Análisis Football Manager 2021, gestión total dentro y fuera del césped (PC)
Sports Interactive y SEGA lo tenían muy difícil con Football Manager 2021. 2020 ha sido año atípico, difícil para muchas personas, y bastante particular y complejo para el ámbito deportivo. La pandemia de coronavirus ha causado un terremoto sin precedentes en las estructuras económicas, sanitarias, sociales y políticas de multitud de países, y las principales ligas y competiciones futbolísticas también han sentido el seísmo. El balón dejó de rodar en casi todo el planeta durante los primeros meses, y no ha sido hasta bien entrado el verano cuando ha comenzado a recuperar el tono, con la vuelta de ligas, torneos y copas nacionales e internacionales. Si bien los estadios siguen vacíos, y las perspectiva de una recuperación real en términos económicos parecen distantes y enfocadas para los próximos años venideros, el fútbol ha seguido fiel a su cita jornada tras jornada en múltiples territorios, siendo retransmitido por las principales cadenas de pago sin interrupción, buscando enfocarse en vender una especie de intento de normalidad en su regreso a los campos.
Football Manager 2021 llega así a nosotros con una de sus ediciones más completas, perfiladas y concisas de las recientemente publicadas, buscando de nuevo batir récords de millones de horas acumuladas en Steam, e intentando ofrecer nuevas dosis de ilusión a los amantes del balompié. ¿Preparados para llevar al equipo de vuestros amores a lo más alto?
Gestos y expresiones: interacción y realismo
Desde hace unos años, Football Manager se ha ido encaminando a lo que creemos es una experiencia dinámica y realista, muy retroalimentada por nuestras propias acciones. El entrenador de un equipo de fútbol es, por norma general, el corazón y la mente del club. Sobre él recaen cientos de responsabilidades, y sus decisiones, salvando las distancias, van a misa -al menos, cuando se tiene éxito y una trayectoria casi impecable-. Como ya os comentábamos en nuestras impresiones hace unas semanas con una versión preliminar del videojuego, en esta edición se ha optado renovar la manera en la que interactuamos con nuestro equipo técnico, con nuestros jugadores o incluso con los aficionados y periodistas. Cada decisión, cada elemento el cual nos atrevamos a ajustar, elegir o seleccionar, tendrá una serie de opciones realistas y de detalles con cierta profundidad. Ahora tenemos más control que nunca sobre el éxito de nuestro equipo dentro y fuera del césped gracias a la incorporación de nuevos sistemas de juego, un mayor nivel de profundidad en los análisis de los especialistas que nos acompañan y una ingente cantidad recursos adicionales a nuestra disposición.
¿Cómo se ha logrado esto? Digamos que, durante décadas, los videojuegos de gestión han sido especialmente pasivos, lentos en su progresión, y muy poco creíbles. Éramos un ser omnisciente, capaz de hacer de todo y llegar a tiempo en todo momento, eligiendo sí o no, respondiendo con centenares de respuestas de forma mecánica o automática o incluso pulsando ‘siguiente’ de forma compulsiva y poco responsable. Seamos honestos, todos hemos llegado a desconectar de esta experiencia como entrenadores virtuales.
En Football Manager 2021 se ha optado por volver al punto de origen con una serie de ajustes, muy pequeños y menores en un principio, pero que revolucionan la estructura de los métodos de comunicación con respecto a versiones anteriores del juego. La guía es la misma, no esperéis algo diferente, pero los efectos y la manera en la que afrontamos estas situaciones de diálogo es completamente distinta a la vista en los últimos años.
