Análisis de World of Warplanes (PC)

Se ha hecho de rogar algo más de la cuenta, pero por fin los chicos de Wargaming tienen listo su juego de aviación tras el enorme éxito del que han gozado (y siguen teniendo) con World of Tanks, un título gratuito y muy interesante que supondrá una alternativa perfecta para quienes ya estén cansados de batallar a bordo de tanques o simplemente prefieran llevar la acción a los cielos en combates mucho más dinámicos y frenéticos.

Una guerra gratuita de altos vuelos

Al igual que el juego de tanques, nos encontramos ante un título de acción multijugador online de carácter competitivo ambientado entre los años 30 y 50, aunque con la evidente diferencia que en vez de poderosos carros de combate aquí manejaremos aviones pertenecientes a la época citada. El hecho de que se trate de un juego de aviación puede ser motivo más que suficiente para espantaros a muchos de vosotros, ya que son títulos que no suelen tener un manejo fácil y eso es algo que de cara al gran público suele echar a mucha gente para atrás, pero el caso de World of Warplanes es muy diferente.

En Wargaming han decidido apostar por una jugabilidad fácil y accesible que nos permita disfrutar en unas pocas partidas de una buena experiencia de juego, huyendo de la simulación para abrazar lo arcade. Gracias a esto nos ahorraremos sufrir una larga racha de partidas en las que seamos machacados una y otra vez sin compasión antes de empezar a pillarle el tacto al juego para poder defendernos, algo que es de agradecer. Eso sí, tenemos que mencionar que los controles nos han parecido un poco imprecisos, ya que no responden todo lo bien que deberían ni con ratón y teclado ni con mando, algo que sin duda podría haberse mejorado y que ya veníamos advirtiendo tras el largo periodo que el título se ha pasado en fase de beta.

Por otro lado, esta simplicidad deriva en una profundidad jugable bastante cuestionable, ya que no nos llevará demasiado tiempo dominar cada tipo de caza. Esto se debe a que el control de uno a otro es prácticamente el mismo y solo notaremos diferencias en cosas como la maniobrabilidad, su velocidad, su potencia de fuego o su aguante. Además, cada uno de ellos está destinado a cumplir diversos roles en la batalla, por lo que nos convendrá saber al menos qué se esperará de nosotros cuando comience la partida, de forma que podamos sacarle el máximo provecho a las posibilidades de nuestro avión.

Algo que sí que nos ha gustado mucho es el ritmo de juego que tiene. Olvidaros de pasaros mucho tiempo recorriendo un enorme mapa sin que ocurra nada. Aquí el tamaño de los campos de batalla es lo suficientemente grande como para permitir intensas y veloces dogfights, pero al mismo tiempo son lo suficientemente pequeños como para concentrar la acción y provocar que no paremos de encontrarnos enemigos, por lo que apenas tendremos tiempo para relajarnos, ya que cuando creamos estar a salvo tras haber acabado con un enemigo, lo más probable será que tengamos ya a otro pegado a la cola de nuestra nave.

En cuanto a modos de juego no esperéis encontraros demasiado donde escoger, ya que simplemente tendréis un tutorial para aprender lo básico, un modo entrenamiento con bots por si queremos practicar sin la constante presión de los jugadores humanos y el modo batalla, donde participaremos en partidas de 15 vs 15 en las que podremos ganar derribando a todos los aviones del equipo contrario (aquí no existen las reapariciones hasta que comienza la siguiente ronda) o destruyendo sus bases.

Por otro lado, entre batalla y batalla podremos invertir los puntos de experiencia que ganemos en mejorar nuestros árboles tecnológicos, comprar piezas para nuestros aviones y personalizar sus equipos y características a nuestro gusto, e incluso desbloquear algunas de las más de 100 naves que incluye el título. Los aviones están divididos por niveles según lo buenos o malos que sean, lo que decidirá los emparejamientos. De esta forma, si tenemos un avión de nivel 3 muy mala suerte tendremos que tener para que nos emparejen con un jugador que use otro de nivel 8, de manera que las partidas suelen mantener un cierto equilibrio.

Tal y como podréis imaginar, al ser un juego de carácter gratuito, progresar sin gastar un céntimo es algo que nos llevará una ingente cantidad de tiempo y de partidas jugadas, por lo que la sensación de avance queda muy dispersa. Siempre podréis atajar gastando dinero real en caso de que no tengáis tanto tiempo, aunque al menos conviene señalar que no existe ninguna clase de ventaja de los jugadores de pago frente a los gratuitos más allá del tiempo invertido por cada uno para conseguir cosas, algo que siempre es de agradecer y que evita problemas de equilibrio.

A nivel gráfico nos encontramos ante un título muy resultón con unos escenarios bien modelados y unas físicas más que conseguidas. Los efectos de iluminación tampoco están nada mal y la representación que se ha realizado de las nubes es sencillamente genial, permitiéndonos usarlas como escondite para escapar de nuestros perseguidores o para tender emboscadas. Aunque sin duda la palma se la llevan los aviones, los cuales han sido recreados con mucho mimo y cuidado, lo que les permite lucir perfectamente.

Eso sí, no esperéis un juego que vaya a exprimir a los equipos más potentes, porque no es el caso a pesar de lucir un poco mejor que la media de títulos gratuitos. A cambio lo que sí que ofrece es una optimización bastante buena, por lo que la acción siempre transcurre de forma fluida y sin problemas en una amplia gama de equipos gracias a sus extensas opciones de configuración de vídeo.

El sonido también mantiene un buen nivel, al menos en lo que a los efectos se refiere, ya que la banda sonora no es nada del otro mundo y tardaremos bastante poco en bajarle el volumen. Pero tal y como decíamos, resulta toda una gozada escuchar cómo el motor de cada uno de los aviones suena diferente, ya que están grabados directamente de sus homónimos reales, lo que ayuda mucho a aumentar el realismo y la inmersión. Además, los sonidos de las balas al impactar, de los disparos y de las explosiones también resultan muy contundentes.

Conclusiones

World of Warplanes es un juego muy entretenido que sabrá ofrecernos un buen puñado de horas de diversión, especialmente si jugamos con amigos con los que organizarnos para batallar. Se queda lejos de ser perfecto por culpa de la imprecisión de sus controles y de lo tremendamente simple que acaba volviéndose a medio y largo plazo, pero sin lugar a dudas se trata de un título que a poco que os interese el género no deberíais dudar en probar, ya que sabe ofrecer lo que promete: acción rápida e intensa de altos vuelos.