Análisis Millennia, un imperfecto juego estilo Civilization que pese a sus fallos te robará horas de vida (PC)

En Vandal hemos hablado mucho del resurgir de la estrategia durante los últimos años, un género que siempre ha sido clave en el mundo de los videojuegos en general y, sobre todo, entre los jugadores de PC, plataforma en la que han surgido sagas tan icónicas como Starcraft, Age of Empires, Company of Heroes o... Civilization.

Precisamente hoy vamos a hablaros de un título de estrategia 4X que quiere recoger el testigo de la saga de Sid Meier y darle un giro interesante. Este título es Millennia y en Vandal hemos jugado un buen puñado de horas y, durante las próximas líneas os vamos a contar cómo nos ha atrapado tan bien como lo hace cualquier título de este tipo y cómo nos han interesado sus nuevas ideas... que sin embargo no acaban de ejecutarse todo lo bien que deberían y que por este motivo impiden brillar a una buena propuesta.

Todos los elementos que funcionan de un juego de estrategia 4X de civilizaciones

Comencemos por la base, Millennia es un juego de estrategia por turnos 4X en el que tenemos que escoger una civilización y hacerla crecer y progresar durante, en este caso, la friolera de 10.000 años, viendo su evolución, escogiendo por qué vía progresar y rivalizar con otras civilizaciones, ¿seremos una nación equilibrada? ¿Preferimos un enfoque bélico?¿Preferimos apostar por el arte o la ciencia?

Todos los "parámetros" básicos o clásicos de un título estilo Civilization están ahí. La exploración inicial, ir moviendo nuestras unidades por casillas hexagonales, buscar un sitio donde construir un nuevo asentamiento que podría convertirse en una gran ciudad, crear nuevas unidades, hacer progresar nuestra capital, ampliar nuestras fronteras, conocer a otras civilizaciones, luchar y avanzar tecnológicamente para evolucionar nuestra civilización y convertirnos en los más poderosos, influyentes o sabios del planeta, todo ello mientras pasan los minutos, las horas y nos mantenemos pegados a la pantalla del monitor jugando "un turno más" que se convierte en eterno ya que, a nivel de base, Millenia funciona muy bien y es tan adictivo como la saga en la que se inspira o con la que quiere rivalizar.

Dos ideas muy interesantes con las que puede evolucionar el género

Lo más destacable de Millennia más allá de las mecánicas clásicas de los títulos de este tipo son dos buenas ideas que pueden hacer evolucionar el género y que, de hecho, creemos que van a ayudar a hacerlo en el futuro.

Quizás el más diferenciador lo encontramos en las diferentes Eras y en la posibilidad de tener Eras alternativas a la historia como la Era de la Peste que nos pondrá en aprietos al inicio de la partida, o la Edad del Éter que da un giro steampunk a Millennia. Para lograr acceder a estas Eras tendremos que cumplir distintos objetivos y las posibilidades que nos dan para "cambiar" la historia y para tener distintos futuros alternativos es de lo más interesante, además que le dan un toque de frescor a cada nueva partida lo que aumenta el factor de rejugabilidad de Millennia, algo que siempre es bienvenido.

Otro de los giros acertados lo encontramos en lo que a la gestión de las ciudades se refiere y a los edificios y, más bien las mejoras que podemos construir alrededor de ellas que son clave para la evolución de la misma y, a medio y largo plazo durante la partida, lo serán para aumentar nuestra recaudación o el comercio internacional. Cómo invertir en estas mejoras y cómo aprovechar el terreno alrededor de las ciudades será clave, e incluso podremos crear cadenas de suministro creando, por ejemplo, una mina, un herrero y una tienda de armas para explotar al máximo nuestros recursos sin necesidad de comprar materiales al exterior. Cómo se comportan estas mejoras, las posibilidades y su influencia son palpables y es algo bastante interesante y muy a tener en cuenta.

Las líneas que le alejan de la grandeza

Por lo tanto, por ahora tenemos un juego de estrategia 4X "estilo Civilization" tan adictivo como los títulos de Sid Meiers y además con algunas buenas ideas como las dos que os hemos citado anteriormente que le dan un giro interesante a la fórmula y que, desde luego, van a asentar la evolución del género en el futuro pero, por desgracia, no todo son buenas noticias para Millennia, que cuenta con algunos errores que lo alejan de la grandeza.

El primero y puede que el más profundo es una interfaz incómoda, con menús que no están bien diseñados y que no son lo suficientemente claros o accesibles que deberían y que pueden frustrar, sobre todo, a los jugadores más casuales del género. Es el punto quizás más complicado de gestionar porque requiere un lavado de cara bastante importante para Millennia que no sabemos si llegará en el futuro.

Por otro lado, la idea de las Eras es interesante pero es desesperante cómo, en la mayoría de las ocasiones, no dependerá de nosotros elegir la evolución de las mismas porque el resto de civilizaciones se nos adelanta. Esto se debe a que, sin duda, la dificultad de Millennia no está todo lo bien ajustada que debería e incluso en su modo más fácil el resto de civilizaciones serán capaces de ponernos en apuros a nivel bélico o de adelantarnos a nivel tecnológico. Además, en la mayoría de las ocasiones las civilizaciones rivales escogen siempre el mismo camino a nivel de evolución, lo que hace que, además de no poder llevar el ritmo de las eras en la mayoría de los casos, las partidas se puedan volver repetitivas, algo que precisamente quería evitar el sistema de eras.

Un título bien cuidado en lo artístico

Por último, a nivel artístico Millennia es un título muy bien trabajado, con un buen diseño de arte de las unidades, los dibujos que dan paso a las distintas Eras o la música que nos va acompañando durante toda la partida y que es bastante agradable.

Además, a nivel técnico es un título agradable si hablamos de gráficos y bien equilibrado para funcionar en una gran variedad de equipos, aunque con una tasa de imágenes por segundo un tanto baja. Evidentemente con nuestro PC de sobremesa equipado con gráfica NVIDIA GeForce RTX 4080 junto a un procesador i9-11900K, 64 GB de RAM, almacenamiento SSD y Windows 11 no hemos tenido problema para jugarlo a 1440p y con gráficos al máximo a 60 FPS y aunque es una tasa de imágenes por segundo que nos sirve más que de sobra para un título por turnos de este tipo, hubiéramos agradecido un mejor rendimiento con un PC de gama alta o la inclusión de tecnologías como DLSS, FSR o XeSS para mejorar aún más si cabe este rendimiento. Eso sí, curiosamente aunque con una gráfica tan potente no hemos pasado de las 60 imágenes por segundo, con un portátil con una modesta gráfica integrada Intel Iris Xe también hemos podido jugar a unos 30 FPS con gráficos al mínimo.

Conclusiones

Si sois grandes amantes de la estrategia en cualquiera de sus vertientes y del "estilo Civilizacion" esta nueva apuesta de Paradox con Millennia estamos seguros de que os va a gustar. Tiene buenas ideas y también fallos que lo alejan de la excelencia, pero sigue siendo tremendamente adictivo y divertido a pesar de sus fallos. Con el tiempo, puede que quizás en unos meses mediante parches que arreglen sus errores o quizás con una nueva entrega, Millennia puede convertirse en un rival interesantísimo para el rey de este particular subgénero, algo que no logra por ahora pero que, al menos al que os escribe, no le impide jugar un par de turnos más tras acabar este texto.

*Hemos realizado el análisis de Millennia gracias a un código proporcionado por Paradox.