La manera en la que nos comunicamos con nuestros jugadores, con los medios de comunicación, con el presidente de nuestro club o incluso con los miembros del staff técnico es radicalmente diferente. Todo es más realista y creíble gracias a los llamados gestos, una opción interesante y muy bien traída, que nos permite amplificar, enfatizar y reducir el impacto de nuestras palabras y comentarios. El contexto que crea la incorporación de una especie de emoji con nuestra figura haciendo gestos -señalar con el dedo, poner las manos en la cadera, subir los brazos, etc- es muy curioso, nos ha encantado. Por primera vez en la saga se nos permite expresar nuestro lenguaje corporal en el juego, generando una idea rolera que permite que todo quede muchísimo más claro, y equiparando la experiencia a lo que sentiríamos si estuviésemos jugando a una especie de aventura conversacional o narrativa con un montón de elecciones a nuestra disposición. ¿Vemos que Sergio Ramos está triste porque no se considera valorado en la plantilla? Nos dirigimos hacia él con una actitud asertiva y positiva, hablamos dándole ánimos y con gestos enfáticos alegres y podemos cambiar su estado anímico de cara al partido y al propio desempeño de su labor en el club. Otra novedad en relación a esto, y que tiene cierta lógica debido a cómo se desarrolla el fútbol moderno y su interacción con los medios de comunicación y a nivel interno, son los chats rápidos, unas conversaciones breves e informales sobre una variedad de temas que no requieren una reunión completa.
Se acaba la formalidad imperante en otras versiones, algo que agradecemos, y se aligera el tono de muchas reuniones, la gran mayoría intrascendentes, que nos causaban un gran tedio al largo plazo. Estos chats rápidos o conversaciones informales podrán ser con con jugadores de nuestro club de cara a algún tema en concreto de relativa importancia, debates de forma remota con jugadores cedidos, entrenadores rivales y periodistas, que podrán tener un acceso directo a nosotros de forma telemática sin tener que pasar por la clásica rueda de prensa. No os preocupéis, pues para que todo sea fácil de ver y comprender, Sports Interactive ha cambiado sutilmente la interfaz del videojuego en estos temas, la ha hecho más agradable, con una distribución lógica y comprensible.
Hacia el día del partido: revisando los momentos claves antes del encuentro
Football Manager siempre ha sido criticado como videojuego por su falta de impacto en lo relativo a la progresión o el peso de los partidos en una temporada regular. Podíamos tomarnos igual un partido amistoso que uno de liga o UEFA Champions League, y eso siempre ha sido un error. Ahora el flujo de las jornadas, el camino que nos lleva a cada partido, desde la preparación previa al partido hasta las secuelas que dejan nuestros actos, decisiones y actitudes tras el pitido final, se ha revisado por completo. Sports Interactive ha añadido un montón de ingredientes que completan el menú de su oferta de gestión, convirtiendo al título en algo más orgánico, trascendente y divertido. Por ejemplo, antes de llegar al vestuario el día de partido, podemos hacer algunos cambios de última hora, tal vez por inspiración, duda o miedo, permitiéndonos ajustar la táctica en el último minuto.
Como ocurre en el fútbol moderno, durante esta reunión previa al partido, nuestro personal técnico y nuestro segundo entrenador nos ofrecerá un pormenorizado análisis con datos y estadísticas que nos podría ayudar a perfilar esa posición dudosa, ese estilo en el que no confiamos del todo o esa estrategia que puede ser vital de cara a la victoria ante un rival especialmente duro. Puede ser una cuestión baladí, pero tomarnos con seriedad y paciencia estos momentos antes de saltar al terreno de juego, suponen una diferencia clara entre victoria y la derrota en el campo.
¿Cambiamos lo que hemos entrenado por algo más arriesgado en reacción a la alineación del conjunto rival? ¿Podremos cambiar la posición de ese jugador que era clave en nuestro para que presione o intente parar a un Messi o un Cristiano Ronaldo? Está todo en nuestra mano, pero no podemos olvidar que Football Manager es un videojuego que premia el esfuerzo diario, el entrenamiento y la construcción sólida de unas bases y unos objetivos desde la pretemporada, por lo que estos cambios de última hora son una ayuda, aunque no esperéis milagros firmados por el mismísimo Diego Armando Maradona.
