Análisis de Baldur's Gate 2: Enhanced Edition (PC, Android, iPhone)

Analizar la revisión de una de las mayores obras maestras que nos ha ofrecido el mundo de los videojuegos no es un trabajo fácil, especialmente cuando se trata de un título como Baldur's Gate II, un juego que consiguió marcar prácticamente a todo aquel que tuvo la ocasión de disfrutarlo en su momento. Han pasado ya trece años desde entonces y todavía sigue superando en muchísimos aspectos a casi cualquier producción actual, hasta el punto de que la propia BioWare, su desarrolladora original, ha admitido que no serán capaces de volver a hacer algo tan grande y con una cantidad de contenidos tan abrumadora.

Tras la ligera decepción que supuso la Enhanced Edition del primer juego, la cual llegó al mercado plagada de bugs y errores técnicos (algo que ha terminado de solucionarse recientemente de forma oficial, ya que hasta hace poco para poderlo disfrutar en condiciones no quedaba otra que echar mano del trabajo realizado por la comunidad de modders), ahora Beamdog lo vuelve a intentar con su secuela. ¿Estarán esta vez a la altura de la leyenda?

El buen rol de la vieja escuela en estado puro

Argumentalmente esta secuela nos sitúa poco después del final del primer juego, permitiéndonos importar nuestras partidas y personajes tanto de la Enhanced Edition como de la versión original (os recomendamos encarecidamente que juguéis a su primera parte antes de adentraros en esta, ya que si bien podréis seguir su argumento sin demasiados problemas, no lo disfrutaréis igual).

Al comienzo despertaremos en una especie de prisión sin saber muy bien qué es lo que estamos haciendo allí, aunque hay algo de lo que sí seremos muy conscientes: están torturándonos y experimentando con nosotros. En algún momento de nuestro cautiverio y sin saber cuánto tiempo ha pasado desde que estamos allí, finalmente veremos cómo alguien nos abre la puerta de la celda y nos pide que le ayudemos a salir de allí.

A partir de ahí asistiremos al comienzo de una aventura única con una trama que nos tendrá enganchados de principio a fin y que se va adaptando a las decisiones que vayamos tomando. Y todo ello sin contar la enorme lista de personajes que se podrán unir a nuestra causa, cada uno con su propia personalidad e historia personal, las cuales podremos descubrir poco a poco a medida que nos relacionemos con ellos. Aunque mucho ojo, que al igual que pueden convertirse en valiosos compañeros de aventuras también pueden acabar traicionándonos o declarándose nuestros enemigos mortales, por lo que más os vale andaros con cuidado a la hora de decidir con quién os juntáis.

A nivel jugable sigue los pasos de su primera parte, por lo que volvemos a encontrarnos con una aventura de rol totalmente basada en la segunda edición de Dungeons and Dragons. Esto incluye tiradas de dados que el sistema realiza automáticamente y sin interrumpir la acción en el momento que atacamos o recibimos daño para calcular lo que ocurre, una enorme cantidad de opciones y posibilidades a la hora de crear nuestro personaje y evolucionarlo a nivel de ficha, y un gigantesco número de reglas a tener en cuenta, ya sea para cosas básicas como el uso de hechizos o para otras más concretas, como las características específicas de cada enemigo.

Dada la gran cantidad de cosas a las que nos tocará prestarle atención y que tendremos que gestionar, cuando combatamos se nos permitirá pausar la acción en cualquier momento para dar las órdenes que queramos a los miembros de nuestro grupo y así tenerlo todo controlado. El posicionamiento en estas batallas es de suma importancia, ya sea para impedir que algunos enemigos lleguen hasta nuestros magos y arqueros en un pasillo estrecho o para evitar que el área de nuestros hechizos y habilidades dañe también a nuestros aliados, por lo que tener un buen control del campo de batalla será clave.

Tenemos que destacar que su sistema de juego, su dificultad y sus controles pueden parecer demasiado arcaicos para cualquiera que esté acostumbrado a los títulos de hoy en día o no lo probara cuando se lanzó originalmente, lo que supondrá una barrera de entrada importante para muchos jugadores que quieran descubrir por primera vez por qué se le considera uno de los mayores referentes del rol occidental. El resto, sencillamente volveréis a disfrutarlo como el primer día dado lo enormemente rejugable que resulta (aunque si lleváis varios años sin tocarlo os costará un poco volverle a pillar el pulso), así que no os extrañéis cuando miréis el reloj tras haber iniciado el programa y descubráis que ya han pasado varias horas desde que empezasteis a jugar.

