Análisis de Shrek 2 (PS2, PC, Game Boy Advance, GameCube, Xbox)

La respuesta a la pregunta de la entradilla es que naturalmente sí. Difícil sería hacer un juego tan decepcionante como el primer Shrek que, pese a venir de un estudio de fama como Digital Illusions o haber sido puesto como ejemplo de la potencia de Xbox por parte de Microsoft, decepcionó tanto como no lo hizo su película.

Esta segunda parte no tiene nada que ver con la primera, empezando por el equipo de desarrollo (esta vez es Luxoflux, creadores de True Crime), y presenta una mezcla de acción, plataformas y aventura, en la que controlaremos a Shrek, la princesa Fiona (ya en forma de Ogro), el burro Asno (decir el asno Asno sería redundante) y a otro personaje que irá cambiando dependiendo del nivel en el que nos encontremos. Este cuarto personaje variable será uno de los secundarios de la película, como El Gato con Botas, la Galleta de Jengibre, Caperucita Roja, Lobo Feroz o el Hada. Nosotros controlaremos a un solo personaje, mientras que los otros tres nos seguirán e intentarán colaborar en la medida de lo posible con nosotros. Esto da lugar a las típicas situaciones en las que tendremos que aprovechar las habilidades de uno de los integrantes del grupo, y trabajar en equipo para seguir avanzando.

La historia nos cuenta que los padres de la Princesa Fiona, que como es de esperar son reyes, se han enterado de que ésta se ha librado de su maldición y ha encontrado un prometido, por lo que se apresuran a convocar una gran celebración a la que invitan a nuestros amigos. Las cosas se tuercen cuando los regios padres se enteran de que el prometido no es otro que el feísimo y no tan aseado como gracioso ogro Shrek, y que además la forma definitiva de su hija es la de ogro. ¿Qué se puede esperar de unos padres capaces de encerrar a su hija en un torreón protegido por un dragón que a su vez es capaz de enamorarse de un burro? Obviamente, algo más que indirectas.

Esta es la historia que sigue la película, al igual que el juego, aunque en este último es un mero pretexto para hacernos recorrer niveles de ambientación adecuada a cada escenario de la historia, donde cómo hemos dicho tendremos que hacer que nuestros cuatro personajes colaboren (o al menos, aprovechar sus virtudes) para llegar a buen puerto y lograr la felicidad para Shrek y Fiona. Hay que apuntar dos detalles importantes del juego antes de continuar: el primero, que está fuertemente orientado al público infantil, resultando en que la dificultad es muy baja, y el segundo que el hecho de usar cuatro personajes permite modo multijugador a cuatro jugadores, con muchísima facilidad para unirse o abandonar una partida en curso.

Los niveles están bastante bien diseñados y sobretodo son amplios, aunque lineales, pero no llegan a darnos la sensación de estar caminando por un corredor como en otros títulos, al estilo Crash Bandicoot de PS One. Mezclan la resolución de puzzles fáciles con el combate ligero contra enemigos, siendo algunos miembros de nuestro equipo más aptos para enfrentarse a un tipo de enemigos en concreto, lo que le da cierta chicha a lo de cambiar de personaje. Eventualmente habrá también plataformas y la típica situación donde solo un miembro del grupo es capaz de hacer que el resto avance.

Estos niveles se intercalan con minijuegos llamados "Momentos Heroicos" que, al igual que pasa en muchos otros títulos, dan un toque de variedad y de diversión extra al juego. Quizás el más llamativo de todos sea aquel en el que controlamos al Dragón dirigido por Asno, aunque el de Fiona de cantar o el de Shrek cuando tiene que rescatar a Blancanieves también son muy divertidos. Terminando con el apartado jugable, hay que destacar la diversión del modo multijugador y criticar levemente al control del juego, en ocasiones un poco lento al responder, y a la IA de nuestros propios aliados, que a veces se atrancan en algunas partes del escenario.

Pero como suele ocurrir en los juegos basados en películas, hay bonificaciones para los jugadores más avanzados. En Shrek 2 se trata de las "capturas", 70 diferentes esparcidas por todo el juego. Consisten en fotos que nos sacan al completar uno de los miniobjetivos secundarios propuestos por la CPU en cada nivel. Con las capturas podrán abrirse hasta cinco niveles extra, y con su totalidad accederemos a contenido extra de la película Shrek 2.

A nivel gráfico no puede ponerse ninguna queja a los veteranos desarrolladores de Luxoflux. El modelado de los personajes tiene calidad y los escenarios grandes similitudes con los de la película, mientras que la animación es más que correcta y los enemigos presentan suficiente variedad y calidad, al igual que los escenarios, repletos de detalles. Las escenas cinemáticas son también correctas, aunque naturalmente palidecen ante la propia película a la que emulan. No es un juego que destaca por sus gráficos, pero estos no tienen ningún punto flaco. El apartado sonoro cuenta con buenos FX y músicas pegadizas que cambian con cada situación, y con doblaje en castellano para las voces, cosa que siempre es de agradecer.

En conclusión, está claro que no estamos ante el mejor juego de todos los tiempos ni un título revolucionario en su género, pero sí se trata de un título interesante, con una buena producción detrás y sin carencias o puntos flacos destacables. Quizás su mayor defecto sea un duración relativamente corta (10-15 horas), considerando además que el público al que va dirigido es el que tiene menor poder adquisitivo (aunque también el más propenso a recibir juegos con nombre resultón de regalo), pero no cabe duda de que el fan de Shrek que quiera tener un videojuego protagonizado por este carismático ogro y sus amigos parodia, quedará satisfecho con lo que Activision ofrece.