Más espectáculo, mayor realismo en los partidos y datos para aburrir
Es una frase que repetimos casi como si fuera algún tipo de mantra año tras año en nuestros análisis, pero sí, Football Manager 2021 se ve mejor que su edición del año pasado. Sports Interactive y SEGA llevan unas cuantas ediciones prometiendo un mayor sentido del espectáculo, y han estado retocando aquí y allá su motor gráfico. En esta entrega nos topamos con una sensible mejora en la iluminación, las sombras y las texturas de los escenarios y jugadores, así como un nuevo tipo de modelado que gana complejidad geométrica en algunos estadios que nos ha parecido notoria teniendo en cuenta que hablamos de un simulador de gestión y no de un FIFA o un PES. Eso sí, lo cumbre de esta revolución en pos del espectáculo es la realización dinámica de las retransmisiones, más orgánica y mucho menos artificiosa, un aspecto que se nota especialmente en las previas de los partidos, con los equipos saltando al terreno de juego, haciendo corros antes del inicio del encuentro. Hay unos cuantos ángulos de cámara completamente nuevos, muy curiosos, que pueden ayudarnos a saber qué falla en nuestra disposición táctica o los motivos por los que somos un coladero en defensa.
En cualquier caso, una vez el balón ruede tenemos una mejor vista gracias al considerable ajuste de la interfaz de usuario, un elemento que pone la lupa en la acción en el campo, presentándonos con mayor inteligencia qué está ocurriendo. Pero, aunque parezca una tontería, nos ha encantado la gran atmósfera que se llega a generar en algunos partidos, con el público rugiendo y moviéndose, con cámaras a pie de campo, seguridad en las bocanas de los aledaños y vestuarios o con los entrenadores moviéndose de un lado a otro de su zona. Es más, hasta hemos llegado a ver a los jugadores calentando en la banda, un detalle que nos ha parecido muy curioso y que nos ha reconciliado un poco con la recreación 3D de los partidos de la saga. En este ámbito, queremos aplaudir el sentimiento de final de temporada, una nueva opción que han incluido los desarrolladores y que nos ofrece la posibilidad de sentir, por primera vez en Football Manager que hemos logrado algo, que hemos conseguido una sufrida victoria o los objetivos que nos habíamos propuesto en la temporada. ¿Cómo? Bueno, ahora podemos disfrutar, celebrar y reflexionar sobre nuestros logros, con celebraciones a la hora de la entrega de los trofeos, incluyendo podios, cañones de confeti y ese importante instante relacionado con el alzamiento de la copa que tanto trabajo nos ha costado alcanzar.
Terminar una temporada en versiones anteriores del juego tenía cierta recompensa, se valoraba muy bien nuestro progreso, nuestros éxitos o el haber alcanzado los objetivos marcados por nosotros mismos, la directiva o incluso los aficionados ligados al histórico legado del club. En cualquier caso, bueno, se valoraba bien, pero nada más allá de una palmadita en el hombro y a continuar con la siguiente. Los cambios producidos en el final de temporada, en el que podemos disfrutar de nuestros éxitos como entrenador, nos han gustado especialmente, con momentos que nos permitirán revivir nuestra temporada y deleitándonos con los triunfos, así como pudiendo elaborar relaciones e interacciones con los fans y los medios de comunicación, reflexionando sobre lo que hemos logrado, lo que podemos conseguir y lo que podemos perder si no somos capaces de plantear bien la próxima temporada. Y aquí entran los análisis, los datos que manejamos y nuestras decisiones.
¿Puede reducirse el fútbol o cualquier deporte a una argamasa de estadísticas o simples datos? Para muchos, sí. El mayor cambio de Football Manager 2021 es la incorporación del sistema xG, un formato de análisis muy profundo, casi mágico, que nos puede ayudar a calibrar la precisión de nuestro conjunto ante la portería o un potencial gol. Esta característica semiprofesional, muy valorada por los entrenadores y profesionales del fútbol a día de hoy, evalúa la calidad de nuestros tiros a portería, y de verdad, nos ha dejado boquiabiertos. Es funcional, muy útil a la larga, y en más de una ocasión nos ha permitido enmendar problemas con nuestros delanteros o con nuestras tácticas ofensivas. En combinación con los informes de los analistas antes, durante y después de los partidos, nos ofrecen una auténtica experiencia 360º en lo referente al estudio y la observación de nuestro rendimiento. En Football Manager 2021 nos podemos beneficiar de una ingente cantidad de informes y de datos, desde reportes mensuales provenientes del nuevo analista de rendimiento a detalles semanales que permiten descubrir problemas concretos en los entrenamientos o el desempeño de jugadores, todo ello con nuevos gráficos y mapas de datos mucho más claros. Las estadísticas son muy útiles, no las toméis como algo accesorio, pero comprendemos que muchos entrenadores decidirán delegar en otros este tipo de tareas por lo complejas que pueden ser a simple vista.
