Análisis de Ninja Gaiden Sigma (PS3)
Sin duda uno de los equipos de desarrollo más peculiares del mundo es el Team Ninja de Tecmo. Creadores de Ninja Gaiden y Dead or Alive, y capitaneados por el siempre polémico Tomonobu Itagaki, el Team Ninja ha destacado en los últimos años por su apoyo a Microsoft, para la que ha realizado varios juegos exclusivos, y por su determinación a la hora de ofrecer siempre los gráficos más espectaculares. En Xbox los Dead or Alive demostraron la potencia de la consola, pero sin duda el título más emblemático de Tecmo en la máquina de Microsoft fue este Ninja Gaiden que ahora da el salto a la nueva generación con la coletilla Sigma y algunas novedades.
Ninja Gaiden es uno de los mejores juegos de acción de la pasada generación, a la altura de Devil May Cry o God of War, y muchos jugadores no lo probaron, especialmente en España, por su condición de título exclusivo de Xbox. Además de ser, cuando salió, un espectáculo gráfico y un título muy interesante a nivel jugable, muy retador.
Ninja Gaiden también tuvo el honor de ser uno de los primeros juegos que organizó campeonatos a través de Internet en consola, y que tuvo actualizaciones que podían descargarse desde la red, y que finalmente se condensaron en una versión mejorada y "definitiva" del juego titulada Ninja Gaiden Black.
Tres años después llega, desarrollado rápidamente, Ninja Gaiden Sigma. Este primer juego del Team Ninja para PlayStation 3 es, como es de esperar, una adaptación a la consola de Sony del título original de Xbox con todo lo que puede esperarse de este tipo de cosas: El apartado gráfico se ha mejorado muchísimo, resultando un título espectacular, se ha incluido todo el contenido de la versión original, pero además se han añadido nuevas cosas, destacando un nuevo personaje jugable. Es el mismo juego que en Xbox, pero con todos sus defectos corregidos (la cámara, uno de los más criticados en su día, es un buen ejemplo) y con nuevo contenido y gráficos actuales. Si el que jugó en su día al original podría plantearse su compra, para el que solo lo conoció de oídas este Ninja Gaiden Sigma es un título realmente apetitoso.
En Ninja Gaiden controlamos al experimentado ninja Ryo Hayabusa, y como novedad en Sigma, a un nuevo personaje llamada Rachel. Controlaremos a esta mortífera mujer en tres capítulos del juego y varias misiones del modo historia. Rachel no es tan ágil como Ryu, pero cuenta con un enorme martillo como arma y una devastadora magia. Extrañamente –las chicas suelen ser las ágiles en el mundo del videojuego-, la forma de jugar con Rachel cambia bastante respecto a la de jugar con Ryo. Aunque la aparición de Rachel es menor en comparación con la del protagonista, sus niveles, completamente nuevos, ofrecen más variedad dentro del juego.
Por lo tanto, la parte principal del juego sigue tratándose de Ryu Hayabusa y de rápido y ágil combate contra varios ninjas al mismo tiempo. Como se comentó hace años, cuando salió el juego original, una de las cosas encomiables de Ninja Gaiden es que es un juego de acción donde los enemigos no son comparsas u obstáculos sencillos antes de llegar al jefe de final de fase sino que realmente tienen ganas de matarte. Esto convierte a Ninja Gaiden en un juego desafiante, donde la diferencia entre jugar bien y jugar mal se nota realmente desde los primeros niveles. Los ninjas enemigos te atacan, y es esencial saber cubrirse para evitar ser dañados. Contamos con una barra de energía que es relativamente sencilla de rellenar –hay elixires, los enemigos dan orbes de vida-, pero que puede bajar muy rápidamente en un enfrentamiento si un enemigo se enzarza con nosotros en un combo.