Pero todo esto eran cosas ya presentes en su versión original, así que muchos os preguntaréis qué es lo nuevo que trae esta edición mejorada. Por un lado uno de los cambios más importantes lo encontramos en el rediseño que ha sufrido la interfaz, la cual funciona mucho mejor que la original y resulta algo más manejable. También se ha añadido un nuevo personaje jugable (bastante interesante por cierto) con su propia historia, romance y habilidades, así como los tres aliados inéditos de la Enhanced Edition del primer juego y varias zonas nuevas en las que aventurarnos.

Tampoco falta en esta reedición su expansión Throne of Bhaal, la cual puso punto y final a esta épica historia de una forma más que digna y propiciándonos muchas más horas de diversión por el camino. Además se ha añadido una campaña totalmente nueva, The Black Pits 2, que continúa con lo visto en la primera parte. Básicamente se trata de una arena de combate donde tendremos que ir superando diversas batallas. La verdad es que no es nada del otro mundo y se trata de un extra muy prescindible.

También se han incluido una gran cantidad de pequeñas mejoras y ajustes que ayudan a pulir todavía más si cabe la experiencia de juego del original, aunque en realidad casi todas ellas ya las habíamos visto gracias a la comunidad de modders, lo que hace que al final esta edición se sienta como un pack del mismo Baldur's Gate II de siempre con los mods ya incluidos y alguna que otra novedad.

Respecto al multijugador, decir que por fin podremos buscar y crear partidas a través de la red de Beamdog, por lo que no nos veremos obligados a recurrir nuevamente al viejo método de conexión por IP para poder aventurarnos en los Reinos junto a nuestros amigos. Nos gustaría deciros que funciona correctamente, pero al no haberse lanzado el juego todavía nos ha sido imposible encontrar una sola partida para comprobarlo.

En cuanto a su apartado técnico, mencionar que al menos en lo que hemos podido jugar nosotros no hemos detectado tantísimos bugs y errores como en la primera Enhanced Edition. Haberlos los hay, pero no es ni por asomo lo que sufrimos el año pasado (aunque también puede ser que hayamos tenido mucha suerte).

Por lo demás, ahora el juego luce perfectamente en panorámico y los escenarios cuentan con algo más de detalle. Eso sí, como se os ocurra hacer zoom preparaos para empezar a ver píxeles por todos lados. Las animaciones por su parte siguen siendo igual de rígidas y robóticas que antes y el diseño de los personajes se podría haber mejorado. En lo que respecta a los vídeos, esta vez se han mantenido los originales, aunque no han sido restaurados para lucir en alta definición y en panorámico.

Finalmente, su apartado sonoro sigue siendo tan bueno como ya lo era en su momento, con una gran banda sonora (aunque con temas demasiado cortos) a la cual hay que sumarles algunas nuevas composiciones, las cuales nos han parecido estar por debajo de las clásicas. El doblaje se encuentra totalmente en inglés (bastante bueno por cierto), y aunque muchos echaréis de menos sus voces españolas, seguro que es algo que los modders se acabarán encargando de solucionar. En cuanto a los textos, la versión para análisis que se nos ha facilitado está totalmente en inglés y la propia Beamdog no ha terminado de aclarar si llegarán en nuestra lengua, aunque es de esperar que sí sea así, al igual que ocurrió con la anterior Enhanced Edition.

Conclusiones

Baldur's Gate II es un juego que todo el mundo al que le guste mínimamente el rol y los buenos juegos debería de probar al menos una vez en su vida. Profundo, repleto de detalles y posibilidades, con una historia inolvidable, rejugable hasta la médula y con una ingente cantidad de horas de juego por delante. Para muchos es un título por el que no pasan los años (entre los cuales nos incluimos) y que todavía a día de hoy consigue sorprendernos.

Sin embargo, esta Enhanced Edition, al igual que la primera, se siente como una oportunidad perdida de haber podido hacer algo más que una simple restauración que de verdad nos sirviera como excusa para volverlo a jugar. Además, considerando que casi todo lo que ofrece podemos conseguirlo modeando la versión original (la cual se puede conseguir por apenas 10 dólares en GOG.com, a menor precio incluso si lo compráis de oferta) y que sus extras no son nada del otro mundo, los 25 euros que cuesta se nos antojan demasiado caros.

De todos modos, si nunca habéis podido disfrutar de esta magnífica aventura, no os importa que su apartado gráfico tenga más de una década ni que su apartado jugable pueda parecer muy antiguo, y no tenéis ganas de poneros a buscar mods, la edición mejorada de Baldur's Gate II que ha realizado Beamdog puede ser una buena oportunidad para descubrir por fin todo lo que os habéis estado perdiendo hasta ahora.