Análisis de PixelJunk 4am PSN (PS3)

Hasta ahora, Pixeljunk estaba relacionado con juegos de gráficos minimalistas pero géneros conocidos, ya fuesen matamarcianos laterales, juegos de carreras, plataformas o defensa de torres. Es cierto que todos ellos enfocados a un público minoritario, pero fácilmente encasillables o comparables a otros títulos. Y esto era así hasta el anuncio de 4am, un nuevo proyecto de Q-Games que entra más en la categoría de juegos experimentales o demo técnica que en la de un videojuego tradicional.

Inicialmente conocido como PixelJunk Lifelike, el título actual hace referencia según sus creadores a esa hora "mágica" de la noche profunda en la que parece que el Sol no va a salir nunca. Puede que no te haya convencido la explicación, pero la idea de este programa –vamos a evitar llamarlo juego- es la de hacerte sentir como un DJ en plena madrugada orquestando de manera virtual música electrónica con PlayStation Move. Se puede confundir erróneamente como juego musical, por lo que vamos a intentar explicar esta aplicación para evitar desilusiones o malentendidos.

Si lo tomamos por la parte de "juego", Pixeljunk 4am te ofrece la posibilidad de crear tu propia música interactiva mediante un control de PS Move, aunque también puedes utilizar dos simultáneamente o hacer que otro jugador tenga el suyo. El propósito de todo esto es bien simple, experimentar movimientos con Move que distorsionan o crean nuevos instrumentos en la música. ¿Cómo? Tocando el borde del lienzo virtual, arrastrando bucles de sonido, ejecutando giros o golpeando el límite imaginario, movimientos simples que se pueden hacer con un brazo y sin grandes aspavientos, aunque es bastante recomendable una postura de pie, nada de repanchingarse en una silla, ese no es el espíritu de 4am.

Puesto que se trata de desarrollar tu creatividad, no esperes ningún tipo de minijuego en el que debas completar una secuencia determinada, ritmos que copiar o similar, no se trata de un Rock Band y no hay ningún tipo de premio o puntuación que conseguir, salvo el aplauso de tus espectadores –si eres uno de ellos, agitando Move se muestra que disfrutas de la música-. Hasta la minimalista interfaz al principio asusta un poco y te sientes perdido hasta que entiendes la intención de Q-Games. No es una competición, es libertad para pseudocomponer sinfonías electrónicas sin ningún tipo de preparación, basta con tener buen oído o quizás ni eso, sólo ganas de tocar música de una manera tan simple como agitando Move según te dicta la intuición. Viene a ser como dar un palo y unos cubos metálicos a modo de tambor a un niño, pronto empezará a improvisar. La diferencia, claro, es que en 4am tienes visitantes a tu sesión de todos los rincones del mundo.

No podríamos decir que 4am es la evolución de aplicaciones como los viejos Music de PS One creados por Jester Interactive y Codemasters puesto que realmente el tipo de música que creas es limitada, no existe una variada galería de pistas y sonidos. PixelJunk 4am se centra más en la música ambiental y si acaso en el trance, sin estridencias ni ritmos machacones, en la línea del artista multimedia japonés Baiyon que es precisamente quien ha apadrinado esta producción prestando sus sonidos; si tienes PixelJunk Eden, hazte a la idea de que esa banda sonora es parecido a lo que obtendrás con 4am. Y lo harás de una manera intuitiva aunque antes deberás pasar por el breve tutorial en el que se explican las diferentes formas de sacar bucles de sonido y efectos, controlar las diferentes pistas del audio y las distorsiones. Aprende esta base y luego úsala como te plazca, no existen fallos en lo que tú creas que es buena música, aunque ya te advertimos que tus primeros experimentos no te pondrán al nivel de Daft Punk.

