Análisis de Donut County (PC, Xbox One, Switch, PS4, iPhone)

Lo hemos dicho muchas veces: los juegos independientes son una bendición para esta industria, que en una época en la que los costes de desarrollo se disparan, nos permiten disfrutar de experiencias originales y únicas que muy difícilmente obtendríamos a través de las grandes compañías. Hoy os hablamos de otra de ellas: Donut County.

Donuts, mapaches, apps y agujeros

Donut County es un extraño juego difícil de clasificar. En él controlamos un agujero en el suelo, que cuantas más cosas de la superficie se traga, más crece. Es una especie de Katamari a la inversa, pero que, como os podéis imaginar, tiene más chicha de lo que puede parecer en un primer momento.

La jugabilidad es sencillísima: sólo tenemos que mover el agujero para que los objetos caigan en él, empezando por los más pequeños para que vaya creciendo hasta que quepan los más grandes. Aquí ya se va introduciendo un poco de complejidad, pero poco a poco iremos viendo nuevos factores que alteran la mecánica, como agua que nos inunda el agujero u hogueras que lo convierten en una especie de horno.

Así, se van realizando pequeños ajustes a la fórmula que, sin cambiarla por completo, añaden variedad a la experiencia. Hay pequeños puzles, así como algunos desafíos secretos en forma de trofeos. Lo más importante es que todo está envuelto en un sencillo pero efectivo sentido del humor, que nos va a arrancar constantemente una sonrisa con sus chistes y ocurrencias.

Para que os hagáis una idea, la historia trata sobre un mapache que se descarga una aplicación para el móvil que le permite controlar un agujero en el suelo en la vida real, y para desbloquear un dron necesita llegar al nivel 10. En su misión por conseguir este obsequio, nuestro amigo el mapache se ha tragado el pueblo entero, y ahora los vecinos están reprochándole su egoísmo. Partiendo de esa base, os podéis imaginar las cosas que vamos a encontrar en Donut County.

La mayor pega que muchos usuarios pueden ponerle es su duración. Se puede completar en unas dos horas, aunque, como decíamos, tiene desafíos adicionales para aumentarla un poco más. Por los 15 euros que cuesta (o 5,50 si lo jugamos en iOS) nos parece que ofrece una experiencia más que satisfactoria, y siempre podemos esperar a una oferta para pillarlo a precio reducido.

Un sencillo mundo de color

Donut County, como veis en las pantallas, es un juego bastante sencillo en lo gráfico, con texturas planas y baja carga poligonal, pero con una acertadísima y muy efectiva dirección artística que funciona genial. Los escenarios y personajes tienen bastante personalidad, que se desarrolla a través de una serie de secuencias en las que se va desvelando la historia. Tampoco es que necesite crear un mundo inolvidable, vamos.

Dentro de esa sencillez técnica que mencionamos, hay que destacar la física del agujero y los objetos. Está diseñado de manera que tengamos que jugar con la inclinación y la inercia para tragar ciertos objetos, haciéndolo muy satisfactorio. Eso sí, las físicas nos han dado algún problemilla puntual, como hacer que ciertos objetos se deslicen fuera del alcance del agujero, obligándonos a cargar el último punto de control. No es nada habitual, pero puede pasar.

Por lo demás, poca pega le podemos poner. La aventura está envuelta en melodías que le sientan como un guante, y además nos llega traducido al castellano para no perdernos ni un detalle de la surrealista historia de BK, el mapache del dron.

Un juego para sonreír y desconectar

Donut County es uno de esos juegos cuyas únicas expectativas son hacer que el jugador se divierta y pase un buen rato sin demasiadas complicaciones; ofrecer algo original y fresco y arrancar unas cuantas sonrisas. Ya hemos dicho varias veces que nos gustan mucho los juegos "de buen corazón", geniales para desconectar y experimentar algo diferente, y éste es uno de ellos.

Obviamente, la duración (dos horas que pueden extenderse un poco más con los desafíos/trofeos) puede ser un problema para algunos jugadores, pero creemos que el precio no es demasiado elevado, y no extenderse innecesariamente le permite ofrecer siempre situaciones nuevas y variadas. Si lo que habéis visto o leído os despierta un mínimo de interés, dadle una oportunidad.

Hemos realizado este análisis en PS4 Pro gracias a un código de descarga proporcionado por Anapurna Interactive.