Inteligencia artificial: más listos fuera y dentro de la cancha
Si lo de fuera es importante, y los cambios visuales y estéticos son decisivos en un juego como Football Manager 2021, también lo son los ajustes en la simulación. No olvidemos que en Sports Interactive se pasan los años naturales viendo partidos, analizando datos, revisando cientos de miles de estrategias, comportamientos y encuentros, y trasladándolo todo al juego. El logro técnico que esto supone se ha reflejado en el motor de partidos y en la inteligencia artificial, con decisiones rápidas que tienen efectos directos en el partido, y con jugadores que toman elecciones en el encuentro cada cuarto de segundo, analizando en tiempo real lo que sucede a su alrededor y jugando en función de lo que están viendo en ese momento. Esto se traduce a una conciencia defensiva colectiva más precisa con defensores más en sintonía con las amenazas de ataque, siendo capaces de tomar y dejar asignaciones de marcado más rápidamente y de manera orgánica y creíble. El centro del campo es ahora más refinado, se dan más pases de directos y se abandonan los toques interminables, reflejando los ajustes en el fútbol en los últimos años. Sí es cierto que hemos notado más intercepciones y bloqueos de jugadores defensivos en el centro del campo, pero esto se compensa con un último tercio de la cancha más agresivo, con espacios y jugadores que mueven y arrastran a las defensas como los delanteros más pillos. En definitiva: Football Manager 2021 representa los partidos de tal manera que parecen recreaciones de lo que podemos ver en las retransmisiones de las principales ligas europeas.
Estos cambios en la IA se notan también en las nuevas reuniones e interacciones con el personal que trabaja para nosotros mirando cuáles son los talentos del mañana o qué jugadores pueden venirnos genial de cara a reforzar la plantilla. Como ya os comentábamos en el anterior artículo, las nuevas reuniones de fichajes nos permitirán trazar la estrategia a largo plazo del club en el mercado de transacciones, incorporaciones y salidas. Estas reuniones siempre van a tener lugar en el período previo a la transferencia y las ventanas del mercado, un aspecto muy interesante, ya que se nos brinda la posibilidad de estudiar informes, establecer asignaciones y establecer las prioridades para nuestros ojeadores y analistas en los próximos meses. Los contratos y los cierres de acuerdo son más directos, los rodeos se van difuminando, y si queremos ir a por jugador, podemos hacerlo sin demasiadas dilaciones. Como siempre, os recordamos que el videojuego está completamente traducido al español.
Conclusiones finales
Football Manager 2021 es un gran paso adelante. Hablamos de una nueva edición de un título enorme, gigantesco a nivel de experiencia y datos manejados, que busca ser la referencia absoluta en la gestión deportiva. De hecho, si nos permitís la perogrullada, lo es. Versión tras versión se ha esforzado por ofrecer una dinámica de juego realista y completa, muy enfocada en los grandes seguidores de la serie y los grandes amantes del fútbol. Sports Interactive conoce a su público, lo mima con grandes y pequeños ajustes y les presenta el videojuego al que realmente quieren jugar. En esta nueva edición se han centrado en las dinámicas de la conversación, los gestos, los aspectos de la celebración del triunfo y el cambio en el análisis de los datos. El año pasado se establecieron pilares sólidos sobre los que asentar la saga de cara al futuro, y ya están dando sus frutos. Un proyecto como Football Manager puede ser difícil de enfocar o incluso analizar, es un título en constante evolución, pero creemos que está alcanzando su punto dulce: un simulador completo que es capaz de encandilar al neófito y al experto, al amateur y al profesional. Sports Interactive como SEGA han prometido y han cumplido.
Hemos realizado el análisis con un código proporcionado por Cosmocover.