Jugar en solitario, en tu habitación y con la luz apagada no es que no sea recomendable, es que no tendría demasiado interés. Es por eso que este programa está indicado principalmente para fiestas –seguramente nocturnas- a modo de chill-out para que la gente se relaje o divierta en compañía. Como esto no es lo más común, la otra opción que da verdadero interés a 4am está en las características tipo red social que se ha incluido: cuando tocas música lo haces para una audiencia global, indicas tu ciudad, asocias cuentas de Twitter y Facebook para avisar a los conocidos que empiezas tu sesión y la gente se va sumando en directo a tu sala de baile. Las primeras visitas a tu partida seguro que te emocionarán y meterán presión para que lo hagas mejor, no querrás que huyan pronto, ¿verdad? Y lo más parecido a un tablón de récords o puntuación que vas a ver en este juego es el número máximo de seguidores durante una de tus partidas, que quizás quieras superar mejorando tu estilo. Pero si no estás motivado, puedes hacer uso del buscador y ver las sesiones que hay por Alemania, los Países Bajos, cualquier usuario que esté en activo en ese momento –aclarar que lo que vemos es la imagen sicodélica en movimiento, no al usuario en vídeo-. De esta manera tienes garantizado asistir siempre a un concierto de un DJ, que claro, puede ser mejor o peor –cada usuario tiene un perfil en el que se indica el número de vítores que ha recibido, lo que normalmente es un indicador de su calidad-.

Lo bueno de estos conciertos es que la música se improvisa y nunca será igual, no repetirás sesión ni se parecerá a a lo que haga otro usuario del mundo. Es un programa chocante, cuesta quererlo a menos que tengas predisposición por este tipo de rarezas, pero una vez vas entrando en su funcionamiento y ves cómo los expertos sacan mejor partido que tú con las mismas herramientas habrá usuarios a los que les entrará el gusanillo por probar nuevos ritmos. No sabemos a cuántos compradores quedarán encantados con esta idea, así que recomendamos es que en caso de dudas, si prefieres un videojuego como tal, pruebes un lanzamiento como Child of Eden que es lo más parecido que se nos ocurre pero más fácil de entender para un jugón.

PixelJunk 4am cuenta también con un visualizador de música de tu propio disco duro, ya sabes, esos salvapantallas abstractos que se mueven al ritmo de la canción, aunque lógicamente utilizar la aplicación como tal resulta cara –cuesta 7.99 euros-, más teniendo en cuenta que la propia PlayStation 3 cuenta con varios reproductores gráficos de manera gratuita en la interfaz del sistema, el XMB, con ecualizadores o el globo terráqueo.

Poco más ofrece PixelJunk 4am, salvo desbloquear nuevos temas visuales de una manera no muy clara –la interfaz minimalista no te guía demasiado-. En ningún caso se puede esperar de este proyecto un juego musical, porque no encaja exactamente en la definición, más bien sería un laboratorio de sonidos hipnóticos. Y es difícil recomendar esta experiencia a un tipo de público porque podría gustar a cualquiera, igual que decepcionará a muchos. Desde luego, pide unos cuantos requisitos para ser atractivo: que te guste la música electrónica, que lo uses de manera social y que no tengas reparos en utilizar sensores de movimiento.

El objetivo final de Q-Games es el de crear una distracción o entretenimiento más que el de divertir. Hemos podido comprobar que los jugadores que mejor partido sacan a 4am lo hacen en largas partidas e inclinándose por no empezar a acumular capas de sonidos de manera caótica para hacer más ruido. Claro que no todos los jugadores están dispuestos a pagar por un programa en el que parte de su interés está en buscar sesiones musicales, dejar su control quieto y mirar en la pantalla un caleidoscopio pensando en las musarañas. Arriesgado, atrevido o un timo incomprensible, estamos seguros de que los adjetivos a este PixelJunk van a ser muy variados.

Conclusiones

PixelJunk 4am es una de las propuestas más extrañas de PlayStation Network. Y hemos visto de todo, incluso lanzamientos como Datura que habían desafiado nuestro concepto de juego, pero lo nuevo de los creadores de joyas como PixelJunk Shooter y Monsters rompe con todos los esquemas. Es complicado describirlo, pero podemos decir lo que no es: un profundo editor de música, un juego para descargar adrenalina o un proyecto con un presupuesto desbordante orientado a dejarte con la boca abierta.

Y no tiene porqué gustar a los fans de PixelJunk porque esta vez 4am va por libre, incluso atraerá más miradas entre aquellos que no están acostumbrados a los videojuegos por su facilidad de uso y la ausencia de aspectos competitivos. Una idea, otra más, sólo viable en la distribución digital.