Análisis de Wall Street Trader 2001 (PC)

El mercado de los simuladores de gestion o management simulators como dicen por ahí, siempre ha sido un mercado poco tratado debido a la complejidad que supone crear un titulo que consiga un buen nivel de realismo sin caer en el aburrimiento y pesadez que se asocia por naturaleza a este tipo de tareas. Pese a esta dificultad de hacer que la gestión de una empresa o similar resulte divertida numerosas compañías han intentado en algún que otro momento introducir ideas frescas que con mayor o menor acierto en pocas ocasiones han conseguido su objetivo. El poco acierto de la mayoría de estos títulos han hecho que pocas compañías salvo honrosas excepciones como Maxis se hayan atrevido a entrar de lleno en este mercado, e incluso en el caso de estas han decidido dejar apartadas las simulaciones mas complejas como las de bolsa o gestión empresarial para tratar temas mas entretenidos como la gestión de una ciudad o de una compañía de transportes. Pero en este complicado mercado una compañía parece que se ha propuesto hacer cambiar esto, Montecristo es el nombre de la osada compañía que pretende poner patas arriba el genero con toda una serie de títulos que abarcan todo tipo de simulaciones de gestión entre las que destaca el simulador de bolsa por ser posiblemente el tema mas difícil de tratar del genero. Para esta tarea Montecristo ha diseñado su serie Wallstreet Trader que como empieza a ser tradición acaba de llegar este año a su versión Wallstreet Trader 2001 aportando nuevas ideas para tratar de mejorar su ultimo titulo. Una vez en marcha, para los que acostumbramos empezar a jugar los juegos sin leer el manual, nos llevaremos un buen varapalo debido a la aparente complejidad del titulo fruto no solo de el tema tratado sino del inicialmente confuso interface que nos obligara como mínimo a seguir religiosamente el tutorial para como mínimo familiarizarnos con donde están las cosas ya que al estar todo a base de iconos nos costara al principio hacernos con el control. Una vez superado el primer obstáculo nos encontramos con lo que podríamos denominar como una compleja simulación maquillada para parecer un titulo sencillo y ameno de jugar. Simpáticos personajes nos acompañaran en nuestra tarea para darle un toque de humor y humanidad a este titulo, pero nada mas lejos de la realidad. Bajo esos majetes tipejos que trataran de hacernos mas fácil nuestras peripecias en la bolsa, se encuentra la mas compleja simulación bursátil del mercado que lleva la compra y venta de acciones mas allá de lo que lo han hecho otros títulos consiguiendo un mayor nivel de realismo que inevitablemente arrastra a este titulo a la temida pesadez que caracteriza a la casi totalidad de las simulaciones bursátiles. A la hora de ponernos en acción, nos daremos cuenta de que las cosas no son tan fáciles como parecen, y que en el momento en el que decidimos comprar una acción, esta tarea no es instantánea sino que solo ha comenzado un proceso en el que solo podrás comprar la acción si hay alguien dispuesto a venderla. Para esta tarea contaremos con la ayuda de nuestros agentes de bolsa que se encargaran de luchar con uñas y dientes para ejecutar nuestras operaciones de venta y compra de acciones para lo cual cada agente estará mas o menos dotado de forma que la elección de un buen agente de bolsa será decisiva a la hora de ver nuestras operaciones ejecutadas en el menor plazo de tiempo. Pero si esto parece que se complica un poco, la complejidad no ha hecho mas que empezar porque nuestros agentes sufrirán los efectos de estrés e incluso podrán ponerse enfermos y dejarnos tirado sin posibilidad de efectuar nuestras operaciones. ¿Sencillo? No, aun mas difícil... contaremos con tres bolsas para operar: Nueva York, Londres y Tokyo y por supuesto fruto de la diferencia horaria entre las tres ciudades cuando cierra una bolsa abre otra, no dejándonos un solo minuto de descanso. Nos veremos obligados a machacar a nuestros tres agentes de bolsa, uno por ciudad, para poder conseguir nuestros objetivos. ¿Aun te parece sencillo? Pues hay mas... las acciones representan el gran flujo clásico de dinero en los mercados bursátiles pero no es único, y Montecristo ha querido introducir dos nuevos conceptos de operaciones, la compraventa de opciones y obligaciones que representan no solo una mayor dificultad de uso sino que para los no iniciados supone la obligación de un buen repaso al manual que en muchas ocasiones se nos antoja inútil por la dificultad que este tipo de operaciones entraña. Se acabo el simple precio de la acción, ahora tendremos que vigilar plazos de ejecución, apalancamientos, activos subyacentes y una serie de conceptos nuevos que transforman a este titulo en un juego recomendado solo para gente que ya conozca los entresijos de la bolsa. La complejidad de la que hemos hablado hacen peligrar la jugabilidad del titulo volviéndonos locos teniendo que realizar complejas operaciones un tres mercados bursátiles que no nos dan descanso sin embargo una vez puestos manos a la obra veremos como una vez comprados algunos valores contemplamos impasibles como los precios suben y bajan en puro caos y puesto que con este juego no nos haremos ricos pronto nos dará exactamente igual ganar que perder 30 millones de dólares a golpe de ratón. Para tratar de hacer mas interesante esto, se nos proponen una serie de escenarios en los que tendremos que triunfar dominando los mercados de la economía de la empresas punto com, superar la crisis de las discográficas por el mp3 y una serie de situaciones mas que suponen sin duda el punto fuerte de este juego pero que sin embargo cuando pasemos de un escenario a otro nos daremos cuenta que lo único que ha cambiado han sido las acciones que podremos negociar. Una lastima además que hayan sido limitadas a unas pocas diferentes por mercado ya que aunque a priori facilite las cosas, se nos antoja algo aburrido tener que elegir siempre entre las poquísimas disponibles en cada escenario. En cuanto a los apartados técnicos del juego, los gráficos caricaturizados se nos antojan simplones y ni expresan lo mas mínimo la naturaleza real del juego ni consiguen maquillar la excesiva complejidad. Lo mejor sin duda son los videos de introducción que nos situaran en cada escenario mediante una detallada y fiel descripción de la situación que cuenta por encima la situación del mercado con una aproximación muy buena a los escenarios económicos reales pero que una vez entrados en materia el caos del mercado hará completamente inútil cualquier información o consejo que halamos podido tomar de los videos.

