Análisis de Tom Clancy's Ghost Recon 2 (PS2, GameCube, Xbox)
El género de los juegos en primera persona se ha diversificado en diversos subgéneros a lo largo de los últimos años, y el de los shooters tácticos es sin duda uno de los más pujantes. El referente tradicional de este género es Rainbow Six, basado en el libro del mismo nombre de Tom Clancy, que narra las aventuras de un equipo de fuerzas especiales americano. El videojuego destacaba por el trabajo en equipo y por su realismo a la hora de tratar las bajas o la precisión de las armas, además de por la IA enemiga. De Rainbow Six sale este primo lejano, o hermano pequeño, llamado Ghost Recon. También basado en trabajos de Tom Clancy, los Recon son un equipo de fuerzas especiales del ejército, algo así como una versión más militar y de campo de batalla que los Rainbow Six. El juego también es mucho más frenético, con mayor componente de acción que de estrategia y simulación, y su secuela ha llegado por fin. Aunque esta vez usa una tercera persona desde justo detrás de los soldados.
Esta vez, Ubisoft realiza una maniobra un tanto extraña: Ghost Recon 2 tiene cuatro versiones, y no es realmente un mismo juego en diferentes plataformas, sino dos juegos, uno para cada grupo de dos plataformas. Los sucesos en las versiones PlayStation 2 y GameCube tienen lugar unos años antes que en las versiones Xbox y PC, y tienen no pocas diferencias con las otras.
Del mismo modo, el juego ha sido desarrollado por dos estudios de Ubisoft diferentes, Red Storm Entertainment la versión Xbox, y el de Ubisoft en Shangai a de PS2. Pero aquí pasa algo, puesto que las diferencias entre la versión Xbox y la versión PS2 ( las únicas puestas a la venta por el momento) no se limitan a la habitual superioridad gráfica de la máquina de Microsoft, ni siquiera a tener misiones diferentes.
Las diferencias van más allá, pues se juegan muy diferente. Mientras que la versión de Xbox es un juego de acción táctica propiamente dicho, en la línea de títulos como Rainbow Six 3 o Socom, donde usaremos y daremos órdenes activamente a los miembros de nuestro equipo, la de PlayStation 2 es un juego de acción realista donde vamos acompañados por otros miembros del equipo a los que podemos dar órdenes vagas, pero que no son ni necesarias ni determinantes para avanzar en las misiones. Esto es algo muy a tener en cuenta por los que barajen entre qué dos versiones comprar, porque se van a encontrar con dos juegos muy diferentes, no solo por los gráficos. Mientras que la versión Xbox es un shooter táctico, la de PS2 es un shooter realista como Call of Duty o Medal of Honor. E independientemente de los gustos de cada uno en materia de títulos de acción, la versión Xbox es mejor juego.
Ghost Recon 2 tiene una buena producción detrás, con un doblaje al castellano hecho por actores conocidos, y de hecho habituales de las películas de situaciones bélicas. Diversas secuencias cinemáticas se intercalan en cada uno de los niveles, contándonos cómo evoluciona el conflicto que, como será conocido por muchos por la polémica, tiene lugar en Corea del Norte (lo que ha provocado que el juego sea prohibido en Corea del Sur, y que Corea del Norte haya advertido de nuevo sobre el sufrimiento que experimentarán los americanos en caso de guerra por mucha propaganda de este tipo que hagan). Según parece, en la zona sur del país un general ha escapado al control del gobierno de Pyongyang y está haciendo cosas preocupantes, como por ejemplo destruir barcos de guerra americanos; los Recon son desplegados y colaborarán con el ejército de Corea del Sur para solucionar la situación.
Esto sirve como pretexto para las diferentes misiones del juego, donde nos internaremos poco a poco en territorio norcoreano siguiendo las máximas de la guerra moderna: comando especiales realizando actividades de subterfugio mientras la artillería bombardea desde lejos. Nosotros controlaremos a un equipo de cuatro soldados, aunque solo asumiremos el control directo de uno de ellos. Los otros tres están controlados por una inteligencia artificial a la que podemos dar órdenes un tanto limitadas (moverse, fuego de cobertura, granada y poco más) y que por defecto nos seguirá en fila india.
Las misiones, aunque aparentemente dispuestas en entornos abiertos, transcurren de forma lineal, siguiendo prácticamente un camino "del punto A al punto B" en el que tendremos que acabar con todos los soldados enemigos que se nos pongan por delante aparte de, en ocasiones tener que cumplir requisitos como defender a cierta unidad amiga o tener en cuenta los bombardeos. Para acabar con los enemigos será vital ponernos a cubierto, teniendo varias posiciones en las que estar (de pie, agachados o acostados) y movimientos de inclinarnos hacia un lado u otro para poder disparar estando casi a cubierto. En ocasiones, cuando el fuego enemigo sea tan intenso que nos haga imposible avanzar, podremos dar órdenes a nuestros soldados, como pedirles un fuego de cobertura o que lancen una granada, para así conseguir unos valiosos segundos de superioridad táctica frente a los enemigos.
