Análisis We Were Here Expeditions: The FriendShip, la divertida saga de aventuras cooperativas que deberías conocer (PC, Xbox Series X/S, Xbox One, PS5, PS4)
Poco a poco la saga We Were Here se ha ido haciendo un nombre en el género de los puzles cooperativos, de modo que a día de hoy puedes recomendar casi cualquier entrega a quien sea que te pregunte por un buen juego de este estilo y no vas a equivocarte. Para darle una inyección de popularidad a su fórmula, el estudio Total Mayhem Games ha apostado todo al rojo con una nueva entrega más accesible y con ciertas diferencias clave con el resto de juegos, aunque manteniendo las mismas estructuras que les han llevado hasta aquí.
Hablamos de We Were Here Expeditions: The FriendShip, un nuevo juego que ya está disponible de forma gratuita (por tiempo limitado, eso sí) en PlayStation, Xbox y PC. ¿Por qué decimos que es diferente al resto de entregas de la saga? No sólo porque inaugure una nueva serie dentro de la franquicia, separada de la historia que se cuenta en los cuatro juegos anteriores, sino porque su tamaño es más pequeño (dura un par de horas), su enfoque más directo y su precio, cuando deje de estar disponible gratis, también es considerablemente menor (3,99 € en España).
¿Qué hay de nuevo en We Were Here Expeditions: The FriendShip?
A priori nada ha cambiado entre esta nueva entrega y We Were Here Forever, el último capítulo de la serie que se estrenó en mayo del año pasado: la jugabilidad es prácticamente idéntica, con una perspectiva en primera persona, gráficos cercanos al low-poly y una interacción concreta con el entorno, además de las mecánicas esenciales de encender una antorcha (que sirve para ver y dejar que te vea tu compañero), realizar gestos y activar el walkie-talkie para hablar con la otra persona.
Sin embargo, más allá de esas similitudes sí que hay diferencias palpables: ahora el juego no apuesta por una narrativa tan intrincada como lo que veníamos viendo hasta ahora (el lore de esta saga es sorprendentemente profundo), sino que abre una nueva serie de capítulos más pequeños y contenidos, centrados en la propia cooperación entre jugadores. We Were Here Expedition: The FriendShip casi funciona como una carta de presentación de esta nueva estructura, y en las dos horas que dura (aproximadamente) deja claro que es una fórmula que se puede adaptar, replantear y aprovechar de muchas maneras posibles.
Cambiamos el castillo por un parque de atracciones abandonado
Aquí volvemos a ponernos en la piel de dos exploradores perdidos en un escenario misterioso, un lugar en el que no tardan en separarse: cada uno controla a uno de estos personajes y tiene que comunicarse con el otro para superar los rompecabezas. Sólo podremos solucionar los puzles si cooperamos y nos comunicamos, ya que un jugador ve las piezas y el otro la solución. Hablar por el walkie-talkie para dar indicaciones sigue propiciando momentos muy divertidos y de genuina colaboración, grandes virtudes que salen a relucir tanto cuando jugamos con alguien conocido como cuando lo hacemos con desconocidos (aunque es bastante difícil encontrar partida).
La principal diferencia de esta entrega con las del resto de la saga We Were Here reside en que aquí nos enfrentamos a un desafío que se presenta como tal, como una prueba ambientada en un parque de atracciones abandonado. Si antes los puzles tenían que estar disimulados en los escenarios (algo que a duras penas se conseguía, dicho sea de paso), ahora pueden dejar eso a un lado y mostrarse en forma de juegos de feria, atracciones e incluso puzles tradicionales directamente. Este tono más artificial le sienta bastante bien a la franquicia, e incluso le permite introducir novedades como un sistema de puntuación que valora al final del juego el grado de amistad que tenemos con el otro jugador.
Si algo funciona, ¿para qué cambiarlo?
Los puzles, eso sí, siguen siendo igual de básicos que en anteriores juegos. No nos malinterpretéis, no son puzles malos porque cumplen con su cometido de ofrecer un reto compartido. Está claro que no serían buenos rompecabezas si jugásemos en solitario, del mismo modo que It Takes Two no sería tan buen juego de aventuras como lo es por su naturaleza cooperativa. We Were Here Expeditions: The FriendShip pone su parte, unos puzles más o menos sencillitos divididos en dos mitades que sólo se entienden mediante la cooperación, y a nosotros nos toca poner la nuestra para que el conjunto quede completo.
Realmente, casi todas las novedades entre esta nueva entrega y los anteriores juegos de la saga empiezan y terminan ahí: a nivel gráfico es casi idéntico al último juego, la atmósfera es similar y los controles son exactamente iguales. Sigue estando en inglés con subtítulos y textos en castellano, ofrece la posibilidad de jugar con amigos o con desconocidos, independientemente de la plataforma (el cross-play se puede desactivar) y tiene opciones para jugar con mando o con teclado y ratón. En este tipo de aspectos es idéntico al último juego, por lo que la escala reducida y su mayor accesibilidad son las principales diferencias.
Conclusiones
En su apuesta por abrirse a nuevas audiencias, We Were Here Expeditions: The FriendShip gana ciertas cosas y pierde otras tantas: deja atrás una narrativa más rica y una duración más extensa, algo que en realidad le viene bien para apostar por unos puzles más directos (que no necesitan disimular que están integrados en el mundo) y una experiencia más casual, rápida e idónea para el juego compartido. Esta nueva entrega parece un aperitivo, una carta de presentación de lo que le depara al futuro a la saga de Total Mayhem Games, con aventuras más cortas a precio reducido que le saquen partido a las verdaderas virtudes de esta fórmula: una divertida colaboración para resolver puzles no muy enrevesados, pero con el desafío justo para propiciar momentos simpáticos. Por lo pronto han conseguido que esta entrega sea también fácil de recomendar para quienes busquen experiencias de este tipo, que no es poco.
Hemos realizado este análisis en PC con un código para Steam proporcionado por Best Vision PR.