En cuanto al modo multijugador mejor ni intentarlo. Si conseguís la dificilísima tarea de encontrar a un par de amigos dispuestos al sacrificio os daréis cuenta de que todo va igual que en el modo a un solo jugador contando únicamente con el aliciente de tener que hacerte rico antes que los demás, tarea que se antoja tan pesada que mejor sal a tomarte algo con ellos que va a ser del todo mas productivo.

En definitiva podemos decir que estamos ante un difícil titulo que no ha sabido compaginar el realismo con la diversión dejando nuevamente la asignatura pendiente de los simuladores bursátiles, haciendo de este uno de esos géneros en el que parece que el tiempo no pasa pudiendo encontrar juegos mucho mas antiguos con una mayor calidad, que el mal hacer de las compañias ha hecho parecer que grandes clásicos no hayan envejecido lo mas mínimo. Así títulos como el gran clásico Capitalism aun conservan su condición de lideres pero esperemos que la gran insistencia de Montecristo por el genero haga que en un futuro consigan apuntillarlo con un titulo que realmente consiga la difícil misión. En definitiva un juego solo acto para incondicionales con conocimientos previos del funcionamiento real de la bolsa o bien con muchísimas ganas de aprender, aunque llegados a este nivel muchos se darán cuenta que lo realmente atractivo de la bolsa es jugarse dinero, cosa que no nos ofrece ningún titulo. Un titulo muy caótico.