Sin embargo, y como ya decíamos, la faceta "dar órdenes" del juego no tiene una gran riqueza y de hecho no es imprescindible. La mayoría de las situaciones podremos superarlas en solitario, en el sentido de no preocuparnos en dar órdenes a nuestros compañeros, dejando simplemente que nos sigan (cuando no se queden obturados por la combinación entre el escenario y la IA), lo cual convierte a la faceta táctica del juego no en una parte integrante de él sino en un añadido con nombre. Otro gran defecto del juego es la excesiva linealidad.
Por otra parte, un shooter táctico debería dejarnos una gran libertad a la hora de afrontar cada situación, pero este Ghost Recon 2 para PS2 limita excesivamente nuestros movimientos. El escenario está ahí, pero no lo podremos aprovechar ya que no es más que un envoltorio para un camino del punto A al B donde nos encontraremos esporádicamente con enemigos, y no podremos aprovechar un alto, o trepar ligeramente por una ladera, para obtener ventaja. El juego reduce la forma de hacer las cosas a una única, y eso en combinación con que los enemigos siempre estarán en el mismo lugar y se comportarán igual (excesiva predefinición de los niveles), convierte al modo campaña en muy poco rejugable, y además hace que, cuando nos maten, nos resulte más fácil el juego al saber ya de dónde saldrá ese soldado norcoreano que lanza la granada. Son estos fallos jugables graves que no solo enturbian la diversión sino que contradicen los preceptos que sigue el género del shooter táctico al que Ghost Recon 2 PS2 dice pertenecer. No ocurre esto con la versión Xbox.
Las opciones multijugador, eso sí, le dan cierta vida extra al juego – con matices. Resulta inexplicable la ausencia de un modo cooperativo, especialmente requerido en este tipo de juegos; tampoco hay un modo a pantalla partida, únicamente un modo online a través de ubi.com que cuenta con tres opciones de juego: Asalto (dos equipos, uno contra otro), donde uno de los dos equipos intentará llegar hasta el final de una serie de puntos de control mientras que el equipo defensor se lo intenta impedir; Supremacía, donde los equipos tendrán que capturar bases (que deberán estar conectadas entre ellas) hasta dominar todo un mapa; y último hombre, también por equipos, un Deathmatch donde los jugadores no se regeneran, ganando el equipo que acabe con el rival.
Gráficamente Ghost Recon 2 es diferente a la anterior entrega al no ser ya en primera persona, sino en una tercera persona muy cercana al soldado que controlamos. El modelado de los enemigos y de nuestros soldados es más que decente, al igual que la animación, y los escenarios son bastante realistas y están bien realizados pese a la linealidad a la hora de jugarlos que mencionamos antes. Las texturas, uno de los puntos calientes de todo juego de PS2, no pasan del aprobado, perdiendo mucha calidad aparente en las distancias cortas. El número de fotogramas por segundo también está en el aprobado raspado, con ralentizaciones bastante frecuentes, especialmente cuando el número de enemigos es alto.
El apartado sonoro es el mejor del juego gracias a un excelente doblaje, con actores que solemos oír en películas y series, y a una notable banda sonora (típico bélico-épico al estilo de La Roca) que sin embargo no siempre entra en el momento adecuado. Los efectos de sonido, por último, son variados y muy contundentes.
La versión PS2 de Ghost Recon 2 no cumple las expectativas y realmente pone en entredicho la actual política de Ubisoft de alternar sus desarrollos entre sus equipos buenos (Red Storm, Montreal, Francia) y no tan buenos (Shangai), que ya se pudo ver en las segundas partes exprés de Splinter Cell y Prince of Persia. En esta ocasión han ido un paso más allá y han hecho una versión de un juego muy buena (la de Xbox, hecha por Red Storm) y otra mediocre, la de PS2, donde se ha puesto en evidencia la poca experiencia de Ubi Soft Shangai en el género. Para los aficionados a lo militar es recomendable un alquiler, pero para aquel que busque una buena compra en PS2, tiene muchas mejores opciones tanto en la parte shooter (Killzone, Call of Duty: Finest Hour) como en la parte táctica (Socom 2, Conflict: Vietnam). Una decepción para todos los fans de la saga que solo pueden jugarla en PS2.