lo decimos entre comillas porque entendemos que el objetivo es contar una historia y no quieren distraernos con mecánicas que nos despisten o crear momentos de frustración por morir una y otra vez. A Way Out es un juego sobre narrativa, y la parte jugable es simplemente una herramienta al servicio de aquélla.
Un gran envoltorio
Algo que nos ha sorprendido también ha sido el apartado audiovisual del juego. Para ser un proyecto de moderado presupuesto, A Way Out se ve muy, muy bien. Las animaciones quizás no son las más punteras, y las texturas no son fotorrealistas, pero no es lo que busca. Lo que de verdad importa es la personalidad que transmiten los protagonistas, la variedad de escenarios o lo que ciertos planos nos hacen sentir.
Los más cinéfilos también serán capaces de reconocer multitud de referencias, que van desde Fuga de alcatraz y Tango & Cash a Heat, pasando por cintas como Delta Force. Y bueno, para los jugones también hay más de una referencia a varios videojuegos y géneros de esas que saben sacarnos una sonrisa.
En lo técnico, la versión de Xbox One X (que es la que hemos jugado) nos ofrece dos modos, uno que da prioridad a los gráficos y otro que da prioridad a la tasa de imágenes por segundo. El primero, obviamente, aumenta la resolución y nos atreveríamos a decir que también mejora ciertos detalles como la distancia de dibujado, alternando entre las 30 y las 60 imágenes por segundo en función de la escena. El segundo hace los obvios sacrificios visuales para ofrecer una experiencia a 60 imágenes por segundo. Para el tipo de juego que es, la tasa de imágenes no nos parece clave, así que incluso ésta oscila, sigue siendo perfectamente jugable.
Lo sonoro está a un gran nivel, con muy buenas actuaciones (en inglés con subtítulos en castellano) y la música que siempre llega en el momento justo. Los inconvenientes sonoros de jugar a pantalla partida también están muy bien solucionados, dando prioridad al diálogo más importante o al que empezase primero, aunque ambos tendrán sus propios subtítulos para poder seguirlos.
Una experiencia de las que quedan en nuestra memoria
La verdad es que no quisimos saber casi nada de A Way Out antes del análisis. Lo hemos jugado prácticamente a ciegas, y todas las expectativas que teníamos las ha superado. Es una sorpresa constante, una experiencia variada con un ritmo acertadísimo y momentos para el recuerdo. Además, el concepto es muy original y la ejecución es excelente, y el poder jugarlo tanto online como offline con una única copia es la guinda del pastel.
Si os gustan las aventuras en las que la narrativa es la prioridad pero en las que no se descuida la jugabilidad, y si sois de los que echáis de menos una buena historia cooperativa, os recomendaríamos que os lanzaseis a por A Way Out sin pensarlo. Cuanto menos sepáis sobre él, más disfrutaréis esta experiencia única.
Hemos realizado este análisis en su versión de Xbox One X con un código de descarga proporcionado por Electronic Arts.