Mientras que otros juegos de acción contra varios enemigos al mismo tiempo adoptan soluciones extrañas o relativamente innovadoras para hacer que lidiar con varios enemigos al mismo tiempo sea sencillo, en Ninja Gaiden contamos con una guardia que no hay que dirigir (le damos al botón de cubrir y nos cubrimos por todas partes) y con unos ataques que sí hay que orientar hacia un enemigo u otro. El resultado es bueno, ya que cubrirse es vital, y al hacer la guardia "universal" pelear contra varios ninjas enemigos al mismo tiempo no se hace imposible. Aparte, Ninja Gaiden tiene una curva de aprendizaje que incluye saber cómo son los ataques de los enemigos –pues son combos al igual que los nuestros-, por lo que aprendiendo cómo son sabremos cuando dejar de cubrirnos para contraatacar.
Aparte de combate ágil y "de la vieja escuela", con dificultad y la necesidad, en muchas ocasiones, de cargar la partida para enfrentarnos de nuevo al jefe final de turno, Ninja Gaiden también tiene cierta parte de exploración del escenario y de puzle, la primera especialmente para obtener ítems escondidos (realmente lo están, y la cámara por defecto no ayuda), y la segunda no demasiado importante. Los puzles se reducen a obtener la llave o el objeto de turno y llevarlo a la puerta cerrada para así continuar jugando.
Como juego de acción frenético que se precie, a medida que avancemos iremos mejorando nuestro repertorio de habilidades de combate, obteniendo nuevos combos, armas (incluyendo algunas nuevas de esta versión), armas de alcance (estrellas ninja, arco, etc…) y ataques de magia especial. Un añadido de esta versión PS3, un tanto anecdótico, es tener que agitar el mando SixAxis para lograr que nuestros ataques Ninpo tengan su máximo poder. Otras novedades a lo largo del juego, aparte de la inclusión de Rachel y varios niveles asociados a ella, son cambios en los niveles de Ryo, modificaciones aquí y allá y retoques que cambian ligeramente la experiencia del primer Ninja Gaiden, generalmente haciendo la curva de dificultad más ajustada y haciendo que el juego sea mejor en conjunto. Por no hablar de la cámara, que ahora se ha hecho libre –como hicieron en las actualizaciones de Xbox-, y podemos manejarla a nuestro antojo, más allá de los puntos de vista predefinidos del juego.
A nivel gráfico Ninja Gaiden Sigma ha recibido un considerable lavado de cara respecto a la versión de Xbox, que ya era uno de los juegos más atractivos visualmente de la pasada generación. Aunque no puede considerarse un juego de nueva generación a nivel gráfico como tal, pues hay veces que se nota lo que no ha sido mejorado, sí se trata de un título vistoso que, con las mejoras en animación, escenarios y efectos, aguanta el tipo frente a otros títulos de la consola aunque queda lejos de lo que puede hacer la potentísima máquina de Sony.
Aún así, los escenarios son ahora mucho más espectaculares que en el juego original, así como el modelado y las animaciones de Ryu, Rachel y los enemigos. Los efectos también se benefician del paso de Xbox al procesador Cell, siendo ahora mucho más vistoso. El motor gráfico se mueve a 60 fotogramas por segundo con solidez a una resolución de hasta 1080p. El sonido sigue contando con una muy buena banda sonora, con temas que ambientan muy bien la acción, y un repertorio de sonidos Fx tremendamente variado e impactante, en combinación con un doblaje al inglés subtitulado.
Ninja Gaiden Sigma es la adaptación a PS3 de un juego de la anterior generación y esa tarjeta de presentación nunca es la más adecuada. Sin embargo, sigue siendo un juegazo, conservando el frenetismo y la dificultad del juego original, puliendo sus defectos, incluyendo novedades y contando con una duración inusitada para un juego de acción. Aparte de las 20 horas que puede llevar el modo para un solo jugador, cuenta con un modo de misiones, y un ranking online para comprobar en la red quién es el mejor ninja. En espera del anuncio oficial de la segunda parte, que al parecer no será para la consola de Sony, Ninja Gaiden Sigma es actualmente uno de los mejores juegos de PlayStation 3 y una compra muy recomendada para los que busquen un excelente juego de acción en la máquina de Sony.